El estrés laboral lleva presente en nuestras vidas mucho tiempo. La dificultad de conciliar la vida laboral y familiar, llegar puntual al trabajo o la infinidad de reuniones diarias, hacían que sobrevivir a este ritmo de vida fuera todo un reto. Eran muchos los que creían que el teletrabajo cambiaría esto, pero con el nuevo modelo de trabajo no todo son ventajas. Unos pequeños cambios en tu vida y la ayuda de la última tecnología de Fitbit Sense, te ayudarán a gestionarlo mejor.
La llegada del teletrabajo
Lo cierto es que el teletrabajo llegó a nuestras vidas en un momento de tensión y preocupación, en medio de una pandemia mundial y en un panorama de desconocimiento. Sin embargo, muchos acogieron este nuevo modelo de trabajo como una oportunidad de hacer que ese estrés desapareciese o al menos se redujese. Y aunque es cierto que, gracias a esta nueva forma de trabajar, es más fácil poder compartir más tiempo con nuestra gente o reducir el tiempo de desplazamiento a nuestro lugar de trabajo, no todo son ventajas.
Son muchos los estudios que afirman que el teletrabajo es una fuente de estrés. Por ejemplo, el hecho de no tener un horario concreto, hace que las jornadas se alarguen. Las llamadas de última hora, los favores fuera del horario laboral o los correos a deshoras hacen que desconectar del trabajo a veces sea imposible.
Otro ‘handicap’ de esta nueva forma de trabajo es el hecho de que nuestra casa es nuestra oficina, es decir, nuestro espacio familiar ahora también es nuestro espacio laboral, lo que implica que nunca dejamos físicamente nuestro puesto de trabajo. Pero si hay algo claro es que el teletrabajo ha venido para quedarse y por ello tenemos que aprender a convivir con ello. ¿Cómo? Os damos algunas claves.
Tres consejos para combatir el estrés
1. Define tu zona de trabajo
En primer lugar, es vital tener nuestra zona de trabajo bien definida. La idea es asociar el trabajo con una sola estancia de la vivienda, para así seguir asociando el resto de las habitaciones con el hogar, la familia y el descanso.
2. Establece un horario
No contestes llamadas, correos, mensajes u otros temas de trabajo fuera de nuestro horario establecido. Es vital establecer debidamente los horarios de trabajo y respetar los de descanso; el estar en casa en nuestro tiempo libre no implica alargar nuestra jornada.
3. La tecnología, tu mejor aliado
La tecnología también puede ser una gran aliada para combatir este tipo de problemas. Un ejemplo es Fitbit Sense, el nuevo smartwatch de Fitbit que ayuda a combatir el estrés.
¿Cómo lo hace? Pues con su nuevo y exclusivo sensor EDA, que mide la actividad electrodérmica directamente desde tu muñeca y detecta pequeños cambios eléctricos en tu piel con tan solo poner tu mano sobre el dispositivo. Como consecuencia, te ayuda a entender cómo responde tu cuerpo a algunos factores estresantes y, por tanto, te ayuda a combatir el estrés. Y no, no hay otro dispositivo en el mundo capaz de medir los cambios que manifiesta tu cuerpo como respuesta al estrés, porque Fitbit Sense es el primer y único smartwatch en el mercado que incorpora este sensor EDA.
Los miembros de la app Fitbit Premium tendrán también acceso a un desglose de cómo se calcula el nivel de gestión del estrés. Fitbit Sense tiene en 10 entradas biométricas entre las que encontramos el balance del esfuerzo (es decir, el impacto de la actividad), la capacidad de respuesta (que engloba la frecuencia cardiaca, los cambios que puedan producirse en ella y la actividad electrodérmica que registra el escáner EDA) y los patrones de sueño que miden su calidad. De esta forma Fitbit Sense calcula tu nivel de estrés y te ayuda a combatirlo, siendo tu mejor aliado para conocerte a ti mismo y poder poner remedio a los altos niveles de estrés a los que estamos sometidos.
Además, uno de los efectos del estrés a nivel físico es la aceleración del ritmo cardiaco y la respiración. Por ello, Sense incorpora también un nuevo sensor de análisis múltiple que, junto a la tecnología PurePulse 2.0, realiza un seguimiento continuo de tu frecuencia cardiaca. Además, Sense te notifica si hay algún cambio brusco o anomalía en tu ritmo cardiaco para conocer de dónde puede venir ese estrés, en qué situaciones se enfatiza y ayudándote así a poder poner remedio al problema. ¿No es genial?