Mirentxu Álvarez, concursante de ‘Gran Hermano 10’, ha acudido a la pasarela para pedir un cambio porque su nieta le ha insistido en ello. Ha acudido con su mascota, Chester, un precioso perro con el que Pelayo ha hecho migas muy rápido. Ambos se han puesto a jugar y se lo han pasado bomba.