Indagando en la vida de Marimar, Cristina se ha dado cuenta de que –como le ha dicho- tiene “un poco de morro”. La concursante le ha contado que empezó a trabajar muy tarde, con 33 años, y que, sus 55, todavía vive con su madre, que es la que se encarga de hacer la casa. “Ella es muy maniática y yo no hago nunca ni la cama, ni pongo la mesa, ni nada”. La madre ha estado en plató y hemos de decir que está estupenda.