Por primera vez, Cristina Rodríguez ha confesado que se ha sentido “perdida y perpleja” a la hora de hacer un cambio. Marimar es una persona muy peculiar, que ya tiene 55 años pero que le gusta llevar un look más juvenil. Cuando ha salido de nuevo a la pasarela, sus dos compañeros creen que le ha puesto un look muy fresco pero que alimenta su “fantasía adolescente”.