Natalia tenía un gran reto por delante: cambiar a María, a quien le gusta más la ropa oscura y holgada, pero sin que perdiera su identidad. El proceso ha sido duro en algunos momentos – María se acomplejaba por su bello corporal pero lo pasó fatal en una sesión de depilación- pero, el resultado, como ha dicho Cristina Rodríguez, ¡es espectacular!