Rovinj: un respiro medieval
En esta pequeña ruta por la que os estoy llevando por Croacia hoy llegamos a mi ciudad favorita. La que más me gustó y en la que más disfruté en esos días. Es una ciudad especial, muy virgen todavía y con una reminiscencia medival importante. Rovinj fue también veneciana y ya sabéis lo que dicen, el que tuvo retuvo. Por eso conserva edificios maravillosos. Nada más llegar a ella me recordó a Venecia. Con el sol de cara y divisando torres como la que véis en la foto hay que reconocer que algo recuerda.
Perdón a los devotos de la ciudad italiana. Ya sé que es única, pero hay que decir que extendieron muy bien su influencia y Rovinj fue veneciana durante siglos. Mirad esta otra imagen. ¿No os recuerda aunque sea un poquito a la villa del Veneto? Encontré claramente escrito en varios sitios el lema del León: "Uneté a mi que soy el León de Venecia, jefe de la tierra, los mares y las estrellas". Francamente yo creo que su huella sigue muy presente
El barrio más cercano al mar fue marinero y los palacios que había cerca se fueron abandonando poco a poco. Ahora se pueden encontrar comerciantes y a primera hora, un mercado con frutas, verduras y buenos productos de la tierra.
Llama la atención la cantidad de casas, casonas y caserones que a simple vista se divisan en los primeros pasos por el centro de la ciudad. Y nos cuentan que es que es muy difícil comprar algunos de ellos. Resulta que lo habitual era comprar una casa entre varios y compartir los pisos.
El resultado es que algunos inmuebles tienen actualmente más de 100 herederos y es casi imposible poner a todos de acuerdo para vender, alquilar o traspasar la propiedad. Una pena, aunque eso no quita un ápice de encanto a la ciudad. Los artistas aparecen rápido. Bien es cierto que tiene un casco antiguo bien conservado y que los turistas no se resisten a pasar de largo sin entrar y disfrutar de Rovinj.
Lo bueno, aunque ya lo he dicho, insisto, porque la artesanía local me pareció muy bonita y curiosa. Y no es difícil ver a los artesanos trabajar en plena calle o con las puertas y ventanas de par en par. Quizá es por allí por donde llega la inspiración y también la curiosidad de los visitantes.
Y si hablamos de artistas...ojo con las artistas PELUQUERAS que al parecer hay en la zona. Es tradicional para celebraciones importantes trabajar el pelo como veis en ésta foto.
Puedo asegurar que me quedé con muchas ganas de hacerme una trenza bien elaborada como cualquiera de esas. Seguimos, el mejor momento para llegar es la tarde. No os preocupéis si no tenéis hotel
Algo encontraréis seguro. Lo importante es disfrutar del casco antiguo, la ciudad y los rincones que os puedan ofrecer experiencias...Y aquí viene mi recomendación de hoy.
VALENTINO. COCKTAIL AND CHAMPAGNE BAR
Lo mejor del Valentino no es el nombre, ni los "cocktail" , que son ricos y los diferentes tipos de "champagne" que tienen, que tienen de todo. Lo mejor del Valentino es el sitio. Su terraza está en las rocas a la misma orilla del mar.
Vamos que si os dais un traspié podéis aterrizar en el agua. Eso sí, la vista es francamente fabulosa. Digo que mejor llegar a Rovinj por la tarde porque a sí podréis disfrutar de una puesta del sol inolvidable.
¡Increíble!. Lo dicho, lo mejor del Valentino no son los "cocktail" ni el "champagne" es el sitio. Un placer para dioses reservado para unos pocos. Lo que es yo, desde luego, disfruté como una enana.