Qué comer, qué beber en Gers
Gers es conocido por sus delicias gastronómicas, así que espero que no leáis esto con hambre, porque si es así os aseguro que saldréis disparados a la nevera. Viandas, vinos, patés,…Hay de todo y todo con mucha calidad, así que preparad vuestro estómago.
Ya os he contado que en Gascuña las Bodegas Monluc producen mi aperitivo francés favorito. Se llama la ‘Pousse Rapière’ y es un espumoso con toques de naranja absolutamente delicioso y muy sorprendente. No se encuentra en ningún sitio más, así que aprovechad. En cualquier caso sabéis que los vinos franceses tienen mucha fama y la verdad es que será por algo.
Entre todas las bodegas de los pequeños productores hay una de la que me apetece mucho hablaros. Se trata de la que regenta Jean Marie Terraube. ¿Su nombre?, ‘Domaine de Magnaut’. No es muy grande, pero sorprenden la cantidad de premios que a estas alturas ya tiene en su haber este joven agricultor que se centra en los productos locales, que no es poco. Hablamos fundamentalmente del Floc, del Armagnac y del vino, por supuesto.
Aprendió el oficio de su padre y espera podérselo enseñar a su hija pequeña. Jean Marie estudió etnología en Bordeaux y quizá su éxito y el de su bodega reside en la mezcla de modernidad y tradición que destilan sus caldos. 6 hectáreas de terreno que albergan distintas variedades de uva. Quizá la más llamativa es la llamada ‘colombard’, una cepa típica gascona que está en el 30% de su terreno y de la que sale un vino blanco estupendo que él recomienda “beber con los amigos”.
Seguimos nuestro viaje gastronómico gascón haciendo una parada en ‘L’Alamboutic’, un establecimiento de Fources regentado por gente joven y con ganas que propone productos locales. Los lunes organizan jornadas con los viticultores de la zona en las que se puede charlar y degustar sus productos. Me atendió Cécile y me explicó el concepto de tienda que han logrado poner en marcha durante estos dos años. Aquí encontraréis delicatesen suficientes para daros un capricho y ya de paso chuparos los dedos.
Veréis ‘Carat de Mélon’, perlas de melón, ‘crumble gascon’, ‘canele d’armagnac’ o ‘baba gascon’ de la marca ‘Glosek’, y también ‘cerises noire au vin de gascogne’ , cerezas negras con vino gascón…Y lo voy a dejar ahí porque presiento que se nos está haciendo la boca agua a todos. Hablando de melón, es famoso el que se produce en Lectoure, aunque la verdad es que todos los de la zona son muy ricos. Así que si el que encontráis es de La Romieu, no dudéis. Estará delicioso, seguro.
Ya os he contado que la Gascuña es una región eminentemente agrícola, así que no hace falta que os diga que los productos como el aceite son especialmente buenos. Algunos agricultores lo enriquecen con olores como tomillo, romero o el ajo tan bueno por éstas tierras. Si lo encontráis en algún mercado en la calle no dudéis en haceros con una buena botella
Dos últimas recomendaciones para ésta ruta gastronómica que hemos iniciado por el Gers. La primera, no dejéis de probar la ‘croustade pomme’, un postre típico de la región absolutamente delicios. Se trata de capas y capas una ligera masa que se deshace en la boca.
Y la última tiene que ver con el manjar más típico de la zona, el paté. En Saint Puy encontraréis el proyecto de Christine, se llama “Terre Blanche”, una fábrica artesanal especializada en la crianza y la degustación del pato. Es una granja que la dueña ha levantado desde cero.
Con el trabajo y el esfuerzo de todos los días ha logrado poner en marcha un proyecto pegado a la tierra y a la producción que no podéis dejar de visitar si estáis en la zona. Bueno pues ya veis que hay razones gastronómicas de sobra para hacer un buen viaje al Gers.