Gracias Colombia
Aquí termina mi aventura en la Ruta Quetzal BBVA por tierras de Colombia. Después de 12 días agotadores, pero increíbles, regresamos a España con la sensación de que este viaje realmente te puede cambiar la vida. Gracias a Colombia y a sus gentes por su amabilidad, por su hospitalidad, por enseñarnos a descubrir que con muy poco se puede hacer mucho, por recibirnos en cada pueblo que hemos visitado como personas realmente importantes.
Gracias a los ruteros por enseñarnos que a pesar del cansancio y las dificultades se puede levantar uno cada mañana con alegría para disfrutar “del día que estábamos esperando”, por demostrar que una tormenta en plena noche nunca les quitará las ganas de seguir viviendo esta aventura y por recordarnos que valores como el compañerismo y la amistad son lo que realmente importa.
Gracias a los monitores que día tras día acompañan a los jóvenes en el que para muchos será “el viaje de su vida”. Ellos, que han llegado hasta aquí superando un complicado proceso de selección, nos han dado una lección de fortaleza sin dejar que ni un solo día les supere el cansancio para ayudar a los ruteros a que saquen todo el jugo a este viaje único e irrepetible.
Gracias a todas y cada una de las personas que nos han acompañado por nuestro periplo por tierras colombianas, a los guías que nos han enseñado cada rinconcito de sus pueblos y ciudades, a los que nos han dado de comer siempre con una sonrisa, a los que han tocado y bailado para nosotros y a todos los que nos han hecho sentir como en casa.
Gracias a los compañeros de la prensa con los que he compartido estas dos semanas de aventuras, cansancio, risas, trabajo, emociones… Y mucho ánimo a los que siguen en Colombia dándonos el relevo en este viaje.
La Ruta Quetzal BBVA 2012 termina para mi aunque su recuerdo y sus enseñanzas continuarán para siempre porque realmente esta ha sido una aventura de esas que nunca se olvidan.
Foto: Ángel Colina