Imagino que va a ser difícil que en esta Eurocopa se escuchen voces discordantes con el césped. Una de las cosas que más llaman la atención son los mimos con los que se trabaja el tablero de juego en todos y cada uno de los estadios en los que se disputa el torneo. En Niza, el 'verde' está algo irregular por algunas zonas pegadas al córner, pero nadie podrá decir que no está cuidado. Cuatro ventiladores gigantes se encargan de mantenerlo a su temperatura más óptima para combatir la humedad y las altas temperaturas que nos han recibido en la ciudad. Se prevee lluvia, sí, pero, caiga o no caiga, es tal la sensación térmica que los ventiladores trabajan sin descanso en pos de un césped fresquito.