El ambiente es espectacular, ha dicho desafiante Jordi Alba en la sala de prensa, y gran parte de todo ese buen rollo en la Roja se gesta aquí, en el Hotel Atalante Relais Thalasso, en St. Marie de Ré. Acercarse a sus puertas era todo una quimera hasta que hoy la federación española lo ha abierto de para en par para que podamos conocer dónde preparan los partidos, donde se relajan y, lo más importante, dónde sueñan nuestros internacionales con hacer algo grande en esta Eurocopa. Después de esta visita guiada no nos cabe ninguna duda: a Ramos, Iniesta y compañía no les va a faltar de nada durante su estancia en la isla. Equipamiento full-equipe y la tranquilidad que da saberse aislado de cualquier conato de bullicio que, a día de hoy, sigue siendo imposible en estas tierras.
Los jugadores no podrán decir que no tienen claras las líneas maestras de esta convocatoria. A lo largo y ancho de todo el complejo hotelero se ven los mismos eslóganes que dan la bienvenida al equipo en su llegada al campo de entrenamiento. Las puertas del hotel apelan a la unidad y el sacrificio y estos mismos valores acompañan a los jugadores desde las ventanas cada vez que se sientan en las mesas de su comedor.
No hay forma humana de dar un paso por el hotel y no encontrarte con una de estas frases... o con un periódico español. Del Bosque siempre ha reconocido que le gusta estar al tanto de todo lo que se publica sobre su equipo y hoy hemos podido constatar que prácticamente todas las cabeceras españolas están presentes en la recepción del hotel o en la puerta de la sala de reuniones. Vicente y los jugadores saben qué se dice de ellos en todo momento.Y para muestra, un botón. En la sala donde preparan los partidos aún estaban los periódicos de la derrota ante Croacia...
Decían los periodistas más veteranos del lugar que no era el hotel más lujoso en el que ha estado la selección española. Las habitaciones en esta ocasión no serán motivo de envidia ni lo más llamativo del recinto, aunque sus precios oscilen entre 265 y los 646 euros. Da la sensación que lo mejor del hotel son las zonas comunes. En el lounge, donde los jugadores pueden juntarse a charlar, jugar a las cartas o simplemente relajarse en compañía, hay imágenes de los jugadores en las paredes y dos libros, de Jacob D'Ancôn y de Diane Setterfield. No sabemos si alguno lo habrá si quiera ojeado, pero estar, están.
Más frecuentado por todos es el gimnasio. Todas las mañanas pasan por ahí los hombres de Vicente Del Bosque para completar el trabajo físico de la tarde. Es pequeño en comparación con cualquiera que tengáis en la cabeza y en él tan clave como las mancuernas es el equipo de música. Desconocemos si Juanfran será el hombre clave con España como lo es con el Atleti en materia musical pero sí sabemos que cuando el equipo empieza a sonar, lo hace con el volumen máximo.
Seguro que desde la zona de aguas la pueden escuchar. Está justo al lado de gym y cuenta con dos piscinas termales en las que los jugadores no podrán correr, tirarse de cabeza ni, por supuesto, a bomba. No lo decimos nosotros, lo dice el hotel. Son los detalles de una visita que ha estado siempre 'vigilada' por Sergio, el bulldog francés rojo que ocupa toda la recepción y que fue bautizado por Ramos nada más llegar. Él, con su bufanda de España al cuello, espera que vuelvan de París con el pase a cuartos firmado.