Me la juego: estos días, el emoji que más está circulando por los wassaps de las gentes de Ré cada vez que hablan de la selección española es el de la bailarina. Tal vez el de la paella si ya lo tienen en sus móviles y son habituales de las costas levantinas en verano. Pero creo que no me estoy equivocando mucho, la verdad, si apuesto por uno de ellos. A España se la ha recibido con los brazos bien abiertos en esta isla tranquila de gentes bien amables. Este jueves, el diario de La Rochelle, 'Sud Ouest', lleva en portada, destacado al lado de su cabecera que "los españoles ya han ocupado sus aposentos en Ré" y, en páginas interiores, amplían: "los invitados más especiales ya han llegado". Y ahí está la clave, en que la llegada de los chicos de Del Bosque es algo tan especial que ha despertado una ola de 'hispanomanía' old school sin precedentes que, en España, creíamos pasada.
En Ré, llamadme loco, mucho me temo que hay personas que conservan una imagen de nosotros, cómo diríamos, un tanto torera. Típica, si queréis. Tal vez tópica. Y no lo digo sólo por 'el niño el peaje' que nos da la bienvenida a la isla cada vez que cruzamos el puente que nos comunica con la selección a nueve euros el trayecto.
No, a este torero-pescador y a su amiga la sevillana-camarera ya los conocíamos por los 'flyers' de bienvenida que se trabajaron las autoridades locales para promocionar nuestra visita. Lo digo también por este concurso que ha lanzado la oficina de turismo de la Isla de Ré y cuyo resultado, en algunos casos, debe llevar a nuestras autoridades turísticas a hacerse algunas preguntas tipo... ¿seguimos siendo el país de los toros y el flamenco fuera de nuestras fronteras?
La dinámica del concurso de la oficina de turismo en su página oficial en Facebook era muy simple. Se pedía a los concursantes que subieran una foto de bienvenida para la Selección a cambio de algún reconocimiento especial en forma de accesos a los entrenamientos o entradas para eventos especiales. La foto debía contener, o así lo entendieron sus participantes, algo que la asociara con nuestra forma de ser, nuestra bandera, qué sé yo... Y he aquí, señores, la sorpresa para unos ojos nacidos en Madrid. Cuando creíamos que ciertos lugares comunes sobre nuestros usos y costumbres habían desaparecido fuera de nuestras fronteras, voilá... España siguen siendo toros, toreros y olé y como sea 'el Niño del Peaje' el juez único del concurso tengo muy claro que la decisión del ganador va a estar muy reñida. Atentis...