Trabajadores locales: Nuestros compañeros ‘made in Honduras’
La producción de ‘Supervivientes’ genera una cantidad considerable de empleos internacionales. El equipo del programa lo conformamos 127 trabajadores desplazados desde tres países diferentes (españoles, italianos y dominicanos). Pero el staff se completa con 60 puestos de trabajo de trabajadores hondureños. El programa supone un dinamizador estupendo para la economía de esta zona gracias a los empleos que genera la grabación del reality show.
Precisamente hoy quiero hablar de nuestros compañeros locales, los ‘catrachos’ como les gusta definirse a los hondureños: barqueros, vigilantes de seguridad de las playas, mozos de producción, asistentes técnicos, cocineros… Labores imprescindibles para el buen desarrollo del programa que corren a cargo de nuestros compañeros ‘Made in Honduras’
Además del apoyo profesional nuestros compañeros nos sirven de guías vitales durante nuestros tres meses como forasteros. Son nuestros oráculos para multitud de actividades cotidianas: Las aplicaciones de predicción meteorológica de nuestros smartphones no aciertan una, pero un barquero con una simple mirada al cielo o al estado de la mar clava a qué hora saldrá el sol o cuando caerá una sorpresiva tormenta tropical. ¿Quieres tomar un típico desayuno hondureño? ¡Pregúntale a la cocinera que te de la receta de las ‘baleadas’! El otro día a un compañero cámara se le antojó comer pescado y el vigilante nocturno, que también es pescador, le facilitó una pieza recién capturada para su deleite… ¡Un auténtico privilegio!
La convivencia entre unos y otros genera un interesante mestizaje de culturas, supone para los trabajadores de un lado y otro del Atlántico una experiencia muy enriquecedora. A mi me encanta escuchar sus historias de vida y aprender de sus vivencias. Ellos también escuchan atentamente nuestras historias de la vida cotidiana de España y todos coinciden en decir que ahora les toca a ellos cruzar el charco en el sentido inverso.
El final del programa se acerca y toca el momento de las despedidas. “¿Volveremos a vernos el año que viene?” preguntan. Nosotros, los españoles, solemos responder encogiendo los hombros. Quien sabe, llevamos despidiéndonos así desde 2007, el primer año que el programa se grabó en Honduras. ¡Ojalá sea que sí!