Nuestra última cita

telecinco.es 09/03/2011 16:30

Prefiero tomarlo con sentido del humor. Ayer escribí en caliente el post que os colgué y habéis sido muchos los que lo habéis comentado. Gracias a todos, como siempre. Digo que prefiero tomármelo con sentido del humor porque me parece la forma más sana para no precipitarme en un agujero negro. Os pongo este montaje fotográfico que me mandaron hace unos días para reafirmar mi actitud; aunque me gustaría, no logro volar ni cambiar la historia de las cosas como hacía nuestro querido Superman.

Tampoco logro entender por qué os enfadáis, los que los hacéis, tanto conmigo. No entiendo qué es lo que no queda claro de mi texto de ayer. En ningún momento afirmo aprobar el comportamiento de estos dos concursantes en las ocasiones – tantas- en que se pelean. No me gusta su forma de discutir, ni las cosas que se dicen, ni cómo se las dicen. Lo que ayer escribí y volvería a hacerlo es que me emocionó su manera de reencontrarse tras las heridas, su forma de llegar al perdón y al entendimiento. Lo que dije es que veo amor en ellos, un amor accidentado, un amor que ha crecido en un lugar complicado pero amor, sin duda.

Me gustaría ser la chica de la foto para sobrevolar por insultos, por malas interpretaciones, por deseos incomprensibles. Me gustaría tener el poder que tenía nuestro héroe para doblar los corazones duros que no aceptan que en las relaciones de pareja hacemos y decimos muchas cosas que no aceptaríamos ni diríamos en frío. Me encantaría vestirme de verdad con ese traje para llegar rápido y sin nudos a los que me leéis. No son fáciles los prejuicios, suelen enturbiar la mirada. Yo los tengo seguro, incluso los debo tener al leer y comentar vuestros escritos. Eso no quiere decir que los acepte, muy al contrario: los rechazo y lucho contra ellos.

Mañana termina GH12. Estoy escribiendo en la casa de Guadalix donde se confecciona el programa. Estoy rodeada de compañeros que perfilan los últimos toques para la noche de mañana. En los monitores de la casa donde viven los concursantes, les veo dormir. Eran 20 y solo quedan tres. Vosotros y solo vosotros sois los que así lo habéis decidido. Nunca me cansaré de defender la pulcritud y la honestidad y la entrega de todas las personas que hacen posible este programa. Repetiré hasta romperme las cuerdas que aquí están los que vosotros con vuestras llamadas y vuestros mensajes, habéis querido ver en la final.

Cada uno de los tres han confeccionado sus sueños. Cada uno sabe que mañana un sobre rojo contendrá sus esperanzas. Los tres creen que van a ganar, los tres son concursantes potentes que creen merecerlo. Mientras vosotros seguís votando, nosotros vamos confeccionando el guión de una noche que, por muchas veces que la hayamos vivido, siempre es una inmensa incógnita.

A mi me gustaría ser la chica de la foto para tener el poder de conseguir que todo saliera a la perfección. Que los tres finalistas nos explicaran cómo y por qué han hecho o dejado de hacer durante estos casi 5 largos meses encerrados y rodeados de cámaras y micrófonos. Mañana, como suele decir El Gato, tenemos una cita y yo no sé vosotros pero yo, acudiré a ella como lo hago siempre: con toda la pasión y el entusiasmo que me provoca este bendito programa.