Al pensar en California se nos viene a la cabeza así a grosso modo, los Beach Boys con la playita (que tampoco es tan espectacular), más playita con Pamela Anderson corriendo a cámara lenta mostrando sus atributos, Jim Morrison tomándose una caña o tropecientas en un bar de mala muerte en Venice que aún a día de hoy existe, pero la mayoría no se imagina a California como la cuna de la legalización de la marihuana medicinal en EE.UU.

En el año 1996 y a través de la proposición 215 se aprobó con un 56% de los votos el uso medicinal de la marihuana, primer estado de la unión en hacerlo. Esto de la proposiciones me encanta y lo deberían implantar en España porque permite a nivel de los distintos estados votar directamente en cosas que conciernen a los ciudadanos sin que haya politiqueos de por medio, o al menos no tantos.

¿Qué suponía esa legalización?

Pues suponía que todos los enfermos de sida, cáncer o enfermedades crónicas tenían derecho a consumir o tener plantas de marihuana (en cantidades controladas) para paliar sus dolencias. La ley ha ido teniendo una serie de modificaciones a lo largo de los años para definir mejor lo que ello conllevaba, en el 2003 se aprueba un proyecto de ley en el que se obliga a los enfermos a tener una tarjeta (Medical Marjuana Card) aprobada por un médico para acceder a los dispensarios. En el 2010 el famoso actor cuya frase “Hasta La Vista Baby” ha sido uno de sus mayores logros interpretativos, aprobó una ley en el 2010 cuando aún era el “governator” donde la posesión de marihuana por debajo de 1 onza (28 gramos más o menos) pasaba de ser un delito menor a una infracción similar a una de tráfico y por las que te ponen una multa de 100 dólares, sin necesidad de ir a juicio.

Desde 1996, diecinueve estados y Washington DF se han unido a esta iniciativa de legalizar la marihuana para uso medicinal. Colorado y el estado de Washington han dado un paso más allá y la han legalizado para uso recreacional (vamos para pasárselo bien).

California ha intentado aprobarlo para uso recreacional pero la proposición no se aprobó. Un 53.5% de la población decidió que no lo querían así. En el 2016 se volverá a plantear la cuestión y según la encuestas un 65% estarían a favor de su legalización lo que permitiría que se controlara y se pagaran impuestos lo que beneficiaria enormemente la resentida economía californiana.

El problema más grande de todo esto es que a nivel federal el consumo de marihuana bien sea para enfermos o por pasárselo bien es ilegal y no es raro ver como los agentes federales irrumpen en ocasiones en dispensarios en California u otros estados donde está legalizada, pero cada vez más se están dando cuenta que donde tienen que poner sus esfuerzos es en ir a por los carteles ilegales, la bandas que controlan este tráfico y evitar la venta a menores en vez de cerrar farmacias legalizadas.

Para los que aún no han visitado california le resultara bastante curioso que encontrar una de estas farmacias puede ser confuso ya que se publicitan con una cruz verde como la farmacias en España, por lo que cuidado con entrar en una de ellas por equivocación para comprarse un ibuprofeno.

El neurocirujano Sanjay Gupta, corresponsal médico en CNN defiende su uso habiendo sido hasta el momento completamente reacio a su consumo por temas de salud. A día de hoy es un gran defensor. Lo que ha visto en pacientes le ha hecho cambiar de idea.

Obviamente las farmacéuticas no están muy por la labor de que esto se legalice debido al embate económico que sufrirían. Las compañías farmacéuticas en EE.UU. son unos de los lobbies con más poder en el país y mientras esté en su mano intentarán evitarlo, pero todo apunta a que la legalización es algo inminente y que no tardará muchos años en llegar.