La política es más bien insípida o amarga pero llega una película capaz de dulcificarla: La cocinera del presidente (dirigida por Ghristian Vincent) . Esta comedia cuenta, sin mucho aderezo, las peripecias de la mujer que presidió durante dos años los fogonos del Elíseo. Hortense Laborie ejerció de chef privado de Mitterrand conquistándolo con sus recetas caseras y tan francesas. Hoy, nos ha visitado la protagonista real de la historia y su parecido con la actriz que la interpreta (Catherine Frot) es asombroso. Eso sí, ella es bastante más salada que su desaborido personaje en la ficción. Nos ha confesado que Mitterrand se relamía con sus pucheros y sus trufas, que la principal característica de una buena cocinera es el valor y no la paciencia, que se puede tener mucho poder pero poco paladar, que heredamos los gusto culinarios de nuestra madre cuando de recién nacidos tomamos el pecho.
La cocinera del presidente es un auténtico manjar para los amantes de la cocina aunque, como película, se queda en un agradable tentempié.
Este estreno nos ha permitido recordar los platos favoritos de nuestros políticos... Aquí os dejo el vídeo... ¡Buen provecho!