08.00: Buenos días. Comments, nicks, criaturas de Ger... captcha abierto. Vamos!
08.03: Dormidos. Digamos queeee... a pierna suelta y destapados. Veo un tunel negro y como conozco datos de las costumbres para dormir de algunos concursantes, pues a saber por qué, me da por pensar cuándo estrenan la guerra de las galaxias, así que voy a buscarlo.
Ah, pues hoy. Qué casualidad. Se me ocurren nuevas similitudes. Rodrigo también duerme. Y el café sí hace. Gracias :)
09.00: Dormidos.
¿Por qué te llaman número 2, rafita? Qué vas a ser segundo plato tú. Pensé que jugabais a lo Bond.
Bueno, pues esta noche hay gala. Alguien expulsado. Y exconcursantes que subirán a la casa a aaaaa... a algo. Y hablando de Star Wars, minipunto a danguerratipas como sustantivo.
Por lo demás, me entero por comments que hay una interferencia y se ha abierto una puerta estelar en la que si entras por el número de teléfono de Ganar Meritxell, apareces en una página de citas con un anuncio de hace cinco días que tiene pinta de ser una canallada de algún antifán.
10.00: Las diez y dormidos.
11.00: Las once y lo mismo.
11.36: Con luz pero sin despertar. Están en ello.
11.40: Meritxell la primera, así va adelantando que ayer quedaron que hoy va a limpiar. Nosotros nos quedamos con tres que se hacen los dormidos.
11.50: Meritxell ha sido vista cruzando el jardín en dirección a la casa con gesto apesadumbrado. Una vez dentro va al almacén a ver si puede comer algo antes del gran trabajo que le espera. La entrada está medio ocupada por un escobón y un recogedor. Y hay una enorme bolsa de basura ahí dentro, seguramente para que se dé por aludida. Así se las traen esos tres. Y los muy golfos durmiendo. Menos mal que los duendecillos han debido fregar por la noche. Todos los vasos y las copas y los platos relucen junto a la pila. Si no fuera por ellos... los duendecillos.
Meritxell pasa la mano por la encimera y quita las migas que caen al suelo, luego dicen que no colabora.
Desayuna cereales con chocolate. Se ha quedado la bolsa abierta tapando entre la cámara y ella y no podemos ver bien como come. Sólo a veces, que se mueve, y saca las fauces por encima de la bolsa.
12.03: Rodrigo y Miguel aparecen en la cocina. Miguel le pregunta si se ha duchado y Meritxell contesta que "aún no, ahora". Rodrigo hace café.
Beatriz también ha amanecido. Super le pide cambio de pilas y ya decía yo que no gritaba Bea.
Versionan "mi gran noche" por "mi última noche". Pero claro, como a Meritxell no le dejan decirlo pero ellos sí, pues mejor se va con su tazón a desayunar donde se pueda expresar.
12.12: En la cocina Miguel cree que se va él y Bea le dice que él que sabe. También le dice que ella no termina de estar nerviosa porque como mañana es su cumple, tiene el aliciente de que si se va, lo celebra con su familia. Que pase lo que pase, se vaya o se quede, para ella está bien. Miguel lo que cree es que ni Meri ni Bea se van hoy. En cuanto a Rodrigo, tiene nervios.
Parece que a los tres les costó dormirse anoche. Rodrigo detalla cómo es descansar junto a Bea, algo así como dormir con un especímen humano de seis años en noche de Reyes. Y es una locura. A Bea le hace mucha gracia la imitación y se ríe.
12.20: Rodrigo le pide a Bea que no le deje desayunando solo y Bea se va diciendo que volverá. Pero Miguel llega antes. "¿Te imaginas que somos dos y entramos por la puerta grande esta noche?". Así que voy a ver si ya hay teaser de la gala.
No, aún no. Hay de Star Wars, si os vale.
12.30: Rodrigo finalmente se ha quedado desayunando solo y se lo echa a Bea en cara. Bea dice pues vale pero se sienta junto a él: "¿me quieeeeres?", dice en un bostezo. Pero se quiere ir a la ducha, que luego no le da tiempo. Rodrigo protesta pero finalmente acepta.
Así que Rodrigo desayunando solo en la cocina. Se friega su parte y al baño.
12.40: En el baño se interesa por las operaciones de su novia tras la puerta marrón que no es ducha. Miguel se recoge la cara hacia arriba, y cuando está recogido en las sienes se parece un poco a Akenaton. Cuando se suelta, vuelve a ser Miguel.
12.48: Meritxell libera la ducha. Ha soñado que se piraba y como Meritxell a veces confunde fantasía con realidad, lo considera un anticipo. Bea tiene otra teoría: "estás obsesionada, tía".
12.52: Beatriz y Rodrigo cogen sitio en el sofá del vestidor. Beatriz le pregunta que si irá con ella a su pueblito, un sitio muy pequeño:
- ¿Vendrás, vendrás al monte con las cabras?
- ¿Pero qué se hace allí?
- Nada.
- Como que nada.
- Pues estar relajado.
- Ah. Pues me llevaré la Play.
Y eso es lo que quiere oír una novia, sí señor. No sé si es mejor o no cuando asegura que se llevará un juego llamado "teto" y que no rima con nada.
Pero Bea está contenta porque mañana cumple 20 años y no tiene tiempo para anticiparse al finde romántico con Play en el pueblo. Le cuenta a Rodrigo cómo fue la vez que su madre se hizo entregar en la puerta de su casa metida en una caja de cartón como sorpresa de cumple. Al parecer, el colega de una colega disfrazado de repartidor sacó la cámara al entregar a la madre (para grabarlo todo), pero Bea no desconfió y gracias a eso está todo grabado.
13.05: Bea canta "mueve tu totototó" y opina que se comería a Rodrigo y se emociona lo suficiente para que Rodrigo le pida que no le haga daño. Algo dicen que se queda a medias y nos vamos con Miguel planchando. Cuando vuelvo, Rodrigo le hace batido de coco a Bea (que le zarandea la cabeza, por si alguien no vio el batido de coco de Bea a Rodrigo hará un par de días). El caso es que Rodrigo se lleva una waka de esas y a Bea algo le emociona que le pide que ponga cara de malote. Malota tú. ¡Venga, pon cara de enfadado! Y como a Rodrigo no le sale por sí solo, Bea decide que ya le ayuda ella:
13.18: Y como entramos a material clasificado, nos vamos un rato con Miguel recogiendo sus pertenencias para más tarde empaquetar.
Cuando volvemos, la pareja está tirada por la alfombra del vestidor y entrelazada. Bea le dice a Rodrigo que le echará muchísimo de menos (cuando acabe el concurso). Hace planes de cuando ella vaya a Madrid. Y de cuando Rodrigo a Valencia. Se imagina las fallas con Rodrigo, Miguel y Clara. Después se quedan un rato en silencio hasta que Rodrigo toca hueso. No lo he visto, pero escucho que Bea protesta bastante alto: "ahhhh, que eso es mi cadera". Luego se escucha cachete y otro ahhhh, pero éste de Rodrigo.
El susto de Larry nos lleva con Meritxell comunicándose con la princesa que la mira desde el espejo. Quién será, es tan bonita, me la quiero tanto, etecé tía. Veo a Beatriz salir por la puerta.
13.35: Rodrigo va a ver a Miguel. Le parece que la casa está sucia. Miguel da más: cree que es la más sucia de todos los grandes hermanos. Así que Rodrigo se va a correr y Miguel se queda con su peluche.
Llega Bea y coge sitio junto a Miguel y el ciempiés fosforescente. Miguel le explica que él lo que hace es poner su mente en la calle desde la mañana y así, si luego se marcha, no le sorprende tanto. Y como Bea parece dispuesta a escuchar, Miguel elabora su teoría del patrón para ganadora de GH. Del que se excluye porque él vino a abrir su corazón y...
Rodrigo interrumpe: "la verdad es que paso de correr". Se tumba a los pies de Bea, pero Bea le advierte que por su bien mejor a sus pies, así que decide que ya pone los pies en la cama de Meritxell, pero Rodrigo le dice que no. Se tumban juntos.
Miguel retoma su relato en el que cuenta como en otro relato, el de GH, él no pinta nada. Rodrigo le contesta que lleva diciendo que no pinta nada desde hace ni se sabe. Comentan el concurso y concursos anteriores. Creen que este suyo "no debe ir tan bien porque nos han quitado un día".
Dicho y con Meritxell maquillando a la niña del espejo.
13.50: Cuando volvemos están hablando de las discusiones y de la casa sucia. A partes iguales. Y tumbados en la cama.
Rodrigo se da cuenta de que hay una americana negra en el armario de Meritxell. Pregunta si será la de Clara, que les pidió que se la recuperaran dada la afición de la americana a aparecer en maletas de otros. Otra opción es que sea de Alain. Cuando aparece Meri, Bea le pregunta directamente. Meritxell confirma que es la de Clara, "me la encontré en ese armario", señala al fondo de la habitación. "Pero no me la he puesto ni nada. Se la daré cuando salga".
14.00: Rodrigo, Miguel y Bea se quedan en las camas. Bea recuerda que tienen que abrir el Club porque para ser ganador hay que estar en el Club. Cábalas sobre cuándo terminará el concurso. Rodrigo cree que "hoy lo dirán". Pero Miguel sabe que perfectamente les pueden decir: "hasta muy pronto, chicos".
Lo cierto es que la final, sea cuando sea, les da vértigo igual.
14.10: Rodrigo empieza a contar que una actriz que conoce le dijo que ella no entraría a GH porque considera que eso lo llevas para toda la vida y le parece buena carga. Bea interrumpe: "Buah, yo no querría tener una actriz de novia, que no sabes si llora, ríe o está actuando". Rodrigo le pregunta si no sabe respetar que está hablando otro y la llama maleducada. Bea calla dolida y en diez segundos se levanta de la cama e informa: "yo me voy de aquí". Rodrigo se queda con Miguel que está invocando algunos recuerdos que le vienen de su concurso. Principalmente discusiones. Se ríen porque no saben que esta noche bien les vendrían unas espaditas fosforitas o un casco para celebrar cierto estreno.
14.22: Bea está en la cocina cortando cebolla. Rodrigo se le acerca: "eres una maleducada, que lo sepas". Bea le dice que no lo ha hecho con mala intención y no parece que tengan gana alguna de efadarse hoy porque ya se están dando besos.
Mientras tanto Meritxell se ha tumbado en el sofá de la pecera y canta en la más buscada soledad algo de que "si quieres jugar conmigo sea en mi cama, yo te necesito aquí, yo sé que tú eres pa mí". Yo tendría terror, pero no siento que me cante a mí. Dos canciones más y su cuarta elección dice "no, no es amor, lo que tú sientes se llama obsesión". Y lo que es la letra, se la sabe bastante bien.
14.30: En la cocina Bea también berrea "si quieres jugar conmigo, que sea en mi cama". Si no fuera por la coincidencia lingüística, jamás diría que es la misma canción. Pide que le pelen patatas. Dos veces. Rodrigo le hace ver que está cambiando la bolsa de basura, que ya va.
14.35: Meritxell prueba a hacer mix de canciones. Así de dura es la soledad, que tiene uno que buscarse auténticas artimañas para combatirla.
"¿Meri, me pasas las patatas del almacén? Ah, no, que te estás ahí tocando los cojones. Vaya tela, vaya tela. En fin", dice Rodrigo a una Meritxell imaginaria. Porque la de verdad está cantando en la pecera. Bea le dice con retranca que Meri está en huelga. Rodrigo opina que a él se le caería la cara de vergüenza estando los demás ahí. Miguel pregunta quién usa las tazas amarillas que están apareciendo por toda la casa. Ni Rodrigo ni Bea dicen usar esas tazas. Ni para agua, ni para leche.
Rodrigo barre. Bea pone las patatas, la cebolla y las pechugas de pollo en una fuente para horno. A continuación crea un jacuzzi de nata hasta ahogar.
Sabemos que a Meritxell no le gusta la nata. ¿Habrán conseguido los mágicos duendecillos salvar una pechuga para la pobre Meritxell? No se sabe. Meritxell cruza silenciosa hacia las habitaciones.
14.50: Miguel pasa el aspirador por el salón. Bea intenta negociar un programa de más de veinte minutos con el horno, que parece que hoy no responde el aparato.
15.00: LLego al dormitorio justo para ver como Meritxell cierra el armario donde encontró la americana negra de Clara. A continuación pone un cojín en su cama y abandona el dormitorio. Creo que ha hecho las camas. Los pañuelos para luego. La tarde es larga.
Meritxell vuelve a la cocina, coge un tazón y el zumo. "Rodri, ¿habéis hecho la comida con nata?", pregunta Meritxell. Rodrigo remite a Bea, pero Bea está en el sandiero.
Bea vuelve y Meritxell hace su pregunta, no sea que no la hayan tenido en cuenta:
- ¿Qué hay pa comer, Bea?
- Pechugas con nata, pero a ti te la he puesto a parte. Te la hago luego.
Todos tranquilos. Y con la tranquilidad puesta, Meritxell ya se siente en confianza para decir que "joe, tengo un hambre, un hambre que te cagas". Así que va picando algo de pavo.
Es que cantar tumbado bajo el frío invierno consume mucha energía.
15.10: Miguel barriendo. En silencio. Y con mitele a saltitos.
En el vestidor, Bea empieza a meter ropa en bolsas de basura. Rodrigo se da su cosa para el pelo. De ahí a la cocina. A Rodrigo no se le ocurre cómo aplicarse el hielo en los ojos y pregunta a Bea. Tampoco sabe. Menos mal que Miguel le propone que los envuelva en una tela y se lo dé a toques, que si no...
15.20: Rodrigo le dice a Bea que no esté triste, que es su cumple. "Es que se puede acabar hoy", contesta ella dejándose abrazar.
Se van los dos al sofá del salón. Rodrigo le confiesa que el otro día Miguel le dijo una cosa en el jacuzzi que le sentó un poco mal. Le dijo: "pues creo que vas a quedar segundo porque Bea ha pedido a sus seguidores que te voten".
- ¿Pero qué os creéis que soy yo aquí?,- pregunta Bea en referencia a que crean que tiene tanto poder.
- No, qué os creéis que soy yo,- gira Rodrigo que no le gusta que le pongan de segundón o que se insinúe que si está en la casa, es por los seguidores de Bea.
15.30: Rodrigo sigue hablando de algunas contradicciones que ha encontrado a Miguel. Parece que a Miguel le ha sentado mal que Rodrigo haya manifestado en el confe sus preferencias, cuando él también tiene las suyas. Y que le digan que piensan que se va él. Rodrigo cree que "dice que le da igual, pero luego no le da tanto igual". Pone como ejemplo que diga que pasa de todo, pero a continuación se muestre afectado por los abucheos. Dice que a veces no le entiende.
15.40: Pasan a hablar de ellos dos y su relación. Van por la parte de cuando Beatriz es Beatroz y Rodrigio le aguanta lo que no está escrito. A continuación Rodrigio le hace una imitación de Bea febril que lo mismo pide sopa y un peluche que gime que no se sabe de qué. A Bea le da la risa.
Miguel se sienta a varios asientos de ellos y mira hacia el árbol de Navidad.
Rodrigo y Bea van por la parte en la que Rodrigo quiere ver el vídeo en el que el Super le dice a Bea que saque la nariz del blog de Rodrigo. Bea se sigue riendo y confiesa que se rió mucho mucho mucho de su "travesura", como ella lo llama. Rodrigo la deja confesar ampliamente y escucha con una sonrisilla.
Meritxell capta que está siendo nombrada en una conversación y que se está narrando una de sus grandes aventuras sin estar ella presente. ¿Hola? Es más, se acaba de nombrar a Alain. Cuando las encontró, una vez pilladas por el Super, escondiendo su risa en la lavandería. Así que monopoliza el relato y desde la parte en la que Alain las encontró, efectivamente, en la lavandería y le mintieron vilmente diciéndole que se reían porque se estaban probando sus calzoncillos. "Es que es más tonto, se cree cualquier cosa el pobre". Y el pobre sí se lo creyó cuando aún no había pasado.
Eso fue más tarde.
El relato sigue contado por Meritxell. Esa noche durmió con Bea en la otra habitación y entonces, desde la cama, descubrió que "la Rebe" estaba en la cama de Alain y las mandó callar con el dedo.
Y así el relato de cómo Bea le cotilleó el blog a Rodrigo se ha convertido en el día que Meritxell le dijo a Alain que se probó sus calzoncillos y luego la Rebe la mandó callar. Y Alain se lo creyó. Y la Rebe las mandó callar.
Bea abandona el sofá y se va a hacerle el pollo a Meritxell. Meritxell pela las patatas que se va a comer mientras sufre ecos: Alain, la Rebe, el plátano, calzoncillos, Alain, la Rebe, el plátano, calzoncillos...
16.00: Y a punto de comer se los paso a Viru. Esta noche estreno y mañana más con uno menos.
Buena cacería.