Búnker. Segundo día después del meteorito.
08.00: Los supervivientes duermen en la sala de juegos que han adaptado como refugio. Tienen la esperanza de que sea temporal, pero desconocen el estado de las cosas fuera. Aún mantienen comunicación con un ser llamado Super que les habla a través de los amplificadores instalados. Super parece estar con ellos, les ayuda con consejos y les avisa de los momentos en que pueden salir a recoger objetos necesarios de lo que fue su vida hasta hace tan poco... Sin embargo este mismo Super les ha hecho saber que esta noche serán uno menos y la balanza está muy inclinada. Ellos saben que los marcados son Vera, Carolina o Niedziela, pero nadie sabe sobre quién se tomará la decisión final. Lo que todos deconocen es que hay dos supervivientes más, dos antiguas compañeras, viviendo a apenas unos metros de ellos y que ignoran la caída del meteorito y sus efectos. Una de ellas volverá con el grupo esta noche y aún queda por saber quién será.
Nota primera: Buenos días, queridos míos, encantada de compartir café y con mucho cariño.
08.30: Continúan durmiendo en el búnker.
En capítulos anteriores:
Aritz ya está listo. Super le da algunas indicaciones: debes mantener la mente en blanco, el mayor peligro es que hay cosas que se te pueden meter en el cerebro. Tiene 60 segundos. Aritz sale a la casa grande y se aprovisiona de lo que puede, pero se le termina el oxígeno. No regresa a tiempo y durante unos segundos respira los gases de la casa.
Han y Artiz discuten por la respiración boca a boca. "¿No te hace ilusión?", le pregunta el vasco. Los dos se ríen ante la situación... En ese instante aparece Marta y le mete un mejillón en la boca a Han. El chino se quita la camisa por el ataque y Aritz le hace el boca a boca. Marina no se ha pasado a interrumpir.
Aritz habla en sueños y en voz muy alta. Está en un restaurante chino y tiene que defender a Han. Con los ojos abiertos y mirando a Marta, Aritz pregunta: ¿pero tú estás bien, estás bien?... Y sigue: y la chica esa, la china o japonesa, yo que sé qué era... esa chica estaba todo el rato al coqueteo, ¿ésta de que va?... ¿pero tú estás bien? No sé, no sé. De verdad que me he quedado mal. Yo no quería darle el castañazo. Yo no sé, estaba como cocido. Yo no sé, yo no quería estar cocido. Nunca bebo.
Aritz, ¿sabes lo que estás haciendo? Estoy hablando con Marta. Eres sonámbulo... estabas hablando al aire. Todo ha sido un sueño, estabas dormido pero con los ojos abiertos. Aritz asegura que nunca ha sido sonámbulo, sospecha de la medicación. Me has asustado... pero esto es lo más gracioso que me ha pasado en mucho tiempo, confiesa Marta. Si te vuelves a pegar, avísame, bromea Suso.
09.30: En el búnker duermen. Algunas moscas supervivientes sobrevuelan los micrófonos. Se escuchan amplificadas sus agónicas sacudidas. Vale, vosotros opináis que son pedos.
Nota segunda: Respecto a la comunidad clon, me informa marvabruja con v y b que ayer por la tarde se celebró una gran fiesta de la clonación a la que fueron invitados los raquelistas. Pero era una trampa maligna. Hasta una inocente muchacha cayó en el engaño y empezó a arremeter contra algunas invitadas acusándolas de farsantes y embusteras. Manos mal que se dio cuenta y finalmente marvabruja aullentó a los clones con su carcajada mortal.
Me parece genial que te lo tomaras a risa, seguro que sienta mejor. Espero que la comunidad clon también tenga sentido del humor y con eso todo arreglado. Segundo café, kolakao y churros para todos, nosotros que estamos libres de meteorito.
10.30: Siguen durmiendo.
10.49: Aritz se despierta, se pone el sombrero y arropa a Han. A continuación se arriesga a visitar el baño y regresa.
11.00: El búnker se ilumina, Aritz abraza a Han bajo la protección de sus brazos. Vera se siente animado, pese a la amenaza que se cierne sobre él. Ricky es completamente ajeno a la situación, sube al billar y bota en espasmos pélvicos mientras balancea los brazos.
11.15: Ricky calienta leche. Comprueba la temperatura con el dedo y a continuación se palpa el pectoral derecho. No ha perdido masa muscular, pero ha transcurrido poco tiempo y no se sabe cuánto permanecerán en ese refugio. Las cosas aún podrían ponerse feas.
11.30: Ha llegado un suministro de pan. Alguien ahí fuera les está ayudando. Vera toma los alimentos y reparte el desayuno en platos. Ricky se ha sentado y observa el proceso mientras se acaricia el deltoides derecho. Eso le tranquiliza. A continuación se levanta la camiseta y se acaricia las tetillas. Eso también le tranquiliza. Luego se estira y aguarda paciente su ración con la boca entreabierta. Porque se respira mejor.
11.39: Ricky y Vera se preguntan si el rito de despedida nocturno deberán celebrarlo en el refugio. Vera añora la luz del sol y le pregunta a Ricky si él cree que les dejarán más tiempo. Pero qué importancia podría tener lo que Ricky crea en este caso. Vera busca una esperanza a la que agarrarse, por ejemplo la opinión de Ricky respecto a algo que ambos ignoran, pero de qué vale, de qué...
11.49: Mientras tanto... en la casa cercana... una de las dos supervivientes friega su desayuno. Lleva la cabeza cubierta por un turbante de ducha, pero dado que ninguna ha sido avisada, no han tomado precauciones y podrían estar infectadas por "las cosas que se te meten en el cerebro". Ubik no ha avisado. Super no ha contactado con ellas. Es probable que sufran el efecto del meteorito. Si no lo son ellas mismas o al menos una...
Maite, la del turbante, se viste para afrontar el día. Raquel, la otra superviviente, duerme tapada sabiendo que hoy se escoge entre una de ellas.
Nota tercera: cuentan los epílogos que un segundo frente en la montaña fue resuelto por Pakarinen y Donkey85 y que la joven muchacha engañada respondía al nombre de LAVIDAloca14 (informante y causante de esta nota), pero todos tienen ya el antídoto antitrolesclones y estamos dispuestos a vivir en paz. Yo también lo agradezco, por cierto. Aprovecho y saludo.
12.00: Ella aún no lo sabe, pero tal vez esto le venga bien cuando haya de enfrentarse a los zombis infectados tras inhalar los gases nucleares provocados por el meteorito.
12.09: Búnker.
Aritz habla con Vera: Es muy raro que si echaron el jueves pasado a los de la casa ésa no nos hayan metido allí como búnker. Es mentira. No les había costado nada poner cuatro símbolos y cuatro chorradas y meternos allí... Entran moscas y no entra la radiación, venga ya... No tiene sentido...
Vera lo que no entiende es que les hayan quitado las bolas del billar. Querían leña, desconfía Aritz, que empieza a tener sospechas conspiranoicas de este encierro.
12.20: Super, que a todo atiende, termina rápido y de raíz con el nacimiento de la sospecha rebelde. Pincha reguetón e inmediatamente Vera deja de pensar. Ricky también sufre el efecto pauloviano inmediato y se pone a bailar, subido al primer tronete que encuentra se balancea y gorilea al ritmo sedante de este suero acústico.
A continuación pincha un pasodoble que algunos interpretáis como el heraldo de la "venida de Maite". No ha sido el único aviso. Hace algunos días a Super se le escapó en alto en la casa grande: Raquel, el micro. Así hablan las profecías, pero nadie escucha, y ni siquiera el oráculo lo ha repetido, que dos ya están y sólo una se quedará.
Super les habla: Buenos días, por segunda vez. Informa que los hematocritos permanecen muy altos "ahí fuera", pero los refugiados están claramente afectados por la caótica situación hasta el punto que algunos claman y piden más reguetón. Super procede a la administración de las medicinas de cada uno, como corresponde a esta petición.
12.30: Los refugiados, ya todos en pie, desayunan. Amanda recuerda ronquidos de anoche y cómo se tiraban bolas de papel mojado entre sí para terminar con las molestas respiraciones. Suso ha debido retrasarse en su toma, si es que la tiene, y confunde a Sofía con un perro: Vamos Sofi, ataca, vamos, ve a por tu desayuno, vamos Sofi. Sofía permanece sentada e ignora comprensiva el trastorno de su compañero.
Aritz dice que el encierro le agobia, quería ir al baño pero Super no le oía y él no tenía pilas.
- Menos mal que Han me dejó unas pilas ahí escondidas, señala.
- Ves cómo pienso en ti, le dice Han.
- ¿Y yo no pienso en ti?, responde Aritz a la defensiva.
- Se lo toma como un ataque, protesta Han.
Amanda y Marta les disuaden rápidamente y empiezan a contarle a Han los sueños de Aritz en donde se pega por él.
12.45: Los primeros mensajes en botella desde el búnker ya han llegado. Aquí el de Han.
12.55: Aritz fríe huevos y va repartiendo al tiempo que se enfurruña y se calma. Marta quiere cubiertos. Aritz le dice que hay los que hay y deben compartirlos. Marta protesta y suplica al Super un tenedor con voz de infante caprichosa. Pero el llanto no hace aparecer tenedores.
13.00: Aritz y Vera han pensado pegarse un tiro si continúan más días en el búnker. Las chicas están más preocupadas por sus vestimentas para la celebración de esta noche, tacones y vestidos. En este aspecto Han está con las chicas.
13.10: Los zombis no van a tener posibilidad ninguna, ya os lo digo.
Pero ninguna:
Raquel le avisa que tenga cuidado: Ahí donde estás te partes la espalda, que tienes tres hernias... Maite cede, deja el taburete y pasa a simples abdominales mientras genera sonidos infrahumanos.
Ninguna, ninguna...
13.20: Amanda y Carolina sacan algunos objetos que les han proporcionado: hay un cazo, una pala, una lupa, un peine rosa.... Carolina avisa: tenemos que escoger pensando en nuestra supervivencia, vamos, que si hay un bote de laca, no lo cojáis. Pero eso es mi supervivencia, protesta Carlos, que le atacarán los zombis, pero ante todo guapo.
Amanda lee: La isla desierta. Se supone que han caído varios objetos al mar. Pueden escoger siete entre todos y para todos. De uno en uno irán escogiendo objetos y explicando el porqué. Luego entre todos, escogeran los siete finales y si esos siete objetos coinciden con los siete escritos en un sobre, tendrán una recompensa.
Super da algunas indicaciones de la isla. Es desierta, tiene árboles y arena, hay cocos y puede que encuentren agua dulce. Por demanda de Suso, Super informa que la novia de Tarzán no vive en la isla. Es desierta, recuerda.
Vera hace su elección, coge mechero y lupa y varias cosas más hasta siete. Sus compañeros están de acuerdo en algunas sí y en otras no.
Aritz: lupa, cazuela, redeño, machete, pala, prismáticos y brújula. Sus compañeros aplauden.
Suso hace su elección claramente enfocada a estar guapo porque Suso no va a renunciar a la posibilidad de que Tarzana esté en la isla en bikini de piel.
13.30: Maite. Superviviente en el apartamento. Canta mientras se mira en el espejo de la cocina y se estira la cara y dice lolailolailo, ninoninoninonino.
13.35: Regresamos al búnker. Marta y Niedzie prueban suerte con sus siete objetos. Niedzie coge mechero porque no sabe hacer fuego ni con piedras ni con lupa y agua embotellada para el primer día no tener que ir a buscarla Que le da pereza. Marina coincide en algunos objetos con sus compañeros y añade la manta. Super interviene para confirmar que por la noche refresca. Han hace su elección y a continuación Carlos, previo aviso que él se moriría porque no comería pescado. Y punto. Sofía al revés, peces sí, pero animales que no sean peces no mata ella. Amanda, al igual que Carolina, hace una elección práctica destinada a abrigo, comida y salvación.
13.50: Pasan a escoger los siete objetos comunes, o sea, a hablar todos a la vez. Tal y como van, al final no cogen nada. Ahora cogen la laca. Ahora discuten. Amanda cree en la democracia y quiere votar, porque quizás la mayoría tenga más razón que la razón misma, que lío.
Siguen gritando.
Y siguen.
Y siguen.
Y siguen.
14.04: Esta es su elección final: cazuela, arco (de juguete), machete, redeño, pala, prismáticos y lupa.
Han explica: cazuela para cocinar, arco (de juguete) para cazar y hacer fuego con la cuerda, machete para abrir cocos y hacer casas, redeño para cazar peces, cangrejos y bogavantes, pala para matar jabalíes y construir la casa, prismáticos para buscar barcos y aviones y lupa para hacer fuego (con el que se calentarán y por eso pasan de la manta).
No hay respuesta correcta. Que lo importante del juego era ponerse de acuerdo, lo cual es importante dada la situación que están viviendo. Y el premio era tener un mejor conocimiento de sus compañeros.
O sea, que hemos perdido el tiempo, dice Suso que con conocerse a sí mismo ya tiene suficiente.
14.15: Raquel y Maite comentan la sensación de haber abandonado la casa la primera vez. Y a continuación se imaginan la cara que pondrán en la casa al verlas volver. Maite ha decidido decirle a Suso que lo de que limpiara las cacas lo decidió su madre. No, no, no, no, pide Raquel, no le digas eso que lo pasa muy mal. Maite no entiende porqué no, pero Raquel insiste y al fin Maite resuelve que le dirá que lo decidió Gran Hermano y listo.
- Ya queda menos, ya queda menos pa la campanada, dice Maite. Ya hemos conversao, ahora nos llevamos hasta bien. Y sigue: Si hasta puedes tener un novio dentro, que igual es la ilusión de tu vida.
- Pues sí tía, sigue Raquel, me levantaría cada mañana con Amanda cantando...
- Y con tu nuevo amor, más importante, recuerda Maite.
- Ya, pero primero tengo que hablar con él, contesta Raquel.
- A ti que no te dé vergüenza comerle los morros ahí dentro aunque haya cámaras, vamos que si está ahí dentro el amor de mi vida yo entro y le morreo tola lengua.
- Ya, Maite, pero que primero tengo que ver cómo están las cosas...
14.27: Y en el búnker lo que quieren es plancharse la ropa. Niedzie y Han no saben quién es más envidioso de los dos y se turnan el título. Niedzie le pregunta a Han si no le molesta que le digan que es más chica que chico. A mí no me gustan las etiquetas, ante todo soy persona, habla Han con palabras de Aritz. A Niedzie le molestaría y es por ello que cree que a Han podría molestarle. Pero Han es otra persona y no le molesta.
14.40: Maite y Raquel comentan lo mucho que les gusta el apartamento, hasta se harían una casa de chapa y ahí andan jugando a las casitas imaginarias, como dos amiguitas en el patio.
14.50: Maite se ha cansado de estar sentada, que se entumece. Se levanta y se va. Raquel se queda pensativa en el sofá.
15.00: En el búnker andan tirados por los suelos. Marta preocupada porque no sabe si tiene bigote o no y Han dice en catalá que tin gana de pollastra. Vera balancea las piernas, igual que los niños cansados en sus últimos coletazos antes de caer dormidos. Lanza palabras en catalán a Niedzie, punta, punteta, y cosas así. Niedziela cierra los ojos y duerme o finge que duerme.
15.10: Maite limpia la casa, baila con la escoba, se mira en los espejos y se da besos a sí misma, canta y hace ballet. Con la escoba. Lo que se viene a decir: maitadas. Raquel, vamos a jugar al tenis, le dice a Raquel. Raquel se está probando el modelo de esta noche.
Pues así está la cosa: Raquel se prueba vestiditos. Maite baila con la escoba. O hace pesas. O saca el culo. O se pone un gorro turbante. O se mira al espejo de reojo. O se sube el pantalón y le vemos el tanga asomar.
15.18: Flashback de Aritz. Le habla a Vera de su vida antes del búnker, cuando a veces hacía de guía para turistas.
Suso tiene una teoría: hasta que no salga el expulsado no podrán salir del búnker. Y saldrán de uno en uno haciendo "el pasillo del terror" hasta llegar al confe a nominar.
15.30: Y ante todo: quieren una plancha. Suso la quiere. Pero Carolina más, ha de adecentar su vestido sacrificial.
Porque Carolina ha decidido sacrificarse. Ella es objeto de una profecía lanzada por ella misma hace días: el día que salga, llevará ese vestido. Así que va y se lo pone, que a las moiras no se les contardice. Ha preparado su vestido blanco de virgen vestal con el que se ofrecerá a los dioses aún sabiendo que ese vestido será su perdición. O al menos ella lo cree. Suso no lo entiende bien.
En la imagen: el vestido de la mala suerte según Carolina.
Pero es que la ropa lo es todo. Por ejemplo, cuando Suso se ponga su americana de puntitos, también será sacrificado. Importancia suma, la ropa. Más por ejemplos, cuando Carolina ve al abuelo de Marina no habla con él, pa qué
15.40: Flashback de Niedzie. A su circo. Ella camina hacia la carpa entre caravanas antiguas de madera, las que restauró su abuelo... Marina y Vera escuchan atentos el paseo de Niedzie por sus recuerdos.
Por lo demás, un descamisetado corpulento dormita agazapado y tristón en un rincón. Pero ni tan agazapado ni tan tristón como el rey de los corpulentos que desde que lo dio todo con la primera canción de la mañana no ha vuelto a dar señales.
15.50: Maite también le da a la magia, olisquea un collar y luego se calcula los hijos por un método no muy científico, aunque ella asegura que acierta.
16.00: Y aquí me despido hasta mañana. Esta noche, ante todo, pasadlo en grande. Mañana retomamos con las novedades.