La mayoría entraron con extra de colágeno en los labios y casi se dejan el coxis la primera noche en la escalera de la prueba. Maravilloso casting con el que casi se consigue la cuadratura del círculo. En algún momento llegué a pensar que todos tenían relación, o la habían tenido, con todos. A punto estuvo Kiko de preguntar: a ver, ¿a quién no os habéis tirado vosotros? No sé si es por mantenerse en su papel o porque vive en una permanente adolescencia, pero Kiko casi babeaba por la suerte de Federico, ganador de la prueba junto a Ylenia y Raquel. Los tres disfrutarán unos días del privilegio de dormir en la suite, lo cual provocó este delicado comentario de Kiko: “De noche todos los gatos son pardos”.
La casa es una réplica perfecta de la del último GH VIP. Con gran fidelidad han reproducido hasta los últimos detalles de su decoración, con pocas novedades aparte de la incorporación de un jacuzzi. La suite es otra novedad, situada en uno de los dormitorios. En el otro dormirán juntos el grueso de concursantes. Y no me refiero a Julio o Juan Miguel. Jorge Javier casi se mea cuando este último le decía “estás mucho más delgado”. Imagino que por no poder decir: tú también.
El caso es que el casting no tiene fisuras. Ni un solo concursante de relleno, ni siquiera un tronista despistado en medio de este olimpo de concursantes que parece una reedición corregida y aumentada del mítico Hotel Glam. Es fantasía pura, un auténtico regalo para los frikies del reality. Me costó al principio entender por qué el público en plató aplaudía la entrada de los concursantes. Me llamó especialmente la atención que pasara cuando entraban Kiko e Irene, supongo que porque el DJ debe estar poco acostumbrado a esa reacción en el público.
Siempre me ha extrañado ese aplauso a los artistas antes de empezar. ¿Por qué les aplauden si todavía no han hecho nada? Lo de anoche lo entendí cuando caí en que era un homenaje a los responsables del casting. Subida de sueldo inmediata para ellos, por favor. La verdad que todo salió a pedir de boca y hasta unas inoportunas interferencias en la imagen de alguna de las cámaras parecía un efecto elegido ex profeso. A buen ritmo se fueron presentando los dúos y los tríos de concursantes, para después hacer que se despeñasen subiendo (y, sobre todo, bajando) una escalera cubierta de grasa y con chorros de agua en funcionamiento. ¡Maravilla!
Por una vez, lo pueril de la prueba no evitó que me partiera el lomo riendo, especialmente en la última tanda de concursantes, con Juan Miguel volando literalmente y aterrizando cual morcilla en una sartén bien engrasada. Mítico, y probablemente muy significativo, fue el momento en que Raquel se decide a bajar de culo llevándose por delante a una Yurena que no había sido capaz de llegar hasta arriba de la escalera. Raquel ya puede espabilar y no estaría de más que aplicase la misma técnica en el concurso. Anoche temí que se fuera a aliar, e incluso a liar, con el más tonto. No sé por qué pensé eso.
La primera en entrar fue María Jesús, sin contar que Kiko e Irene ya estuvieron allí en la final del VIP, pero entonces la casa era muy distinta. No tenía jacuzzi ni nada. No sé por qué a María Jesús le hizo tanta gracia la pregunta de Jorge Javier sobre si está enamorada de una “persona de dos piernas”. Si le hubiera preguntado por alguien de tres piernas habría entendido la risa, aunque igual era una de esas reacciones nerviosas típicas de momentos como el que vivieron todos los concursantes.
Desde que vimos a María Jesús hasta que entraron Antonio y Candela pasaron más de tres horas. Algo menos había transcurrido a la entrada de Juan Miguel, que se quejaba amargamente por haber pasado frío esperando a entrar en un coche aparcado frente a un cementerio. No sé si le había sentado peor el frío o lo del lúgubre escenario. Juan Miguel es de los pocos que no canta, aunque no le cuesta nada dar el cante. Anoche puse una encuesta sobre quién canta peor y salió que Sofía. También es la ganadora de la encuesta de expulsión puesta en este blog antes de comenzar la edición, lo cual hacemos por primera vez.
Creo que Sofía lo va a tener difícil esta vez. No sé si le pasa factura el hartazgo que produce en muchos o su defensa de lo indefendible con Suso en el VIP. Posiblemente las dos cosas. El caso es que me da la impresión de que no va a ser este su GH. Me dejé en la encuesta de pésimos cantantes a la mitad. A saber: cantan Yurena (ostentosamente mal), Kiko (el rey del Auto-Tune), Ylenia (mujer de un solo éxito), Sofía (de momento en la misma línea que la anterior) y Fortu (el del obús). Pero no me extrañaría nada ver arrancarse a Antonio o María Jesús, que en Andalucía cantan hasta las hormigas (y eso avisando ayer de que debíamos huir de los prejuicios).
Como se pongan a cantar todos a la vez lo vamos a pasar mal. En ese aspecto estoy tranquilo con el concursante sueco Federico. Ya sé que es italiano, pero parece patrocinado por Ikea. Creo que será el concursante mueble de una edición donde no parece que abunden. Irene y Candela son una incógnita por ser las menos conocidas, pero precisamente por eso siento más curiosidad por ellas. Algo a descubrir entre tanto viejo conocido. De los dos tríos veo más interés en uno, aunque en realidad ninguno es un trío estrictamente.
De cara a las reglas del programa serán tríos, pero resulta que Federico además de haber estado liado con Ylenia y Raquel lo estuvo también con Sofía. Y Carolina tuvo relación con Julio y con Fortu. Parece que fueron relaciones distintas. La primera esporádica y la segunda posiblemente más platónica que otra cosa. De momento, esta madrugada ya se abrazaba Carolina a Fortu en la cocina ante la atenta mirada de Yoli mientras adelantaba que ya contará por qué su pose distante ante esta pareja. Carolina le tiene a Fortu preparada una buena bomba y no creo que tarde en soltarla.
Las tramas entrecruzadas entre varios dúos o tríos pueden tener un interés máximo. Ya dije que una de las cosas más morbosas es comprobar si salen juntos quienes han entrado como tal. En el caso de Antonio y Candela es casi al contrario porque dicen que están en medio de una crisis. No me lo termino de creer del todo y mi apuesta es que se habrán reconciliado antes de salir. Por si acaso, yo me daría prisa o igual ni les da tiempo. Aunque la reconciliación por la que apuesto a ciegas es la de Yurena y Juan Miguel.
Que Federico tuviera problemas para decir cuál fue su peor momento con Ylenia porque fueron muchos tal vez quiere decir que no fueron tan malos. O que tiene una memoria pésima. Es otra pareja en la que no me extrañaría ver algún acercamiento. También ando expectante ante la evolución en público de la relación entre Alejandro y Sofía. Mientras se preparaban para la prueba vi como ella le soltaba una larga parrafada. Seguro que si les preguntan dirían que era sobre la prueba, pero este gato escamado piensa que Sofía empieza a mover las piezas de este ajedrez y su peón va a ser Alejandro mientras que Federico puede ser alfil, caballo, torre o lo que ellos quieran. Anoche ya estaban pelando la pava de forma apresurada.
Sinceramente, creo que Sofía se equivoca en la elección. También en haber entrado tan acelerada. Lo cierto es que parecía un gigante al lado de ese Alejandro hundido en el sofá. Fue el primero en producir vergüenza ajena cuando se levantó para dar un rodeo en moto imaginaria. Le veo igual de inconsistente que en ocasiones anteriores. Sin embargo, Sofía es más mujer que la niña que conocimos en GH 16. Allí coincidieron ella y Raquel, con quien anoche no fue justa al acusarla de estar obsesionada con criticarla por todo. Doy fe de que Raquel durante el Supervivientes de Sofía fue muy generosa con ella en Twitter. Otra cosa es que le parezca una buena concursante, pero no opine de ella lo mismo como persona. Me temo que no es la única.
Personalmente me alegro de ver a Raquel ahí, aunque no puedo evitar sentir cierta urgencia por expulsarla una vez más. Sería la tercera vez que con nuestros votos la sacamos de esa casa (las dos anteriores fueron en su edición puesto que volvió a entrar repescada). Sofía acusó a Raquel de haber estado en barbecho mucho tiempo. No está bien eso de repartir carnés de concursantes de reality con pedigrí. Imagino que no tardará en decirles a Irene y a Candela que no son nadie. Pero Irene ya aclaró anoche que es imagen de varias marcas. Moda Angelines, la tienda de ropa para mayores de su barrio, merecía una mención más explícita.
Hay currículos claros como el de Irene y otros más cuestionables como el de Yurena. Lo dice todo que presuma de un disco de oro conseguido por su maxi sencillo de ‘A por ti’ y ‘No cambié’ en el año 2000. De eso hace casi dos décadas y entonces se llamaba Tamara. Luego fue Ámbar, antes de convertirse en la Yurena actual. Lo interesante de ese disco de oro fue el mosqueo de la industria discográfica convencional. Hasta el punto de que el álbum de Alejandro Sanz fue promocionado como “El verdadero número uno”.
Con todo, Sofía estuvo suave con Raquel, como si le diera gran pereza. Más cáustica la vi con Alejandro, a quien dijo que tenía “una voz como de que se te ha muerto alguien”. Una niñería al lado de la mala intención manifiesta de María Jesús cuando pedía un primer plano (y lo tuvo) de los ojos de Julio. Efectivamente, o padece una conjuntivitis severa o había pasado una mala noche. “Seguro que es por la fiesta que te pegarías anoche”, decía María Jesús. Todo esto después de decirle: “Estás muy feo”. Llevaba esta concursante el mismo guion que Sofía porque ambas acusaron a sus ex de haber dicho que no les gustaba la televisión, pero al final están ahí por dinero. Alejandro y Julio también coincidieron en responder que ellas cobran igual que ellos. Bueno, igual no, pero igualmente cobran.
La frase ordinaria de la noche fue de Carolina: “Darek me aburre y me pongo a comer pipas. Julio me come la pipa”. Ese es el nivel, amigos. Que el zasca de la noche lo diera Alejandro no deja de sorprenderme. Había visto un vídeo donde Kiko decía que era poco hablador y cuando se conocieron apenas abrió la boca. “Ahora ha aprendido a hablar”, decía Kiko. A lo cual respondía Alejandro: “A ver cuándo él aprende a cantar”. Solo por esto ha valido la pena verle en la gala de estreno. Si en la de mañana no da otro zasca de estos me pienso si pedir su devolución a esas tierras del norte donde, según él, son gente tranquila. ¿Demasiado tranquilos, tal vez?
Moleskine del gato
Propongo al programa que dejen la escalera y cada día se tengan que tirar Fortu y Juan Miguel.
“La sierra” es el nombre elegido esta vez para el cuarto donde fuman. Dice Ylenia que “la playa” no es apropiado en invierno.
Tengo curiosidad por ver si es cierto que Fortu saldrá de la casa el viernes para ir a dar un concierto, como anuncian sus perfiles en redes sociales. Si es cierto parece la peor manera de tener a la audiencia contenta.
En el apartado de las cosas que son verdad apunto la siguiente frase de Carolina al ver la despensa: “Se va a acabar antes el buen rollo que la comida”. Me la he apropiado para titular hoy.
Estoy deseando que se despierten. Este es posiblemente el mejor elogio, y el más sincero, que puedo hacer.