Lo que une el fuego que no lo separe la rivalidad
Yiya considera a Hugo poco más o menos que un vago, amigo de la ley del mínimo esfuerzo. Lo ha estado tratando con desprecio desde que se fue Nyno, pero ha bastado con que hiciera fuego para que cambie repentinamente de opinión. Yiya y Elena celebraron el momento con abrazos y felicitaciones. Llevaban 12 días sin fuego y, finalmente, Hugo fue capaz. El subidón de su mejor día desde que empezó la aventura de Supervivientes 2020 parece haber obrado el milagro. Después de la alegría de ganar una prueba de recompensa (que le puede hacer líder), hablar con su madre y ver a su hijo en foto, sus fuerzas se han redoblado. La fricción fue más fuerte que nunca, ya tienen fuego.
El fuego es vida para un náufrago, por eso entiendo que pase por encima de rivalidades y forzadas enemistades. Yiya no tiene razones objetivas para demostrar semejante inquina a Hugo, tal como hemos estado viendo durante los últimos días. Ella necesita tener siempre un enemigo, su propio muñequito de pimpampum. Me cuesta recordar todos, pero lo fueron en algún momento Cristian, Rocío (a la que llama Rocío Florero), José Antonio o, sobre todo, Nyno. A este último pasó de tenerlo entre algodones, prometiendo que podrían ser los mejores aliados en el concurso, a baquetearlo con saña.
El modus operandi de Yiya es siempre el mismo y también sus motivaciones. Lo primero es machacar a su enemigo, lo cual es mucho más que azotarlo con el látigo de su indiferencia, como pedía el martes Carmen Lomana. Lo segundo se puede resumir en una palabra: nulas. Ningún motivo reseñable que justifique sus odios africanos. He de decir que Yiya a estas alturas me resulta insoportable. Pedante en sus expresiones (a Hugo lo llamó nada más conseguir el fuego: “digievolución en cerilla”), con una superioridad cargante y escasísima gracia. Durante un tiempo creí que era José Antonio el más insufrible, pero con él al menos me río casi siempre. Ahora tengo claro que nadie puede ganar a Yiya.
Jorge se ha convertido en el confidente de HugoJorgeHugo, no sé si porque es el único chico del equipo (aparte de él) o porque con Elena y Yiya la relación es bastante distante, sobre todo antes de la relajación que les ha proporcionado a todos tener fuego. Dice Hugo que Ivana mandó a José Antonio de intermediario para decirle que quería hablar con él, pero al final no hubo tal acercamiento. “A mí me encanta ella en el global, como persona. Pero después, la veo muy egoísta y preocupada solo por ella”, asegura Hugo. Por lo dicho después podemos confirmar que el gran enfado de Hugo, desencadenante de la ruptura, fue el juego de recompensa de los pepitos de ternera.
Así explicaba Hugo a Jorge las razones de la ruptura: “Sabés cómo estoy y me pisas la cabeza. La respuesta es ‘como no me conocen tengo que darlo todo en las pruebas’”. La cosa ya empezó mal para Hugo cuando Ivana decía que lo quiere mucho, pero la comida es la comida. “Me he quedado sin novia”, concluyó. No entiendo que ella sea egoísta por querer llevarse la recompensa y él no por eso mismo.
Políticamente incorrectos
El martes reunieron a los mortales para ponerles un vídeo (que ellos solo escuchan) con el cual rieron todos sin excepción. En particular Ana María, aunque no se quedaron atrás Rocío y José Antonio. Sí, José Antonio también, aunque fuera objeto de las burlas de los demás, durante las cuales estaba siempre presente. Rocío decía que no imaginaba al periodista “empotrando”, y mucho menos activo. Ana María usaba más el tono de broma, recurriendo a los tópicos de las plumas, el aceite, el armario y “un buen tronco en la mano”. Usaban el doble sentido y la caricatura, muy al estilo de la chirigota clásica en su tierra.
El programa les soltó un justo rapapolvo porque están delante de las cámaras y es un mal ejemplo ese tono arcaico e incorrecto, aunque no nos hubiéramos enterado si no lo emiten. Se les congeló la sonrisa a todos y pidieron perdón. José Antonio disculpó a sus compañeros porque no había mala intención y él es el primero que hace bromas sobre su condición sexual. He reconocer que me reí con la escena mostrada. Y no me voy a arrepentir, mucho menos en estos tiempos donde la risa es necesaria, oro con incrustaciones de valor incalculable.
El gato responde
Hoy toca la segunda parte de esas FAQ, preguntas y respuestas sobre el programa, que comencé el pasado martes.
1. ¿EL EQUIPO DEL PROGRAMA HACE UN MINUTADO COMO EN ‘GRAN HERMANO’?
Sí, los redactores en la isla llevan un registro escrito a mano y los minutadores en el cuartel general del equipo registran lo grabado por los cámaras con la hora exacta a la que se ha producido para tener todo catalogado.
2. ¿LES GRABAN DURANTE LAS 24 HORAS?
No siempre hay una cámara delante de todos los concursantes, pero sí están vigilados y se les está grabando durante las 24 horas del día.
3. ¿NO ESCUCHAN LOS DEMÁS AL QUE ESTÁ NOMINANDO?
Cuando los concursantes van a nominar, parece que están muy cerca del resto del grupo, pero no pueden escuchar nada. Miembros del equipo han podido comprobar que la distancia es suficiente para que no se oiga. Además, el día de la gala les ponen música étnica en la palapa para dificultarlo aún más.
4. ¿CÓMO EVITAN EL PROBLEMA DEL RETORNO?
Las comunicaciones desde el otro lado del Atlántico tienen el problema del retardo con el que le llega a cada interlocutor lo que el otro dice. Este retardo se reduce considerablemente gracias a un ingenio de los técnicos de esta casa. Antes había 2 segmentos de audio, compuestos de 2 canales cada uno, que iban sincronizados al vídeo, y lo que se ha hecho es añadir un tercer segmento de audio que también viaja vía satélite, pero no va sincronizado con el vídeo.
5. ¿ADELGAZAN TODOS LOS CONCURSANTES?
Casi todos adelgazan, pero hay excepciones. Apenas se apreciaron cambios en Gloria Camila, que casi volvió con más peso del que tenía al principio. Isa Pantoja perdió 100 gramos en los 84 días que estuvo en la isla. Sin embargo, Nyno ha sido el último expulsado de este Supervivientes 2020 y también quien más kilos ha perdido hasta ahora, nada menos que 18 y medio.
6. ¿QUÉ FACTOR DE PROTECCIÓN SOLAR SE PONEN?
Tienen crema del 36.
7. ¿CUÁNTAS HORAS SEGUIDAS LLEGAN A DORMIR LOS CONCURSANTES?
No muchas. Entre los turnos para el fuego, la lluvia y todas las inclemencias no dormirán más de cuatro horas seguidas. Aunque pasen acostados mucho tiempo, entre las 20.00 de la tarde y las 05.00 de la mañana.
8. ¿POR QUÉ A VECES HEMOS PODIDO SABER EL GANADOR ANTES DE TIEMPO?
Durante varias ediciones los espectadores más avispados tuvieron un truco para adivinar el ganador unos minutos antes de que Jorge Javier dijera su nombre. El truco consistía en observar que el presentador siempre situaba a su lado derecho al ganador. La razón era muy sencilla, y la terminó explicando él mismo en la final de hace un par de ediciones. Por una vieja lesión en el brazo izquierdo, al presentador le costaba más levantarlo. Una vez descubierto el truco son los propios concursantes quienes deciden a qué lado se sitúan.
Moleskine del gato
Sigo respondiendo cosas aquí en el Moleskine. Por ejemplo, a aquellos que me han preguntado si la fábula del perro que conté ayer era en realidad aquella a la que se refería Pedro, pareja de Elena. La respuesta es no. Lo siento mucho, no volverá a pasar, y tal.
Ha llamado la atención que destacase en mi escrito de ayer el hecho de que Rocío no ganó la prueba de las “patas arriba” cuando tampoco la habían ganado otros 6 concursantes. Creo que no se entendió la broma de la frase final, que decía así: “Rocío no gana ni tumbada”. Como queriendo decir que esa es su postura natural. Pero, claro, el chiste explicado pierde la gracia, si es que alguna vez la tuvo.
Una cosa más: se pregunta algún lector por qué todas las imágenes de portada de este artículo muestran a Hugo. Las he contado y sale solo en 10 de esas imágenes. 10 de casi 50, que se justifican por su protagonismo en el concurso, pero dista mucho de que sean “todas”. Es solo una quinta parte.
Y esta noche tenemos gala de lujo, con José Antonio de nuevo en peligro, aunque preferiría que saliera Jorge, esforzado superviviente al que no le han salido las cosas bien casi nunca.