Según van pasando los días va estando más claro que en la casa se habían dado cuenta de que la relación entre Adara y Gianmarco tenía algo de especial. Y, aún más importante, que al menos Joao sabía perfectamente que sus conversaciones con Adara en el rincón del ‘confe’ estaban siendo grabadas y emitidas. Dudo mucho que no lo supiera también Adara, pero un pequeño fragmento de una de esas conversaciones me ha servido para no tener ninguna duda de que Joao lo sabía perfectamente. De manera que, tal como apunté ayer, con esas conversaciones se ha querido dar una serie de mensajes claros al exterior.
El juego ha consistido en usar la naturalidad de una conversación supuestamente privada entre dos personas para dar determinadas informaciones. Nadie podía acusarles de estar contando ciertas cosas más bien delicadas porque tenían la excusa perfecta de que estaban compartiendo esas informaciones entre amigos, convencidos de que no se enteraría nadie más. El plan es tan retorcido como acertado. Tanto es así que muchos se han cogido a esto para defender a Adara.
“No lo ha hecho público, se lo estaba contando a un amigo”, se ha repetido de manera insistente como argumento perfecto que exonera a esta concursante de cualquier responsabilidad sobre lo que ha ido relevando relativo a su relación de pareja. Pero para hacer algo así es necesario tener mucho cuidado y no cometer errores. ¿Por qué estoy tan seguro de que Joao sabía perfectamente que estábamos viendo todo? Pues por algo que él mismo utilizó como argumento en una de esas conversaciones en el suelo del ‘confe’, siempre en ese rincón preferido por Adara y él.
La brevísima secuencia es como sigue. Adara hace esta inocente pregunta a Joao: “¿Crees que ha conocido a Hugo?”. Se refiere a Gianmarco y quiere hacer conjeturas imaginando si el italiano ha conocido a Hugo Sierra en plató. Joao niega con la cabeza y responde así: “Nuestras conversaciones pueden dejar herido el orgullo”. Es decir, Joao piensa que Gianmarco no se ha encontrado con Hugo en plató porque este ha decidido dejar de ir con su orgullo herido por las conversaciones que ha tenido él mismo con Adara. Justo después, Joao supone que cuando salga Adara igual Gianmarco se encuentra finalmente con Hugo Sierra, presuponiendo que este entonces sí acudirá a plató para recibir a su pareja.
Al hilo de esta breve conversación que transcribo pregunto: ¿Cómo iba Hugo Sierra a tener su orgullo herido por las conversaciones entre Joao y Adara si estos hablaban en la convicción de no estar siendo grabados? ¿No eran conversaciones entre amigos que pensaban no transcenderían al exterior? Creo que no hace falta darle más vueltas al tema porque está meridianamente claro. Joao sabía que Hugo se estaría enterando perfectamente cuando Adara contaba que no quiere trabajar y ya no hace el amor con ella aunque se pasee por casa en bragas o haga ejercicio estando casi desnuda. Sabía positivamente que Hugo vería la preocupación de Adara porque un juez decretase la custodia compartida. Y, por supuesto, tenía claro que Hugo vería a su pareja diciendo a Gianmarco que está enamorada de él y por eso la forzó para que dijera tal cosa.
Quiero hacer una aclaración que en todo este tiempo he considerado innecesaria y he ido soslayando. No hago ningún juicio moral sobre las decisiones de Adara relativas a su vida personal fuera del concurso e intento aplicar esta misma regla con el resto de los concursantes. En todo caso, si Adara hubiera descubierto en la casa que no es feliz con su vida me parece perfecto que haga lo necesario para reparar esa situación. No veo inconveniente alguno para ello que tenga un hijo de corta edad. El sufrimiento de un tercero, en este caso Hugo Sierra, es tan inevitable como el de cualquiera ante el fracaso de una relación de pareja.
Me siento un poco estúpido haciendo estas aclaraciones, pero estoy cansado de que se malinterprete lo que digo. No me hace falta decir que apoyo a Adara si quiere separarse de Hugo, ya sea porque desea intentar tener una relación con Gianmarco o sencillamente porque cree que eso es lo mejor para ella. Mi apoyo para ella como para cualquiera en parecida situación. Esto no forma parte de mi opinión sobre Adara ni me condiciona en absoluto. Si he dejado de ver con los buenos ojos que he estado viendo a esta concursante desde el principio es porque me cuesta creer que no esté mintiendo cuando dice creer que sus conversaciones con Joao no estaban siendo grabadas. Y porque todavía a estas alturas sigue repitiendo a sus compañeros y a la audiencia que Gianmarco y ella tan solo han sido amigos.
Adara se ocupaba de aclarar lo siguiente esta semana en una de sus conversaciones con Joao en el rincón del ‘confe’: “Yo no he hecho nada”. Y Joao apuntillaba: “Solo has sentido”. El problema moral lo tienen ellos. ¿Y si hubiera hecho algo? ¿Qué importancia tiene eso? Hombre, hacer manitas bajo el edredón no sé si es nada. O las caricias, o escribir “te quiero” en el brazo del otro. No digo nada sobre ciertas imágenes en las que parecía apreciarse movimiento bajo el edredón porque son interpretables. Dije hace justo diez días que abrirse en canal, sincerándose ante la audiencia, es mucho mejor que optar por el engaño.
Ahora sé que es todo mucho peor de lo que pensaba hace diez días. No lo puedo asegurar de Adara, pero Joao era consciente de que lo estábamos viendo todo. De manera que ha intentado manipular a Adara, ha pretendido que supiéramos solamente la verdad que ellos querían contar supuestamente en privado y, en definitiva, nos ha tomado por tontos. Sabiendo esto voy a lamentar menos su salida si es el expulsado de esta noche. Joao no ha sido la mano que mece la cuna, sino que ha pretendido vendernos una cuna estropeada cuyo moviendo había sido programado por él. Pero por la boca muere el pez. Se descubrió él solito.
En cuanto a lo que sabía el resto de la casa, lo cual he comentado varias veces, ahora también lo tengo más claro. Mila decía ayer: “A ver la que tiene liada esta fuera”. Y cuando Joao lo negaba se metía en la conversación Estela: “Joao, ¡por favor!”. Mila hablaba entonces de la imagen de Adara y Gianmarco en la cama. Joao lo seguía negando. Está claro que cuando le acariciaba el pelo a Gianmarco era para que no resaltase tanto lo de Adara. También que en la casa se dieron cuenta de todo, aunque guardaron discreto silencio, y eso se debe reconocer. Lo que no tengo tan claro es cómo tiene Estela valor de criticar que Adara se metiera en su cama con Gianmarco al lado dentro de la suya. ¿Nadie va a recordar a Estela que ella y Hugo se metieron juntos en la misma cama?
Alba y Hugo protagonizaron la bronca del día. Eso sin contar que Mila y Hugo están como el perro y el gato permanentemente. Anoche Mila dijo que no estaría en la fiesta porque no le apetecía. Era la última fiesta de Adara o de su amigo (¿hamigo?) Joao y tal vez por esto último terminó quedándose. Pero fue para dar un poco por saco. “Si tú supieras el asco que te tengo, se te revolvería el estómago. Me das ganas de potar continuamente”, decía Mila a Hugo. Y añadía: “No he visto un tipo más repugnante en toda mi vida y mira que tengo años. Me da asco verle, que me toque, cómo se ducha cómo se toca el pelo, cómo todo”. Noemí se sumaba al carro: “En mi vida he conocido un tío tan asqueroso”. Noemí es de esas personas capaz de contar: “Estaban dos tíos dando una paliza (dialéctica, claro) a otro”; y cuando le preguntan: “¿Y tú que hiciste?”; responde ella: “Pues le dejamos KO entre los tres”.
Lo de Alba y Hugo fue por la tarde. Estaban en el bunker, ahora cuarto de servidores, poniendo los cables de colores en su sitio y Hugo le dijo “quita”. Ese “quita” es como “déjame a mí, que yo lo hago”. Y sobre ese “quita” hizo Alba un mundo. “No me hables así”, le dijo Alba, y lo repitió varias veces. Aquí si no se repiten las cosas parece que no valen. Alba dijo en innumerables ocasiones: “Eso se lo dices a tu madre”. Y Hugo repitió semejante número de veces: “Juegas sucio”. Alba terminó sacando a relucir, sin venir a cuento, a Marta Sánchez. Luego ella monta un pollo si le mencionan a Fonsi, Feliciano, etc. ¿Discutían para arreglar algo? No, solo por el supuesto placer de discutir. Pero hay placeres mejores, amigos míos.
Observatorio de nominaciones
Supongamos que las nominaciones son, como hasta ahora, con 3, 2 y 1 punto. También que nominan en el ‘confe’ todos y así nadie puede hacer cuentas y modificar sus planes sobre la marcha. En tal caso, mi previsión es que si se queda Adara quedaran nominados en principio Hugo, Antonio David y la propia Adara. Y si se queda Joao la terna inicial estará formada por Hugo, Antonio David y Alba (puede que empatada con el propio Joao). No recibirán nominaciones Estela ni Noemí por la necesaria concentración de los votos. Y Mila se salvará de nuevo.
También advierto que lo anterior depende de quién sea jefe de la casa. Esto vale si lo son cualquiera de quienes se salvan de las nominaciones, según mi previsión. Por ejemplo, trastocaría todo si Antonio David o Hugo son inmunes. Más complicado lo haría todo si se mantiene el privilegio de salvar a un nominado o intercambiarle por otro. Dado que hay una mayoría aplastante contra Adara (si se queda) y Hugo, vuelvo a decir que sería razonable suprimir los privilegios. Estamos aproximadamente a un mes de la final y son ya muy pocos los concursantes en juego.
Corea central
Hugo se pintó el martes la cara con un pintalabios que encontró en el cuarto de baño. Resulta que era un pintalabios indeleble, que supuestamente tarda una semana en borrarse. Eso le dijo Adara y le tuvo preocupado un buen rato por la mañana. Su rostro era un poema con frente y pómulos rojos. Se lo terminó quitando con el agua micelar de Mila. No sería tan indeleble.
Joao, a Adara: “Antes me tenías como amigo, ahora más todavía”. Aplíquese la frase a todo lo que se quiera. Por ejemplo, Pablo Iglesias a Pedro Sánchez: “Antes me tenías como enemigo político, ahora más todavía”. Ah, no, que esto no cuadra.
Mila acusa a Hugo de haberla empujado cuando celebraba haberse salvado el pasado martes. “No te empujé, te di un abrazo”, respondía Hugo. Doy fe de ello, según se vio en directo. Confundir empujar con abrazar es motivo de preocupación.
Moleskine del gato
En los porcentajes ciegos sigue creciendo el que empezó siendo segundo. Anoche estaban así las cosas: 58,8 % y 41,2 %.
Esta noche tenemos una fiesta, con Jorge Javier como maestro de ceremonias. No lo será tanto para Joao y Adara porque uno de los dos saldrá de la casa y dejará al otro un poco más solo. Aunque Joao ya se sabe que no tiene problemas con nadie. Por lo que sea, todos lo rodeaban y se apiadaban de él el martes después del alegato de Pol. Recordemos que hace unas semanas esos mismos que se ponen ahora en su lugar y le consuelan estaban convencidos de lo suyo con Pol era un montaje y se reían de ellos. La memoria es subversiva, lo digo siempre. Solo sea porque ha estado todo el tiempo con el culo entre dos sillas y tragándose su orgullo en demasiadas ocasiones, creo que ha llegado la hora de Joao.