Cristina es el rostro de la edición, según Sandra
Desde la unificación en un solo dormitorio el nuevo espacio propicio para el corte y confección, a menudo convertido en auténticos aquelarres, es el cuarto de baño. Ahí mismo se reunían esta madrugada Frigenti, Julen, Sandra y Dani. Ninguno de ellos parecía tener mucha gana de fiesta. Es curioso que en este caso Frigenti no abogase por cumplir con el equipo que realiza este programa, los cuales habían preparado una fiesta dedicada a la ópera. Tampoco es que haya mantenido muchos días su ímpetu al despertar el primero, reclamando a los demás que no remoloneasen tras sonar la música. Ahora lo hace como el resto, cuando no se vuelve a acostar tras el desayuno.
En la reunión de anoche en el baño se dedicó Frigenti a teorizar como experto en realities. Muchas de las cosas que dijo son lugares comunes y otras realidades incontestables. También hay alguna discutible, especialmente sobre el reality que está viviendo y del que carece de la necesaria perspectiva. Dice Frigenti que los muebles si llegan a la final nunca ganan. Tal vez se esté olvidando de Javito García (GH 3). Sabrina Mahi (GH 2) o Susana Molina (GH 14) no sé si se pueden considerar muebles, pero desde luego no responden al perfil descrito por Frigenti para el ganador, un concursante protagonista y polémico, con gran apoyo y también mucho rechazo. Lo de Ángel Muñoz (GH 11) mejor no describirlo, pero tampoco lo sería. En cuanto a las versiones de famosos, si Laura Matamoros (GH VIP 4) tuvo rechazo sería por lo del arroz blanco en Navidad, cuyo recuerdo es muy apropiado dadas las fechas que se avecinan.
“Este reality no se va a recordar por gente como Cynthia, sino por otros como Adara, los Gemeliers, Sandra o yo”, seguía diciendo Frigenti. El resquemor que tiene hacia Cynthia no es pequeño, especialmente desde el buen contraalegato que hizo el martes. Al menos no puso esta vez el burro delante para que no se espante. No plantea duda de que él ha sido gran protagonista, pero Sandra… ¿Sandra? ¿De verdad que Luca no le está poniendo algún ingrediente secreto a la boloñesa? Lo de Miguel Frigenti es como eso que decíamos cuando yo era adolescente: Radio Macuto, cien chorradas por minuto.
Donde sí tendríamos consenso Frigenti y yo es en que Cristina ha sido uno de los rostros de esta edición. Según su teoría, cuando pasados unos años se recuerda un reality te viene a la cabeza de forma automática un rostro, o unos pocos en el mejor de los casos. En su opinión, Cristina sería uno de esos rostros, a lo cual respondía Sandra con generosidad y sensatez: “Es el rostro de la edición”. Así, sin más tonterías. Antes de esto habían estado haciendo un poco conciliábulo sobre nominaciones. No se puede hablar de pacto porque se trata de esa otra técnica consistente en dejar el queo y esperar que los demás se den por enterados. Ayer parecían abogar por poner en la diana a Luis Rollán. Mira, una lástima que no vayan a poder porque las nominaciones de esta noche no son como ellos esperan.
En realidad, ellos no se esperan unas nominaciones tan especiales y nosotros tampoco lo esperábamos. “Una novedosa dinámica pondrá a prueba la ambición por seguir avanzando en el concurso”, dice la nota de prensa, y esta vez seguro que se cumple. Se trata de una especie de dilema del prisionero, el famoso problema fundamental en teoría de juegos donde se muestra que dos personas pueden no cooperar incluso si ello va en contra del interés de ambos. Tras una expulsión de nuevo importantísima, quedarán en la casa seis participantes que formarán tres parejas. Una vez definidas dichas parejas, los miembros de cada una de ellas tendrán que decidir quién de ellos alcanza la inmunidad y quién es automáticamente nominado. En caso de no ponerse de acuerdo, los dos integrantes de cada dúo se convertirán en candidatos a abandonar el programa.
Según dice Eduard Punset en su libro ‘El viaje a la felicidad’: “En la vida corriente la gente suele pensar que el resultado obtenido es fruto del esfuerzo individual y, como mucho, de la suerte. Pero la historia de la evolución muestra que tanto nosotros como el resto de animales, estamos inmersos en un ‘juego’ en el que, por más que nos empeñemos en lo contrario, el resultado está supeditado al comportamiento de los demás. El premio anhelado puede ser codiciado por otro con el mismo ahínco pero más suerte. El final del proceso no solo depende de uno mismo, sino también de lo que haga el otro y, para complicar más las cosas (esa suele ser una de las constricciones de la vida) no se pueden controlar las decisiones del socio o adversario”.
Con el juego planteado se ofrecen unas alternativas que pueden ser beneficiosas para uno de ellos o catastróficas para los dos. Justo lo mismo que pasa en el dilema del prisionero, un juego que se estudia en todas las escuelas de administración y dirección de empresas. En el mismo se plantea la situación de dos sospechosos de un robo que tras ser detenidos por la policía (sin pruebas suficientes para acusar a ninguno de los dos), ven como les plantean por separado un dilema. A los dos les proponen el mismo trato: si uno se convierte en delator y el otro no confiesa nada, el que no diga nada será condenado a treinta años y el que confiese será absuelto. Si los dos callan, al seguir siendo insuficientes las pruebas, se les condenará a seis meses cada uno por cargos menores como la posesión de armas. Si los dos confiesan, se les sentenciará a diez años de cárcel.
El dilema lleva, por tanto, a cooperar o desertar. Es decir, o cooperar con su cómplice y callar, o desertar traicionando al otro y confesar. Como se puede comprobar, es algo más complejo que el juego con el que esta noche se jugarán estar nominados o ser inmunes, pero tiene el mismo principio de cooperar o desertar, siendo que en este último caso la consecuencia es igualmente dramática para los dos: quedarán nominados. Por el contrario, si cooperan solo uno de ellos saldrá a la palestra.
Si se piensa bien en las posibilidades del dilema del prisionero podemos ver como la lógica de la búsqueda del máximo beneficio individual lleva a renunciar al beneficio mutuo de la cooperación. Para el conjunto (dos en este caso) lo menos gravoso es declararse ambos inocentes, ya que entre los dos solamente cumplirían un año de condena, mientras que en cualquiera de los otros supuestos la condena suma 20 o 30 años, por más que en dos de los casos uno de ellos quedara libre. Voy a resumirlo de forma esclarecedora, o eso espero, considerándote a ti, lector, como uno de los sospechosos para que resulte más cercano y creíble. Este sería el trato:
Él lo niega: Tú lo niegas > Ambos sois condenados a 6 meses; Tú confiesas > Él es condenado a 10 años y tú sales libre.
Él confiesa: Tú lo niegas > Él sale libre y tú eres condenado a 10 años; Tú confiesas > Ambos sois condenados a 6 años.
Por tanto, cada preso puede optar por colaborar con el otro asegurando que el compañero se encuentra injustificadamente en la cárcel, o desertar acusándole de haber sido responsable del delito. Esto supone que hay dos opciones en las que ambos consiguen el máximo beneficio común y otras dos en las que uno gana y otro pierde, siendo distinto el beneficiario en cada caso. Sin embargo, en nuestra particular adaptación de este juego la cosa se simplifica, aunque al tiempo es más compleja puesto que no está claro qué actitud revela una mayor conciencia de cooperar buscando el interés común. Es más un juego de suma cero, concepto de teoría de juegos que describe una situación en la que la ganancia o pérdida de un participante equilibra con exactitud las pérdidas o ganancias de los demás. Es así porque, aunque el concurso es grupal, en este caso las nominaciones se juegan por parejas.
Digamos que en dos de las opciones pierde solo uno de los componentes de la pareja, mientras que en la tercera pierden los dos. En este caso, cooperar significa minimizar los daños, y también puede ser una muestra de cariño hacia el otro. Imaginemos que una pareja resulta ser Julen y Sandra. ¿Renunciaría uno de ellos a ser inmune para que lo fuera su amado? Y en el caso de que Cristina se salvase, ¿qué pasaría si hace pareja con Luca? ¿Tendrían tan claro en este caso la decisión como dijeron tenerla en el caso del intercambio? ¿Quién salvaría al otro de quedar nominado? ¿Julen cedería el privilegio a Sandra o Sandra a Julen? ¿Haría el sacrificio Luca por beneficiar a Cristina o viceversa? Las posibles combinaciones hacen que me empiece a relamer.
En el último supuesto de los anteriores está bastante más claro quién debería ceder al otro la inmunidad, porque Luca se ha salvado siempre los martes y en más de una ocasión con un porcentaje realmente ridículo. Sería ilógico que no tuviera la seguridad de que puede superar cualquier terna de nominados y es quien más tiene asegurada su presencia en la final, por no decir el único. Por eso debería tener claro ceder su inmunidad a Cristina, la mujer con la que está compartiendo esta experiencia y que lleva ya siete nominaciones. Repito que siempre y cuando Cristina no haya sido expulsada antes.
Aplicando el dilema a la posible pareja de Luca y Cristina tengo claro que Luca no debe dudar ni un instante cederle a ella la inmunidad, pero ¿y si Luca hace pareja con cualquier otro compañero? Si estamos de acuerdo en que es un seguro finalista y le estamos viendo en condiciones de salvar una nominación, sean quienes sean los nominados, deberíamos defender que ceda el privilegio de la inmunidad quedando automáticamente nominado. Del mismo modo, se puede entender que si su pareja es un declarado enemigo, como por ejemplo Frigenti, prefiera medirse con él en la sala de expulsión. Como se puede ver, sin tener tantas alternativas que lo compliquen como el dilema del prisionero, el juego va a dar muchísimo que hablar.
Ayer Luca le preguntó a Frigenti por lo que había pasado la noche anterior en la sala de la verdad. La fría, distante y cobarde respuesta deja claro que son enemigos declarados, como decía en el párrafo anterior. Es tal vez el único que tiene ahora mismo en la casa Luca, a pesar de que también Julen le quiso complicar la vida afirmando que le había dado la razón en la crítica a las palabras de Cristina sobre el fútbol, cosa que ayer negó de manera categórica. La opinión de Julen sobre las palabras de Cristina se puede achacar a su incapacidad de hacer un análisis profundo sobre la realidad, que sigue poniendo al fútbol en un espacio en el que se reproduce una masculinidad hegemónica. Pero no tiene excusa que intente enfrentar a Luca con Cristina, fuera o no cierto lo que dijo.
A pesar de todo, Luca siguió manteniendo ayer una buena relación con Julen. Sin embargo, a Frigenti le calificó de falso después de que se negara a hablarle sobre lo que pasó en su careo con Cristina. “Como son vídeos en el cubo digo ahí lo que me apetezca decir”, contestó Frigenti dando por supuesto que Luca tenía la versión de la otra parte. Precisamente por eso le pedía su versión, que no quiso dar. “Si no me dices nada esto ya me dice todo”, reflexionaba después Luca hablando con Cristina. Lejos de ir de cara, Frigenti apuesta por seguir haciendo sus trajes de confección barata a Luca y Cristina en el cubo o hablando en la casa con Julen y Sandra. De acuerdo que no hay necesidad de decirlo todo, pero una vez que se ha sabido lo que piensas es honesto dar algún tipo de explicación.
Moleskine del gato
Confieso que me hace gracia ver a todos sobre sus tacones rojos, haciendo referencia al título de la canción de la que ayer empezaron a ensayar la realización del videoclip. Reconozco que es algo muy pueril, igual que me divierten las pruebas en las que se dan culetazos y otras cosas así un poco circenses. Debe ser que tengo intacto ese lado de mi personalidad que conecta con la infancia.
Luca probaba ayer la infusión de 'cola de caballo' (que también el nombre se las trae) y afirmaba satisfecho que tenía la “temperatura de la orina”. Me hizo gracia justo hasta que empezó a darme asquito.
Esta noche tenemos una fiesta en la que, aparte de las innovadoras nominaciones, tendremos otro duelo en la cumbre entre dos grandes protagonistas. Lamentablemente solo puede quedar uno. Cristina Porta o Miguel Frigenti, uno de los dos será expulsado esta noche. También tendremos gala de visita de familiares y amigos de los concursantes. Irene Rosales sorprenderá a Luis; la madre de Luca viajará desde Italia; la madre de los Gemeliers visitará a Jesús mientras Dani recibirá a su novia; Frigenti podrá ver a su novio, y también entrarán a la casa las madres de Sandra, Julen y Cristina.