Elena Rodríguez está salvada. Que Ivana Icardi intercambiase a esta concursante por Keroseno ha valido para que el hermano de Finito no estuviera expuesto esta semana, pero no para poner en la picota a la madre de Adara Molinero. Supongo que muchos achacarán la temprana salvación de Elena al fandom de su hija, aunque una vez más se demuestra que no es tan todopoderoso como se supone. Si recordamos los porcentajes ciegos los dos menores estaban casi empatados a puntos (15 % y 13 %). Por tanto, Elena se ha salvado por la campana, sea contra quien sea.
Ninguno de los otros tres nominados tiene un apoyo supuestamente tan importante. Si acaso Mayka Rivera porque puede sumar a su apoyo personal los de Manuel González y, sobre todo, Lucía Sánchez. Si Elena se hubiera salvado ante Mayka con una exigua diferencia de tan solo dos puntos está claro que enfrentada a Lucía ganaría esta de calle. En el trío de las tentaciones quien tiene tirón es Lucía Sánchez, a la que también se uniría el apoyo de sus dos compañeros en la medida que ha pasado con Mayka. Por tanto, Lucía arrasaría frente a Elena y el no tan poderoso fandom de Adara.
Llevo días repitiendo que los seguidores que Elena hereda de su hija son más ruidosos que numerosos, pero contemplemos que su exigua salvación ha sido por otra razón que no sea esa. Solo se me ocurre que sean muy malos a la hora de elegir una estrategia en las votaciones. Siendo cuatro nominados y teniendo cinco votos por persona tengo claro cuál sería la mejor estrategia para intentar salvar a uno de ellos. Podría contarlo aquí, pero no me pagan lo suficiente. De todas formas, la última en conocer que sigue nominada fue Mayka, lo cual no significa que sea suyo el otro porcentaje bajo.
No le faltó de nada a los encuentros por el Día de San Valentín. Estuvieron en la casa incluso Carlos Sobera y Alfred Infante, dos embajadores del amor bien distintos. Lo de la Infanta disfrazada de Cupido es difícilmente superable. A Keroseno el protagonismo se lo robó su hermano en plató, completamente entregado a Ivana Icardi. Las flechas de Cupido le han dejado muy tocado. No pasará mucho antes de que Keroseno se queje porque no le llevasen a nadie, pero es que San Valentín es el día de los enamorados. A todos nos ha dolido cuando no teníamos pareja, esto es más antiguo que el hilo negro. Marta López salió tan cabreada de su encuentro con Efrén Reyero que no le quedaba sitio para enfadarse por haber tenido un disgusto en lugar de una visita agradable, pero su caso es el mismo que el de Keroseno. Si no estás enamorado esta es una fiesta de mierda. Es así.
Confieso que lo de Efrén Reyero y Marta López me pareció mucho más divertido que los encuentros amorosos y la subida de glucosa que me dio verlos. Manuel González ya había hablado con su novia y ahora la tuvo en la casa e incluso llegaron a juntarse con Lucía Sánchez. Nuevo bandazo en la relación de esta expareja que igual se apoyan como dos hermanos como parecen al borde del cese definitivo de cualquier convivencia entre ambos. Ver a Lucía dispuesta a apoyar a la novia de Manuel me pareció uno de los momentos más bonitos de la noche. Lucía gana puntos sin esfuerzo aparente. Excuso decir que mucho más en cuanto pone un poco de su parte. Es como lo de esos niños que en el colegio les basta con esforzarse un poco para sacar notas brillantes, porque sin hacerlo igualmente ganan.
Asraf Beno me hace sentir incómodo por la inmadurez que demuestra en muchas ocasiones, pero cuando se deshace con su esposa se lo perdono todo. Isa Pantoja es de esas defensoras en plató que ayudan mucho al concursante, en este caso su marido. Supongo que por eso ha tomado las riendas faltando poco más de tres semanas de concurso. Con Ana María Aldón me pasa algo parecido que con Asraf porque tiendo a no creerla. Hasta cuando abraza a Eladio y glosa su excelsa belleza lo dice de tal manera que parece estar interpretando un entremés de los Álvarez Quintero. Ahora bien, antes tuvo otro encuentro, de esos tipo cara a cara con Elena Rodríguez y ahí me convenció. Pero esto lo dejo para más adelante.
También me gustó Marta López cantándole a Efrén Reyero las verdades del barquero. Los dos tenían parte de razón. Es cierto que a Marta se le va la fuerza por la boca y dice cosas que luego no recuerda. Pero su incontinencia verbal estaba justificada anoche con un personaje como el que tenía enfrente. Le negó un abrazo nada más verse y también pasó de dejar la puerta abierta a un acercamiento futuro. Efrén se lo pensó demasiado para hacer creíble que a él si le apetece. Marta dejó a su ex con la palabra en la boca, se levantó y abandonó la sala donde estaban para volver con el resto de los compañeros y hacerle un traje. Con Marta y Efrén las flechas de Cupido iban llenitas de veneno.
Este especial San Valentín generará quejas en la casa, y no solo de Keroseno. Como digo, Marta López tuvo su encuentro, pero de un tipo bien distinto al de los demás, mientras que Elena Rodríguez no pudo abrazar a su pareja porque entró por teléfono. Esto hizo también que tuvieran mucho menos tiempo para hablar que Manuel González, Asraf Beno o Ana María Aldón con sus respectivos. De todas formas, tiene menos motivos para quejarse Elena porque si Pere (a quien ella llama Pedro) no fue a Guadalix de la Sierra fue porque no pudo o no quiso.
Me sorprende que todos los concursantes tengan un drama que contar en su curva de la vida. Tenía mis esperanzas puestas en Manuel González, pero le vimos llorando, ya fuera porque sus padres se separaron mientras él estaba poniendo los cuernos a Lucía en una tentadora isla, o porque una lesión le apartó del mundo del fútbol. Lo que no dejó de hacer ni antes ni después de la lesión fue eso del carricoche. Ayer por la tarde le explicaba con algún detalle a Keroseno su historial de conquistas. Ya contó en otra ocasión que a veces se liga a una chica sin recordar que ya estuvieron liados otro día anterior. Ayer contaba lo mucho que había explotado un piso vacío que tenía su familia y las veces que le habían pillado en uno de sus dormitorios con una muchacha.
La conversación fue llenándose de rombos a preguntas de un Keroseno interesado en saber si ha participado en orgías. Primero contó Manuel González que había estado en la cama con más de una mujer, o él con un amigo y “cuatro chavalas”. Estas cosas bastantes veces. Testigo de la conversación estaba siendo Asraf Beno hasta que decidió levantarse e irse sin decir nada. Parece que no pudo soportar la parte más caliente de la conversación. Y es que Asraf tiene la piel muy fina y se molesta por todo. Esto lo piensan todos sus compañeros de concurso por igual. Desde los que le apoyan y comprenden, como Elena Rodríguez o Ana María Aldón; hasta quienes no le pueden ni ver, como Manuel González.
Si tuviera que puntuar el cara a cara entre Marta López y Ana María Aldón al que hice mención antes no tengo duda en darle el triunfo a esta última por goleada. Para mí sería en 3 a 10, y eso que Ana María jugaba en campo contrario porque Marta, por mucho que le pese, le gana en experiencia televisiva lo que viene a ser unos veinte años. La de Sanlúcar estaba todavía vendiendo pescado cuando Marta entró en Gran Hermano por primera vez. Considerando la diferente experiencia de las dos me parece más valeroso todavía que anoche estuviera mejor Ana María. Además, si vi más diferencia fue en que me pareció mucho más sincera y creíble. Precisamente ella, cuyo impostamiento permanente siempre me ha sorprendido. Termino llegando a la conclusión de que ella es así, porque no se puede vivir fingiendo las 24 horas del día durante los 7 días de la semana.
Mañana los espectadores tendremos que tomar 3 grandes decisiones. Se viene súper mega extra jueves con las últimas nominaciones de la edición y la proclamación de los primeros finalistas.
Se discute la conveniencia de que un reality como este tenga un concursante con más apoyo popular que los demás. Esto abre un debate que se me antoja apasionante y del que hago un apunte en mi Moleskine de hoy.