Cuando Pilar Llori llamaba anoche “veleta” a Laura Bozzo tenía sentada a su derecha a Jessica Bueno y a su izquierda estaba Albert Infante. Este volvió repescado asegurando que no caería otra vez en los errores cometidos con Michael Terlizzi, pero ayer se pasó medio día hablando embelesado con él, le río las gracias sobre el tamaño de su miembro y llegó a la conclusión de que son iguales en muchas cosas. Como advirtió la propia Pilar y han confirmado después Carmen, Laura y Naomi, la Infanta está otra vez entregada al italiano a pesar de las promesas hechas.
En cuanto a Jessica Bueno, el lunes despertaba a gritos a sus compañeros reclamando que no hablasen de ella. Su ataque furibundo era contra Carmen Alcayde y Laura Bozzo, quienes no habían estado juzgándola ni diciendo nada malo de ella, tan solo hacían conjeturas respecto a la expulsión de esta noche. Ya expresé mi duda sobre cómo cree Jessica que puede pasar por un reality sin que se hable de ella, pero no tiene opción a contestarme. Lo sorprendente es que anoche mostrase su emoción porque Laura había dicho unas palabras sobre ella en el directo.
No hay que ser muy puntilloso para comprobar que es contradictorio reclamar a los demás que hagan su concurso sin hablar de ella y al tiempo emocionarse cuando una compañera la menciona. No anula mi sensación de falta de coherencia que a Jessica no le importe, incluso le guste, que hablen de ella sí es a su favor, mientras lo rechaza si es en contra. Ya sé que es así normalmente, pero dentro de un reality es necesario asumir todo tipo de críticas. Jessica creía que el lunes a la mañana Carmen y Laura hablaban de su relación con Luitingo, y eso debe pensar que no la beneficia. Al margen de mi argumentación, la inquietud de Jessica cuando se habla de su relación con un amigo revela que no tiene la conciencia muy tranquila al respecto.
Recopilemos la información que estoy manejando. Pilar destaca de Laura su inconstancia y el carácter mudable de sus afirmaciones. Lo hace teniendo a un lado a Albert, que ha asegurado por activa y por pasiva que no volvería a acercarse a Michael cuando está ya tan cerca que empieza a quemar. Y al otro lado está la Jessica que el lunes le reclamaba a Laura que no hablese de ella y se emociona el miércoles cuando también Laura dice un par de palabras sobre ella mientras se posiciona en contra de Pilar para la expulsión de esta noche. Pero, por lo que sea, la veleta es Laura Bozzo.
Por completar mi argumento, la propia Pilar aseguró tras ser repescada que haría su concurso pasando de Luitingo y Jessica, pero no ha salido del bucle de su relación con el cantante y la falta de empatía de la mujer que ocupa ahora un lugar en el corazón de este. Pilar es una veleta que apunta siempre al mismo lugar, por más que se intente cambiar su orientación. Y, dicho con todos los respetos, responsable principal de que hayamos tenido que seguir dándole vueltas a su cutre y malograda historia de amor. Y mi pregunta es: ¿de verdad es Pilar Llori la persona más adecuada de acusar a Laura de ser una veleta? ¿puede ser que no se esté dando cuenta de hasta qué punto son veletas otros compañeros de encierro, ella incluida?
Puedo aceptar que el caso de Laura Bozzo es extremo, lo cual no les debe pillar de sorpresa a Pilar Llori y a Naomi Asensi, las dos concursantes que ayer renegaron del team naranja, solo compuesto ya por Laura, Carmen y Albert. Pilar ya sabía cómo es Laura al volver repescada y Naomi desde antes de entrar siendo una concursante reserva, cuando dijo en la sala de confesiones que simpatizaba con el equipo del desaparecido dormitorio naranja. Laura es así desde siempre, al menos en este concurso. No es que diga una cosa hoy y otra mañana, sus bandazos son mucho más rápidos. Sin ir más lejos, ayer poco más tarde de las ocho sugería hablando con Naomi que se posicionaría contra Jessica y un par de horas más tarde lo hacía contra Pilar.
Contribuye a la imagen de inconstancia caprichosa, veleidosa y voluble, que tenemos todos de Laura el aventurarnos con frecuencia a intentar interpretar el motivo de sus actos y opiniones. Tengo la sensación de que la mayoría de las veces habla y actúa según le dicta su intuición y siguiendo lo que le manda el corazón. Analizar racionalmente a Laura es un error y conduce a la frustración. Ella es la primera consciente de sus contradicciones. Sabe que es una contradicción con patas y no parece inquieta por ello.
Ayer asistí a varias discusiones bizantinas en redes sobre Laura y el motivo de sus actos. La más interesante giraba en torno a la duda sobre si le mueve la estrategia de intentar que el enemigo no se victimice o esa es una consecuencia de un acto que tiene otras motivaciones. Incluso podría tratarse de un mero acto reflejo de alguien que hace caso a su intuición, como digo. También me llamó la atención la teoría de que al estar la diva convencida de la expulsión de Jessica la defiende ahora para reconquistar (dígase heredar) a sus fans, que casi logran ponerla en la calle hace siete días. Teoría que en su otra versión habla de la convicción de Laura respecto a la segura salida de Pilar, por lo que se arrima a la supuesta favorita para contar con la complicidad de sus fans.
Estas teorías podrían ser acertadas, al igual que cualquier otra. Personalmente me decanto por las que serían motivaciones principales de Laura, a partir de las cuales va tomando decisiones sobre la marcha, consciente de que muchas de ellas pueden ser equivocadas. Creo que actúa con miedo, al tiempo que tiene muy presente la necesidad de no convertir en víctima al enemigo. Una concursante que se sabe de memoria pasajes de ‘El arte de la guerra’ tiene que ser obligatoriamente una gran estratega, lo cual no quiere decir que no se deje llevar por impulsos o corazonadas en muchas ocasiones.
El concurso es muy fácil para Pilar Llori y Naomi Asensi en comparación con cómo es para una de las protagonistas de la edición. Ninguna de aquellas lo ha sido. Las dos tienen cierta convicción de que no pueden ganar este concurso, lo cual también hace mucho más fácil mantenerse firme y presumir de ser más virtuosa que nadie. A veces identifico a Naomi con Jessica en la defensa de unos determinados valores, como si todo el mundo tuviera que compartirlos. A la vigía de la moral le ha salido competencia. Ahora Naomi parece en situación de repartir carnets de concursante íntegro. Incluso parece defender más que nadie las esencias de un equipo naranja que existía desde mucho antes de llegar ella.
A Laura le conviene que esta noche salga Jessica, aunque está completamente convencida de que se queda. Tanto es así que en una breve reunión sobre nominaciones en la que estaban Albert, Carmen y Laura no contemplaron otro escenario que la salida de Pilar. Entiendo que debe ser difícil para los seguidores de Laura no votar por Pilar después de que ayer le dijese que está “un poco uhuhuh”. El comentario fue censurado de inmediato por Carmen Alcayde, que el día anterior sugería eso mismo de manera algo más sutil y sin estar delante la diva. La gran diferencia es que Pilar hacía los movimientos circulares con el índice apuntando a su sien que echaba yo en falta ayer en el comentario de Alcayde, otra veleta que ya nos ha acostumbrado a su carácter intrínsecamente mudable. Por mucho que cueste, quien desee llevar a Laura Bozzo a la final y poder verla ganando tiene que votar por Jessica Bueno. Si esta se cuela en la fase de votaciones en positivo tiene todas las de ganar. La oportunidad de hoy es única.
Los porcentajes ciegos del superduelo de este superjueves estaban así anoche: 55 % y 45 %. Esperaba una diferencia algo mayor, más cercana al 60-40. En todo caso, que haya tan solo diez puntos entre las dos candidatas a la expulsión desbarata las convicciones de ambos bandos. Tanto quienes estaban convencidos de que saldría Jessica como quienes veían a Pilar con pie y medio fuera saben ahora que no es tanta la diferencia entre las dos nominadas. De esto hablo en mi Moleskine de hoy.
Esta noche tenemos una fiesta, será un nuevo superjueves en la cumbre. Entrarán de invitadas al hotel de la prueba tres famosas, una de ellas sabemos que será Anabel Pantoja, prima del amigo de Luitingo y expareja de Jessica. La salida de Jessica tiene el interés añadido de ver la cara que se le queda a Laura. También ver cómo evoluciona la reciente enemistad de esta con Pilar y Naomi. Si sale Pilar veremos cómo Luitingo y Jessica lo celebran como una gran victoria. Sería triste que el concursante repescado por decisión de su “amiga” Jessica, a quien la audiencia no quiso ver otra vez dentro de la casa, tuviese esta noche un premio que podría incluso agrandar la apócrifa leyenda sobre su perla de ahí abajo.