La bravuconería es contagiosa, o eso parece viendo cómo la “princesita” Katerina saca su yo más pendenciero y bronco ante Adara. Lo de Diego parece menos extraño, pero hasta el momento estaba en estado zen y le ha salido la vena camorrista ante Asraf. Parecen empeñados en hacer buenos a sus enemigos en Supervivientes 2023. En ocasiones, Adara y Asraf parecen dos benditos en comparación con lo que les rodea. Les están poniendo en bandeja que puedan llevar a efecto su presunta estrategia. Más fácil no lo podían tener con la actitud provocadora y desestabilizadora que están teniendo hacia ellos. Si Adara y Asraf necesitaban coartadas ya las tienen. Las lágrimas de Adara se justifican por las palabras de Katerina. ¡Qué proverbial torpeza están teniendo! No solo les va a hacer buenos, terminarán consiguiendo que sean santificados.
Que Katerina tiraba de mala manera los troncos y maderas cerca de donde estaba Adara con la intención de provocarla es algo tan evidente que no se puede defender ni queriendo. Adara podía haber reaccionado de forma más pausada, pero sospecho que aunque lo intentase no le saldría. No es extraño que se alterase ante la reincidencia de Katerina, a quien Adara ya había pedido que no le tirase la madera tan cerca. A Katerina le entró por un oído y le salió por otro. La palmaria demostración de que quería provocar, tensando la cuerda más de lo prudente, es que cuando Adara se volvía a quejar, advirtiendo que tendrían problemas si seguía, respondía: “¿Qué vas a hacer? ¿Me vas a pegar?”. Cuando uno pregunta a otro si le va a pegar lo que está haciendo en realidad es incitarle a que lo haga.
No hay por dónde coger este episodio porque ya en la playa siguió la cosa igual. Es decir, Katerina empecinada en dejar ver su lado más siniestro, llegando a decirle a Adara que cómo se podía comportar así teniendo un hijo. La apelación al mal ejemplo para descendientes u otros familiares (Katerina disparó en varias direcciones) es otra prueba de querer poner a alguien al límite, esperando sacar algún rédito de esa tesitura. Si en lugar de llorar Adara se hubiera ido a coger del cuello a Katerina ahora tendríamos al menos una expulsada por motivos disciplinarios. Como hacen los detectives de la tele, ante un hecho siempre conviene analizar quién podría salir beneficiado. En este caso sería Katerina, pero su torpeza hace que salga reforzada su oponente.
Conocidos los precedentes, podríamos pensar que se están intercambiando los papeles. Habría que forzar mucho el argumento para defender que Katerina no puso en peligro a Adara tirando los troncos cerca de ella, que cuando habla del mal ejemplo que da y refiere que tiene un hijo no está queriendo implicar al menor en la discusión, simplemente habla de una realidad. Y retorciendo aún más la realidad se podría decir que con su llanto Adara está queriendo dar lástima al espectador. Pues bien, no creo que nada de esto sea así, pero si lo fuera es imposible defenderlo sin parecer enfermizamente tendencioso. Katerina lo ha hecho tan mal que está poniendo en peligro su concurso, hasta ahora fácilmente defendible.
Lo de Diego viene también de las ganas que le tiene a Asraf. Este concursante se había mantenido bastante al margen de las polémicas, aunque siempre que ha podido se ha decantado nominando a Adara. Contra Asraf solo se había pronunciado con la boca pequeña y en petit comité, pero con el episodio del tronco le declara la guerra. Es posible que sintiera cierto resquemor por el hecho de que Manuel le tomase la delantera enfrentándose a Asraf. Pues bien, cuando toma el mando de la situación y decide adelantarse teniendo él la bronca semanal con el novio de Isa Pantoja resulta que le sale mal.
No sabría decir quién tenía más ganas de espolear a uno de sus compañeros, si Katerina a Adara o Diego a Asraf. Los dos han ido a por los repudiados del grupo y han salido trasquilados. Que Diego reconozca sus intenciones ante Asraf le sitúa en un lugar incómodo, dando a este un respiro en la valoración sobre lo mucho que lleva pensado el modo de destacar. Asraf aprovecha la situación para dejar en evidencia a Diego, no solo porque esta vez el que empieza las provocaciones no es él, sino porque cuando le pregunta si se ha sentido herido en su hombría responde de la peor manera posible. Referirse a la cantidad de gente con la que se ha peleado no deja en buen lugar a Diego.
Estábamos equivocados si creíamos que no se podía quedar peor que Katerina y Diego. Tenía que llegar Ion Aramendi en Conexión Honduras y las tres puertas (que siempre funcionan) a los cayos Cochinos. Una era la puerta del pasado, tras la que estaba Miriam, exmujer de Ginés. Otra la del presente, y tras ella la hija del concursante. La puerta del futuro se abrió para que este encontrase un corpóreo de Yaiza, su pareja actual. Cuando digo exmujer estoy siendo preciso porque anoche reconocieron haber comenzado los trámites del divorcio a mediados del mes de febrero. ¿No parece extraño que solo unos días después Ginés se muestre dispuesto a volver con su mujer y le pida que disculpe sus infidelidades? Más raro aún que anoche Miriam dejase la puerta abierta a una posible reconciliación.
Ginés dejó tirado en la playa el corpóreo después de descartar a Yaiza como el peón que sobra en el tablero de su vida. Lo hizo confesándole a su mujer de la forma más cruda que si le perdona la elige a ella. Para Ginés las mujeres parece que fueran como pantalones, que elige uno u otro sin más. No se puede quedar peor en tan poco tiempo, tirando por tierra la imagen de buen hombre que había cosechado, lo cual tampoco quiere decir que sea malo, pero no ha sabido gestionar la situación. O ha querido gestionarla de forma poco honesta, que todo puede ser.
Da la impresión de que Ginés y su exmujer, con la complicidad de la hija de ambos, hubieran decidido sacar provecho de la situación. Demasiado buen rollo para haber comenzado los trámites del divorcio apenas una semana antes de partir para Honduras. La duda es si Yaiza, pareja actual de Ginés, participa del negocio. Anoche aceptó ir a Honduras ella también, aunque luego aclaró Ion que estaba planeado previamente. Su encuentro el martes con Ginés promete tener mayor enjundia que el del corpóreo abandonado de anoche. Visto lo visto no sería extraño que Ginés abandonase en la playa también a la Yaiza de verdad.
Lo del beso entre Manuel y Katerina da tanta pereza que igual lo comento mañana, si me repongo de ello. No me gustó Adara cuando le habló a Katerina de su carpeta fake en estos términos: “Es tan fake como tu cara”. Puestos a comparar los arreglos de cada una creo que en cantidad gana Adara por goleada. Pero, vamos, que carpeta fake sí que parece, aunque como le contestó Kat ella es experta en eso mismo. Hablando de Manuel, qué feo el mensaje a su hermana Alma advirtiéndole sobre Jonan. Ya quisiera Manuel transmitir una milésima del buen rollo que transmite Jonan y estar haciendo un concurso tan limpio como este concursante. Que hubiera elegido a Adara para tomar un café (solo lo harían si se elegían mutuamente) y esta también lo eligiera a él puso sobre alerta a Manuel. Debería saber que estamos viendo la mejor Alma justo cuando está al lado de su “bebé” Jonan.
En el Mokeskine del gato opino del no abrazo de Gema a Mosquera en su despedida antes de partir para Madrid, así como de lo que ha cambiado la audiencia a la hora de no votar por la expulsión de aquellos que piden salir de allí. Además, nuevos y buenos momentazos.