Esta noche fui a la cosa esta de Belén Esteban
Y esto, queridos amigos del Pasillero, es lo que pasó. Siempre explicado con prácticos números:
1. Como haría todo buen programa de actualidad, empecemos por lo peor: el SAMUR llegó a eso de las diez, ya cuando estaba a punto de empezar la película, porque a una señora le acababa de dar un bajón de tensión y yacía en un sofá bajo la preocupadísima mirada de su marido, que le sujetaba el abrigo. Unos señores se la llevaron en camilla por una puerta de emergencia del cine.
-Por favor, dime que se desmayó al ver a Belén Esteban -le dije a un compi de Telecinco.
-No, le dio un bajón de tensión, a secas.
-¡MIERDA!
2. Había de todo entre sus fans, pero ganaba esa encantadora figura del macarra madrileta. Se podía escuchar en la entrada:
-Ej quejtoi ejperando a que aparezzzca mi colega con laj entradas.
También diré que vi entre el público soberano a un par de muchachos medio góticos e incluso a uno que parecía un mod. Hay fans de aquí y fans de allá.
3. El gorila de la puerta trataba fatal a todas las señoras emocionadas que se habían vestido como para ir a la boda de una sobrina en Majadahonda para ver a Belén Esteban. Les chillaba una barbaridad. ¿Que debe de ser un coñazo controlar a una masa desbocada? Desde luego, pero eso debería ir en su preparación. La verdad es que los gorilas que ponen en todos los eventos a los que me mandan son para echarles de comer aparte.
4. El público que se agolpaba en la puerta recibió con emoción y chillidos a la presentadora de un call show que ponen a las tres de la mañana: Tamara Gorro. Esta claro que esta gente necesita incentivos en su vida.
5. A los de Sé lo que hicisteis no les dejaron entrar porque no estaban acreditados. Creo que hicieron mal: toda publicidad es buena. Deberían haberlos dejado pasar. Encontraría lógico que en Telecinco vetasen a un programa que fuese capaz de hacer una corrosiva crítica de lo que estaba ocurriendo dentro y dejase a la cadena en mal lugar. Pero simplemente eran los de Sé lo que hicisteis.
6. Beatriz Trapote estaba de reportera de Enemigos íntimos, ese programa que se hace donde Sálvame Deluxe y que es igual que Sálvame Deluxe Sálvame Deluxey donde va mucha gente que va a Sálvame Deluxe, pero que sin embargo, por algún motivo desconocido, se llama Enemigos íntimos.
Cuando llegó Rafa Mora (que iba tan elegante como siempre, con una impresionante sudadera) Beatriz se apartó discretamente y no dirigió a él el micrófono. Sin embargo, sí lo hizo una media hora después, a Belén Esteban, que me cuentan que le espetó:
-NO ERES BIEN RECIBIDA AQUÍ.
Beatriz Trapote me pone a veces un poco nervioso y otras veces me da ternura. La muchacha es guapa. Y parece que tiene bastanta labia. Tiene muchas ganas de ser periodista y seguro que podría hacerlo con mucha gracia porque morro tiene por un tubo. Sin embargo, elige irse a realities de donde sólo se puede volver con demandas, se presta a shows como el de esta noche para los programas en los que trabaja y hace bolos por discotecas de provincias, como si fuese Chiqui chiqui boom boom o Iván Madrazo.
Beatriz Trapote debería cambiar de representante y RRPP mañana mismo, a primera hora.
Yo mismo me ofrecería, pero al cambiar de teléfono he perdido toda mi agenda. Sólo la podría poner en contacto con mi madre.
7. En medio de grandes hermanos, presentadores de la cadena y tal y pascual, de repente apareció... Josep Lobató. ¿Qué hacía allí Josep Lobató? Ni puñetera idea. ¿Empezará a trabajar con Telecinco? Pues eso estaría muy bien, la verdad.
8. Otra cosa que vi: a un chico con el pelo engominado para atrás y gafas de pasta como Jon Kortajarena. Sobra decir que eso NO convertía al muchacho en Jon Kortajarena. Yo no sé si era famoso o no, pero un par de chiquitas le pidieron una foto. Desde que el look Kortajarena ha llegado a la calle no hay quien aguante lo de cruzarse a todas horas a algunos que llevan la misma pinta que él. Y menos mal que aún no ha llegado a Mujeres y hombres y viceversa. Pero no cantéis victoria, porque llegará. Y entonces NOS VAMOS A CAGAR.
9. Yola Berrocal, la ganadora de Hotel Glam, se presentó en el estreno con un chico que no sé si es su novio o su ex novio. Era una cosa horrenda que parecía vestida y peinada por el mismísimo Satán. Sólo os digo que era una cosa tan desagradable de ver, que voy a poner una foto de él desenfocada por si hay gente leyendo esto con problemas de corazón:
10. En la siguiente foto podemos ver a gente que mola muchísimo y a gente que hace que desee arrojar un zapato al televisor en cuando aparece. Os dejo que saquéis vuestras propias conclusiones, aunque es facilísimo:
11. Jimmy Jiménez Arnau pasó del photocall y rechazó amablemente a una señora que quería sacarse una foto con él. ¿Por qué estaba tan arisco? Pues no lo sé.
Ah, ¿qué haríais si no me tuvieseis a mí para contaros anécdotas tan importantes como esta?
12. Oscar Lozano se parece cada vez más a David Hasselhoff. Pero con el vestuario de La Toya Jackson. Cuando se encontró a Belén Esteban se dieron un saludo muy educado pero frío. Jolín.
13. Lo más importante: había una verdadera estrella entre tanta advenediza y tanto personaje mil veces visto y nadie le hizo ni caso. Nadie le llamó para el photocall, nadie le puso un micro. Nadie. ¿Quién era? ¿Kate Moss? Casi: Tony Genil.
Que le hagan preguntas a Rafa Mora o Tamara Gorro y pasen de Tony Genil, alguien que afirma haber cantado en Marbella para Dean Martin o Sammy Davis Junior, es algo que me supera. No entiendo este mundo en el que vivimos. Como yo sí me cercioré de su presencia, hice esta foto que os regalo y en la que se ve a Genil junto a una Yola Berrocal que hace sus pinitos como fotógrafa. Tenemos nueva Bruce Weber a la vista, ya veréis.
Antes de irme, dos cosas: la primera es que últimamente no puedo recuperar aquella bonita sección llamada "El pasillero responde" porque YA NO ME INSULTÁIS. Y así no tiene gracia. La segunda es que he leído en el blog de Kiko que Julito, aquel homínido de Gran Hermano 10, SE HA REPRODUCIDO. Yo no voy a decir nada, pero lo que dijeron los mayas sobre el 2012 y el fin del mundo empieza a cobrar forma.