La verdadera cara de Jacobo Ostos

Hoy, desde este Confesionario desvelamos la verdadera cara de Jacobo Ostos, ese concursante de Supervivientes 2011 que se está riendo de la organización del programa y de toda la audiencia, como bien pudimos comprobar anoche desde la gala; y del que hoy os mostramos, en exclusiva, su álbum fotográfico personal, para que comprobéis todas las poses de este latin lover de las chonis de turno.

Nos ponemos en situación: hace pocos meses, desde el programa de radio “Levántate y Cárdenas” de EuropaFm, llamaron a Jaime Ostos para gastarle una broma telefónica, que consistía en avisarle que en unos minutos recibiría el pedido de 5 pizzas, 15 cervezas y 14 croquetas de regalo, por 138,20 euros.

Jaime Ostos, aparte de asombrarse del precio, asegura que él nunca come pizza por lo que va a ponerse en contacto con su hijo para saber si ha sido él quien ha realizado el pedido, para minutos más tarde terminar perdiendo los nervios y dejar claro que él es un tío con dos cojones, matador de toros y piloto civil, dejar en el aire una especie de reto con verse las caras y colgar la llamada.

Una reacción que a nadie sorprende viniendo de él, sabiendo el humor y las malas formas que gasta el torero.

La broma terminó en ese momento, pero minutos más tarde, Jaime Ostos llamó a los locutores de la broma, y es su hijo, Jacobo Ostos, quien se encarga de hablar en esta ocasión, dejando tras de sí una conversación impactante que plasma la verdadera personalidad del hijo del torero, y es que, como dice el refrán: “de tal palo, tal astilla”.

Escúchalo online:

Broma: “Quería hablar con el señor Ostos, por favor”

Jacobo: “Pues si quieres hablar con el señor Ostos, vienes aquí y hablas conmigo primero, porque fíjate lo valiente que eres tú que llamas por teléfono en vez de venir aquí en persona”

B: “Yo no tengo que ir a ningún lado porque estoy trabajando”

J: “Ah, ¿sí? ¡Pues dime donde trabajas, guapo!”

B: “Yo a ti no voy a decirte nada, listín. ¿Tú qué eres? ¿Jackie Chan?”

J: “No, pero te iba a poner dos días en el hospital bastante jodido, en serio. Si tienes tantas ganas de guerra, ¿por qué no vienes aquí?

B: “Ganas no, del teléfono de tu padre se pidieron unas pizzas, y no las ha pagado, ¿me entiendes?”

J: “Bueno, pues ven aquí a cobrarlas…”

B: “Yo no tengo que ir a ningún lado, esto evidentemente pasará como el resto de facturas impagadas a los abogados, y se lo van a reclamar, y ya está, no pasa nada”

J: “¡Eres un tonto a las tres! Que venga tu abogado y me diga dónde vives…Eres un tontito…A ver… ¿eres de Madrid? Pues dime dónde vives”

B: “¿Yo te voy a decir donde vivo? ¿Tú eres tonto o qué?

J: “Mira, te voy a decir yo donde vivo… (Da su dirección). Y llamas a la puerta…”

B: “¡Sí, claro! A tu terreno voy a ir…”

J: “Voy a salir yo solo… ¡Te voy a dar tal puñetazo que vas a dormir 3 días, idiota!”

B: “Muchas películas has visto tú de Rocky”

J: “No necesito ver películas. Eres un cobarde por llamar por teléfono. Ven a cobrar aquí tío, yo estoy encantado de darte lo que quieras…”

B: “No, yo trabajo en mi oficina y no tengo que ir a ningún lado”

J: “Pues entonces te jodes y no vas a cobrar nada, tonto. Tonto… ¿eres tonto? Porque no haces más que perder el tiempo, si estás trabajando ¡curra imbécil! ¡Si no tienes dinero ponte a trabajar, que eres un imbécil, y deja a los que vivimos bien!

Y si quieres algo, vienes y me lo dices a la cara, y ya luego veremos cómo te dejo la cara…

Si tienes algo contra mi padre o contra mí, vienes y me lo dices. ¿Eres de Madrid? ¿Sabes dónde encontrarme? En cualquier discoteca me puedes encontrar. Te lo pido por favor, que me busques y me digas que eres el de las pizzas…”

B: “¿En cualquier discoteca? Porque evidentemente trabajar no sabes lo que es trabajar…”

J: “¡Qué me sobra el dinero tonto! Tú eres un pringao de mierda que tienes que trabajar para vivir y a mí me sobra el dinero, tonto, que eres tonto… ¡Y eso es lo que te jode, subnormal! ¡Qué me cago en tu puta madre, a ver si tienes cojones de ponerte un día delante de mí, imbécil! Qué eres un imbécil, un subnormal y un cobarde… ¡Qué me comas la polla y que te vayas con tu puta madre! ¡Y ponte a trabajar para ganar dinero imbécil!”

Para los que teníais curiosidad por conocer la verdadera personalidad de Jacobo Ostos, para muestra un botón.

Es tremendo que la reacción de este chaval sea a imagen y semejanza de la que tantísimas veces hemos visto en su padre. Menos mal que sólo se trataba de una simple broma telefónica, porque llega a tratarse de una confusión real, y yo creo que a nadie nos gustaría toparnos con semejante energúmeno que no duda en amenazar físicamente al locutor en repetidas ocasiones, y para más inri, jactarse de las personas que tienen que trabajar para ganarse la vida, ya que a este niñato sin oficio ni beneficio, según él, le sobra la pasta…

Por lo que, después de escuchar detenidamente la conversación telefónica de Jacobo Ostos, me rondan varias preguntas por mi cabeza:

1.- Si le sobra tanto el dinero ¿qué pinta en Honduras haciendo el ridículo? ¿Por qué decide irse a Supervivientes a pasar penurias por un puñado de euros? ¿Por qué, si tan mal lo está pasando, en vez de ir pidiendo a sus compañeros que le nominen para irse de vuelta a su casita y a sus bolos, no paga la cantidad estipulada en la cláusula de su contrato en caso de abandono y vuelve al regazo de papi y mami para que le sigan dando la paga semanal?

2.- ¿Por qué alardea de tener tantos huevos cuando, en realidad, según su comportamiento patético en Supervivientes quejándose y auto compadeciéndose sin parar porque no le gusta el pescado, porque no le gustan los cocos, porque echa de menos a mamá y a papá… nos está demostrando que lo único que tiene son dos guisantes que para lo único que le sirven es para tirarse a la choni de turno?

3.- Si según esta conversación, la reacción automática de este chaval es amenazar con mandar al hospital y dejar inconsciente a puñetazos durante 3 días. ¿Por qué me tengo que creer que Jacobo Ostos no aporreó la puerta de Aída Nízar durante la madrugada antes de que comenzara el reality, tal y como ella denunciaba? ¿Por qué me tengo que creer que Aída Nízar mentía al asegurar que Jacobo le amenazó con un “si no estuviéramos aquí, te arrancaría la cabeza”? Porque si reacciona así ante una llamada telefónica de menos de 3 minutos, ¿qué habrá soltado por la boca al aguantar más de 2 días seguidos a alguien como Aída?

Por último, recordaros que este espacio cuenta con más de 131.000 fans en Facebook, porque nadie quiere quedarse fuera de todo lo que ocurre alrededor del Confesionario de Kiko. Sé el primero en enterarte de las exclusivas y posts que publicamos desde este espacio. No te lo pienses y hazte fan del blog que más seguimiento y actualizaciones tiene en la red:

http://es-la.facebook.com/ElConfesionariodeKiko

Para cualquier información referente a los temas que tratamos, este es nuestro correo electrónico: elconfesionariodekiko@hotmail.com