Si algo me quedó claro durante la gala de anoche fue que Rubén es un auténtico pelele de la vida.

Un pelele que ha preferido la paella de mamá los domingos, que seguir a su propio corazón; que ha cambiado los 20 euros de paga semanal a luchar por su media naranja, aceptando que esta no es perfecta y que comete sus errores como todo hijo de vecino.

Y yo me pregunto que habrá hecho con Chari durante estos años de relación, ¿le ha tenido encerrada en su casa para que su mamá no la viera, y no pudiera hacer o decir nada que la molestara? Porque no entiendo dónde está el delito tan sumamente grave que Chari ha cometido, como para que esa madre tan retrógrada no pueda perdonarle, dando a cada cosa la importancia que tiene en cada momento, y aceptando que su hijo ya cumplió la mayoría de edad y, se supone, que tiene los suficientes dedos de frente como para tomar sus propias decisiones en sus relaciones de pareja.

Aunque también escuchando a la misma Chari reconocer como si tal cosa, en la gala de anoche, que si Rubén no tiene personalidad no es su culpa... Me parece a mí que entre la novia y la suegra se han juntado el hambre con las ganas de comer, y se enzarzan a la primera de cambio para ver quién gana el liderazgo y el total dominio en la cabecita nada pensante de Rubén.

En lo que sí que estoy de acuerdo con Chari es que gracias a el comportamiento y a las actitudes que ella tuvo dentro de la casa, ahora Rubén ha conseguido de nuevo un billete de vuelta a Guadalix. Porque me temo que el novio de España, sin el morbo de ver qué pasa o deja de pasar con su rubia oxigenada, no será más que un bulto sospechoso en esa casa y un auténtico coñazo, por mucho que le hayan llenado la cabeza de pájaros.

Y por su propio bien, debería empezar a reconocer que si está ahí dentro de nuevo, es únicamente por Chari, por ser "una víctima" y también, porque no decirlo, por hacérselo.

Porque no voy a entrar en si el comportamiento y las palabras de Chari son más o menos reprochables, pero lo que tengo claro es que esa chica no ha matado a nadie y no merece el linchamiento público que se le está dando.

Ya que Chari ha rendido cuentas a la única persona que tenía que hacerlo, que no es ni la audiencia, ni su suegra, ni su madre... sino a Rubén. Y a partir de ese momento, deberíamos dejar nuestro papel en el juego aparte, tener un poco de sentido común y no llegar a descalificaciones por lo que únicamente fue un tonteo; sí, inadecuado, sobre todo por la situación de tener a su novio a escasos metros, pero que no llegó a más en ningún momento.

Por lo que no estaría mal empezar a actuar conforme a la época que vivimos y no remontarnos al siglo primero, en el que cada uno cogía una piedra y actuaba como juez ante las mujeres, que según ellos, habían dado pie a una reputación cuestionable.

Porque si no, ahora me pregunto, si hacemos esto con Chari por frotarse en dos juegos, ¿que tendríamos que hacer con Laura? ¿Directamente la ponemos un burka? ¿o abrimos votaciones para echarla de España? Porque si nos ponemos en plan dictadores y retrógrados, también comencemos a utilizar la misma vara de medir para todo el mundo, y recordemos que mientras juzgamos a Chari duramente durante semanas por haber tonteado con otros chicos; aplaudimos y apoyamos que Laura pusiera los cuernos a su novio delante de toda España, dejando el tonteo de Chari como un simple juego de niños.

Así que empecemos a ser justos y a dejar de ponernos a toga de juez, que ya huele...

Por otro lado, no consigo entender las continuas lágrimas de Laura ante la posibilidad de que su Malaguita o ella puedan salir expulsados, dando por hecho que eso significa el punto final de su relación.

Entonces, vamos a ver, ¿no es amor lo que nos está vendiendo? Porque no cuela que cada uno viva en una ciudad distinta, que tengan planes diferentes... Esas hechos no son ninguna verdadera razón para dar por zanjada una relación si verdaderamente hay amor, si verdaderamente existe algo tan fuerte como para romper una relación de 7 años y ponerle los cuernos ante millones de personas. Si de verdad sientes, luchas, o por lo menos lo intentas.

Así que puede que la verdadera razón de las lágrimas de Laura sea imaginarse sola en Parla, dando explicaciones a Samu, aguantando los reproches de su familia, y sin su follamigo de turno.

Por no hablar de las lágrimas del Malaguita, que para mí sólo significan que este no quiere quedar como el malo de la película mientras que Laura se deshace en lágrimas de cara a una semana en la palestra.

Lágrimas que derrama por una chica que supuestamente no encaja para nada con lo que a él le gusta, porque aunque Laura esté enchochada con él, para Marcelo no es más que un mero entretenimiento para hacerle más ameno, y satisfactorio, su paso por la casa.

Ya que realmente al Malaguita lo que le va es el papel de chulazo, al lado de una niña pija, que lea y que maneje, según sus propias declaraciones. Vamos, que cuando salga de la casa no me extrañaría verle tirando los trastos a la mismísima Lomana.

Respecto a la decisión por parte del programa de castigar a Laura y a Terry mediante la nominación directa y retirándoles el derecho a nominar a sus compañeros, me parece un tanto excesiva, e incluso sin ningún sentido con estas 12 ediciones de concurso a nuestras espaldas.

Porque ¿dónde están esas peleas subidas de tono en las que lo único que acertábamos a escuchar eran pitidos de censura? ¿Dónde están esas peleas de la Legionaria cagándose en todo quien se creyera que ella no se tira un pedo donde le viene en gana? ¿Dónde están esas peleas de Tatiana en la que se pasaba todo por su mismísima rajeta? ¿O en las que Niky chillaba hasta la saciedad en la cara de Eloísa que le diera los papeles de la paella?, ¿o peleas como la de Indhira llamando zorra a Carol mientras le tiraba un vaso de agua?

Eso sí que fueron peleas con todas las letras, y no lo que sucedió entre Terry y Laura, que lo más fuerte que se llamaron fue “fea” y “mala persona”. ¡Qué los niños de la edad de mi sobrino tienen discusiones más acaloradas que esa porque les quiten la goma de borrar! Por lo que me parece una medida disciplinaria totalmente desmedida.

Y más teniendo en cuenta que cualquiera en nuestro día a día nos acordamos de la madre del vecino del 4º si nos quita el ascensor, o le llamamos algo más que "feo" al que se nos cruza con el coche en medio de un atasco de impresión, ¿no?

Y con esto no digo que sea lo correcto, pero sí que son nuestras reacciones normales cuando nos sentimos frustrados o perdiendo los nervios.

Así que no estaría de más ser un poco más comprensivos con estos concursantes, ya que personalmente recuerdo cómo me sentía cuando llevaba 3 meses encerrado en esa casa, viendo únicamente un día tras otro a las mismas personas en el mismo sitio, y estando ya hasta las narices de los micrófonos, el decorado, el súper, las cámaras, ¡de absolutamente todo!

Y en esos momentos cualquier motivo era suficiente para comenzar una disputa y perder los nervios aún más. Así que no me quiero ni imaginar cómo tienen que estar los concursantes de este Gh12, que llevando 3 meses encerrados saben que aún se encuentran en el ecuador del concurso. ¡Tiene que ser agotador psicológicamente!

Por lo que meterse en una conversación de terceros, o no poder ir al baño porque tu compañera lo haya atrancado 3 veces, son motivo directo de conflicto.

Y aunque en algunas ocasiones se extralimiten, no llegarán a mayores, porque son conscientes de donde se encuentran, y a partir de ahora lo serán aún más, porque esta nominación disciplinaria sin duda les limitará el resto del programa en lo que deberían ser reacciones naturales y reales, que no llegan a más, y que en el fondo son las que nos hacen recordar esos momentos de por vida; para, en cambio, dar paso al miedo de una nominación disciplinaria por dedicarse insultos de niños de 4 años.

¿O es que alguien realmente se cree que Laura, por mucho que sea de Parla, iba a tirarse de los pelos con Terry por llamarle “mala persona”, cuando hemos visto que, aunque sus deseos fueran otros, logra mantener la cabeza fría siendo consciente de donde se encuentra mientras escucha cómo Jhota le llama “guarra que sólo sabe follar y comerse nabos”?

Así que no estaría de más que de vez en cuando nos pusiéramos en su piel, y que no nos echáramos tanto las manos a la cabeza cuando vemos lo que buscamos: el máximo realismo posible en un intenso concurso de convivencia.

Respecto a la expulsión, me alegra que Jhota fuera el elegido por la audiencia, ya que existían motivos más que suficientes para querer verle fuera del concurso. Pero también, es de ley mencionar que dio paso a una sincera entrevista donde las haya, reconociendo haber robado y estar arrepentido por sus faltas de respeto y salidas de tono. Hecho que le honra, porque lo realmente importante es saber rectificar y pedir perdón.

Y de cara a las expulsiones del próximo jueves, he de reconocer que no se encuentran en la palestra ninguno de los concursantes a los que me gustaría ver desfilando para plató, como son Dámaso, Lydia o Cathaysa.

Concursantes que están haciendo de esta duodécima, “la edición de las setas”, y que aunque con sus silencios y poca sangre van sumando semanas dentro del concurso, sólo nos demuestran la facilidad con la que florecen los champiñones en las tierras de Guadalix.

Pero teniendo el cuenta que la lista de nominados está compuesta por Laura, Marcelo, Patricia, Marta y Terry; elijo como mi expulsada del próximo jueves a esta última.

Porque la misma Terry ha asegurado no poder vivir sin su Jhota, y ya me resultan demasiado repetitivas sus continuas “trabadas” y comeduras de cabeza por detalles tan insignificantes como que una chica a la que conoces desde hace 3 meses, y que seguramente no volverá a formar parte de tu vida, te llame “fea” durante una pelea.

Y aunque entiendo que cada uno tiene sus puntos débiles, no es muy inteligente por su parte ponerlos encima de la mesa, durante lo que no deja de ser una lucha por un maletín de 300.000 euros, y encima, que consigan hundirte por darte ahí donde tú has indicado claramente a tus rivales que te duele.

Por lo que no le vendría mal a esta canaria un poquito más de autoestima, aprender a valorarse de verdad y demostrarnos que es capaz de dejar por unos días sus “trabadas” y “niñerías” de lado, que ya aburren hasta la saciedad. Y más aún, después de haber pasado en su vida por momentos realmente duros como son superar una obesidad casi mórbida, numerosas intervenciones por una lesión de cadera, y largas estancias en hospitales por una enfermedad.

Y respecto a los no repescados, aprovechando que Chari está definitivamente fuera de Guadalix, realmente me gustaría sentarme y tomarme un café con la que tanto revuelo ha formado en esta edición.

Ya que tengo muchas ganas de preguntarle por qué se está dejando humillar de esta forma tanto por la madre de Rubén como por el público, y por qué sigue insistiendo en volver con Rubén después de haberle pedido cien mil perdones.

Porque, personalmente le recomendaría, pasar de sobremanera del ridículo de su ex, que le pide bajo manta, y sin que se entere su mami, que le espere fuera,; y que le demostrara lo que son unos cuernos en condiciones, ya que Rubén no ha sabido valorar su arrepentimiento desde ese pedestal que le han puesto los que le denominan “el novio de España”, que sin duda alguna ha decidido actuar de la forma más egoísta posible, dejándose manejar por lo que quiere su madre y el público, luchando como soltero por el premio para vendernos la moto, mientras le pide a Chari que le guarde el luto fuera de la casa, porque seguramente quedaba demasiado en evidencia volver a ser la sombra de Chari de cara a la audiencia.

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