La segunda gala en directo de 'La Voz' fue realmente sorprendente en muchos aspectos.

Cuatro de los doce artistas que faltaban por pasar por el escenario fueron elegidos por descartes, tanto por el público votante como por sus coaches, como los concursantes que desgraciadamente se quedaron con el sabor amargo de quedarse a las puertas de la semifinal del programa.

O así debería haber sido, tal y como marca la lógica y las normas del concurso…

El equipo de Melendi fue el primero en subir al escenario para enfrentarse con el temido directo, y el espectáculo -en el más amplio sentido de la palabra- no tardó en hacer acto de presencia.

Ruiman se atrevía con “Remolino” con una interpretación personal y musical impecable. Pero lo que nadie se imaginaba es que mientras seguía sonando la música, el canario empezara a despedirse con un “me retiro del programa por un desacuerdo con el programa y con mi coach” ante el total asombro de todos los allí presentes.

Melendi, que no daba crédito ante tales acusaciones, intentaba en vano buscar una explicación lógica a lo que estaba sucediendo mientras que Malú no dudaba ni un segundo en sacar las uñas por su compañero, por el que aseguraba poner la mano en el fuego y no quemarse.

Un apoyo incondicional y más que merecido para el coach, al que rápidamente se unieron las redes sociales mientras la indignación de la gente crecía en aumento.

A consecuencia de la repentina decisión del canario, la tensión y la incertidumbre de Susana y Neus fueron prolongadas hasta el final de la noche, sin conocer cuál sería su destino en el concurso tras el inesperado suceso.

Aunque su espera mereció la pena, ya que tras analizar la normativa del programa y realizar el recuento de votos, las dos féminas pasaron a la semifinal del concurso a pesar de haber sido Ruiman el elegido por el 41,6% del público votante para pasar a la siguiente fase, ya que el canario decidió seguir en su empeño de abandonar “La Voz” por mucho que la audiencia eligiera su actuación como la mejor de las tres interpretadas por el equipo de Melendi.

Me pareció tremendamente fea la decisión que tomó Ruiman, dejando tirado a un programa en directo y quitando el protagonismo a sus compañeras. Y más cuando todo apunta a que dicha decisión no salió de la nada, sino que fue elaborada con premeditación y alevosía, ya que el canario, horas antes de que la gala diera comienzo, empezó a retwittear desde su cuenta oficial comentarios como estos:

“No entiendo porque no aparece Ruiman en el impacto social. Lo podéis arreglar? Qué injusto!! A ver qué dicen en los medios cuando se sepa. Lo único que no manipuláis y ahora hacéis esto!!! Indignante y vergonzoso que le hagan esto a una persona tan buena, amable y maravillosa como lo es Ruiman!!!”

Es decir, que horas antes de que el espectáculo comenzara, Ruiman ya empezaba a tachar a la organización del programa de “indignante, injusta y vergonzosa”, exactamente los mismos adjetivos que yo utilizaría para calificar el comportamiento que ha tenido este concursante, tanto para el programa que le ha dado una oportunidad de oro eligiéndole entre más de 13.500 personas, como para la audiencia votante que, en los tiempos que corren, vieron cómo el dinero que habían utilizado para apoyar y salvar a este concursante para darle un pase directo a la semifinal del concurso, caía en saco roto…

No era el momento ni el lugar adecuado para sacar a relucir su berrinche absurdo que todavía no acierto a entender, por lo que no me extrañó en absoluto que las redes sociales empezaran a rebosar de comentarios negativos y críticas hacia este chico, que hasta el momento se había ganado el cariño y admiración del público.

Mientras, Ruiman se dedicaba a lanzar desde su cuenta los siguientes comentarios:

“Perdonen a todos mis seguidores nada es porque sí. Disfruten de mis compañeros que tienen un talento increíble. Ya daré la explicación oportuna, puse mucho empeño ilusión en este programa. Gracias pero lo siento ustedes harían lo mismo”

¿Buscaba una carrera musical o sentarse en un Sálvame Deluxe?

Por lo pronto, esta misma mañana ha entrado en directo en el programa de AR para añadir más leña al fuego alegando que se ha atentado a su dignidad, y pidiendo a cada dos segundos ser invitado a plató para por fin acceder a dar una explicación de lo sucedido.

Aunque habrá que sentarse a escuchar lo que Ruiman estará organizando minuciosamente en su cabeza para justificar su boicot al programa, ¡las ansias de protagonismo y noveleo se huelen a distancia!

Para mí lo que este muchacho hizo anoche se asemeja mucho con abandonar un reality durante una gala mientras te encuentras nominado y sin esperar a conocer la decisión del público.

Y al igual que sucede en Gran Hermano, los concursantes que decidan pasarse las normas del programa por el forro, a pesar de haberlas aceptado y firmado, deberían ser obligados a pagar una sanción, o por lo menos, en el caso de Ruiman, como mínimo debería hacerse cargo del total económico que supuso que el 41,6% de la audiencia votante perdiera su tiempo y su dinero en apoyarle en su sueño.

Un sueño que ahora mismo dudo mucho que tenga tanto anhelo en cumplir, ya que no creo que exista nadie en su sano juicio que se arriesgara a contratar a una persona que ha dejado en evidencia delante de toda España que su profesionalidad y su compromiso con una productora brillan por su ausencia por nimiedades tales como un problema en un perfil social.

Así pues, al concursante que se batió en duelo con Ruiman, gracias a este, le fue arrebatado de las manos una oportunidad de lujo que seguro que habría aprovechado mucho mejor, por lo menos de manera más digna…

Por suerte para todos, y para desgracia de Ruiman, el cariño y cercanía que Melendi se ha ganado de todo el público, semana tras semana, no se verá ennegrecido por una pataleta sin precedentes del integrante de su equipo, que sin duda alguna, después de su comportamiento de anoche, nunca se mereció gozar de ese privilegio.

Tras este desagradable episodio, el equipo de Malú tomaba el escenario mediante Efren, Iolanda y Rebeca.

Iolanda, la benjamina del programa, se proclama la favorita del público tras interpretar “On my own” pasando la prueba con nota.

Posteriormente, Malú anunciaba a Rebeca como su elección de la noche tras su actuación con “Adagio”. Decisión que no comparto en absoluto y que fue duramente criticada en Twitter.

Los gallos y gritos con los que esta fémina decoró su interpretación me hicieron imposible poder disfrutar un solo segundo de esta actuación.

Por lo que Efren se despidió definitivamente de “La Voz” tras atreverse con “Aquello que me diste” de Alejandro Sanz.

Cierto es que este chico no posee un torrente de voz que nos haga levantarnos de la silla, pero el buen rollo que transmite con sus actuaciones me hace preferirle cien mil veces antes que a los tonos altos y descoordinados de la elegida por la coach.

El equipo de Bisbal en esta ocasión estaba representado por Brequette, Nieves y Rafa, indudablemente tres piezas fuertes de este puzzle.

Como era de esperar, Rafa se proclamó como favorito del público tras su particular homenaje a Europe con “Final Coundown”.

Aunque el heavy de 'La Voz' siempre consigue dejarnos con la boca abierta, en esta ocasión me parece a mí que de tanto crecerse en el escenario, se perdió por el camino -al igual que sus notas-, se entrecortaba, se ahogó en más de una ocasión… no siendo la mejor de sus noches, tal y como reflejaban las caras de Bisbal durante su actuación, por mucho que luego únicamente se limitara a alabar al integrante de su equipo. Quizás todo fue fruto de su comentadísimo jet lag…

La elegida por el coach fue Brequette, tras interpretar “Love on top” de Beyonce, plantándose con pie en la semifinal una de mis grandes favoritas del concurso.

Y es que el arte y seguridad que muestra Brequette en el escenario hacen que deslumbre a cualquiera que se encuentre a su alrededor.

Sin embargo Nieves se marchó a casa con una despedida de bandera con “Tanto” de Pablo Alborán. La voz de esta mujer es puro sentimiento transmitiendo emoción con cada una de sus notas y movimientos, y reconozco que me fue inevitable sentir escalofríos en varios momentos de su actuación.

El equipo de Rosario fue el encargado de cerrar la noche con Emmanuel, Angelica y Anael.

Tras interpretar “Ne me quette pas” decir que me sorprendió que el público eligiera como favorito a Emmanuel, es quedarme corto… Pero el amigo de la coach, una noche más consiguió pasar a la siguiente fase mientras muchos consideramos que cualquiera de los ya eliminados tienen muchísimas más cualidades.

La elegida de Rosario fue Angélica tras su actuación con “Piensa en mí” con una voz rasgada a la que ya nos tiene acostumbrados y que me recuerda cada día más a Buika.

Así pues, la última eliminada de la noche fue Anael a pesar de su “What a feeling”, con el que personalmente no me transmitió el ritmo que lleva consigo semejante tema.

Por lo que, tras dos intensas galas en directo, ya tenemos el nombre de los cuatro componentes de cada equipo que la semana que viene se enfrentarán a la semifinal de este programa que está batiendo todos los records habidos y por haber.

Por último, quiero daros las gracias a todos aquellos que me acompañáis desde las redes sociales, entre las que ya sumamos un grupo de más de 500.000 seguidores.

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