La maldición de Suso
Si hay algo que anoche le quedó claro a Suso es que todo aquel que se acerca a él sale expulsado, viendo cómo su grupito de amigos mengua semana tras semana.
Muti fue el elegido por la audiencia la semana pasada, Raquel esta, y sabe que el próximo en hacer el paseíllo rumbo a los estudios de Fuencarral será él. Pero no nos engañemos, por mucho que Suso haya perjudicado a varios concursantes, todos aquellos que ya se encuentran fuera de la casa dieron motivos de sobra para ganarse su expulsión, por lo que la simpleza de “la audiencia los ha votado para castigar a Suso” no se trata más que de una verdad a medias.
El enfrentamiento de Sofia VS Raquel se prolongó hasta la sala de expulsiones, donde ambas pidieron ver varios videos de lo sucedido durante las últimas semanas. Si nos hubieramos guiado solamente por estas imágenes y por el falso discurso de la de Cáceres, Sofía en estos momentos estaría junto a su madre. Pero la audiencia no es tonta y si hay algo que no perdona es que los concursantes intenten tomar el pelo al espectador.
Y eso fue justo lo que hizo Raquel hasta el último momento. Primero, vendiéndose como una víctima de las circunstancias. Segundo, pretendiendo enganchar a la audiencia con una repentina historia de amor que no se sostenía por ningún lado. Y, por último, tratando de crearse una imagen de santurrona que supuestamente la diferenciaba de Sofía.
La hija de Maite es una niña caprichosa que no admite ser rechazada. No atiende a razones y posee una lengua viperina con la que acostumbra a tachar a las mujeres con calificativos de lo más machistas. Pero siempre podrá poner como excusa que cuenta con sólo 19 años. Lo malo es que Raquel a sus 28 ha tenido un comportamiento al mismo nivel de su contrincante mientras dejaba patente que es totalmente incapaz de aceptar la realidad ni admitir sus errores.
Tras ver cómo Sofía le dedicaba palabras como 'guarra' y 'puta' en varias ocasiones, Raquel intentaba quedar por encima de Sofía, asegurando que a pesar de haber tenido que aguantar las rabietas e insultos de esta niña, ella nunca ha faltado el respeto a Sofía. ¡Error! Si Raquel hubiera estado enganchada a los cables de Conchita habría quemado por completo el PoliDeluxe… Llamar fácil a Sofía fue lo más suave que salió por su boca, por mucho que ahora intente adentrarnos en una realidad paralela que sólo existe en su cabeza.
Ambas féminas se han puesto a caer de un burro cayendo realmente bajo al pelearse como gatas por Suso. Pero, a diferencia de Raquel, Sofía admitía que su comportamiento no había sido el adecuado y entonaba un mea culpa con disculpas incluidas, aunque sus palabras no fueran sentidas. En cambio, Raquel, desaprovechaba la ocasión de lavar su imagen. Con lo fácil que hubiera sido reconocer que las dos habían jugado al mismo juego… Pero la cacereña tiene montada en su mente la idea de cómo han sucedido las cosas y, por mucho que no se ajusten a la verdad, no hay nadie que consiga que esta chica vea más allá de sus narices.
Ni siquiera las palabras de Mercedes Milá calaron hondo en esta concursante. No creyó que Suso se hubiera inventado palabras que nunca salieron de la boca de Kike y no aceptó que su salida del concurso fuera por algo más que por haberse acercado a Suso.
Mientras, Suso se derrumbaba en la casa al comprobar que Sofía había sido salvada. Pero, más que por la pérdida de Raquel, creo que su angustia se basaba en su derrota en el concurso al darse cuenta que se encuentra con un pie fuera de la casa.
Está claro que el próximo jueves será él el expulsado por la audiencia. Lo entiendo y apoyo las razones que han hecho que gran parte de los seguidores de Gran Hermano tengan la satisfacción de poder sacar a este chico del concurso, pero lamentaré su salida del reality.
No porque Suso goce de mi simpatía sino porque sacando a este concursante de la ecuación estaremos terminando con la tarea de sacar de Guadalix a los únicos concursantes que estaban creando movimiento en esta edición. Primero eliminamos a Maite, a quien sigo echando realmente en falta cada vez que conecto el 24 horas.
Hemos echado a Raquel, que aun cayendo mejor o peor, ha sido protagonista de las últimas broncas que se han vivido en la casa. Y la próxima semana dejaremos de contar con Suso, uno de los concursantes más polémicos de esta edición que no ha dejado de dar de qué hablar desde su entrada en Gh16, primero con Maite, después con Sofía, y más tarde con Raquel.
Por lo que, por muy justificadas que sean sus expulsiones, como consumidor de este formato me produce una tremenda pereza contribuir a dejar una edición de concurso con personajes como Ivy, Carlos, Vera, Niedziela, Carolina o Marina.
La única esperanza que nos queda es Kike, quien anoche supo jugar muy bien sus cartas manteniéndose en la lista de nominados para enfrentarse a Suso y decidiendo salvar a Han. Mantuvo su palabra y demostró tenerlos cuadrados.
Anoche, tras desvelarse la mayoría de los secretos, los concursantes conocieron que Kike es `el experto en Gran Hermano´. No sé si la palabra experto hará justicia, pero lo que quedó claro es que este chico, a pesar de su profesión, ha seguido cada una de las ediciones de este reality y, aunque sea desde las sombras, Kike no ha parado de mover sus hilos hasta convertirse en la cabeza pensante del grupo mayoritario de la casa. Por lo menos, por ahora, porque presiento que esa situación no tardará mucho en cambiar hasta ponerse en contra a gran parte de sus compañeros, y que será ese momento cuando Kike se meta de lleno en barro y comience realmente su juego.
Para cualquier información de interés sobre los temas que tratamos, podéis dirigiros al siguiente correo o visitar mi página web