Ari Gh12+1 encuentra el amor en su tinta

Como era de prever, la relación que se formó entre Ariadna – hija de Fortu- y Michael Gh12+1, tras varias idas y venidas y anuncio de boda incluido, terminó con un punto y final bastante amargo para la madrileña.

Las últimas fotos de sus encuentros se remontan en Junio del año pasado pero, poco después, Ariadna anunciaba públicamente que ya no tenía ningún tipo de contacto con esa persona.

Pero, a pesar de su ruptura sentimental, Ari consiguió terminar el año de nuevo ilusionada y enamorada hasta la médula. El motivo de su alegría tiene por nombre Antonio y, como hacen evidentes sus fotografías, es tatuador profesional.

Desde hace varios meses están viviendo juntos, Antonio ya conoce a toda la familia de Ariadna y parece estar totalmente integrado en el entorno y en la vida de esta concursante de Gran Hermano 12+1.

Tanto es así, que desde hace unos días Ariadna luce en su mano un bonito y sencillo anillo en el dedo anular de la mano izquierda que, dado el mensaje que acompañaba a la muestra de su nueva joya, todo apunta a que se trataría de un anillo de pedida “Lo tengo todo, familia y a ti. Gracias vida por traerme lo mejor. Hoy ha sido un día especial. No puedo imaginar que tú no estés. Eres lo mejor y último que veo cada noche al dormir y lo más bello que veo al despertar! Gracias, gracias y gracias por ser la perfección que siempre he buscado. Mi mayor tesoro, lo que más quiero y me hace feliz y afortunada cada día. No hay cosa más bonita... Te amo en exceso”

Sin duda alguna, su imagen llama la atención de cualquiera, resaltando en su rostro varios tatuajes de los muchos que posee por todo su cuerpo. Uno de ellos que reza en su frente “Yo sé que mientes” y encima de su ceja el nombre de una mujer.

A pesar de contar con la simpatía y aprobación de su padre Fortu, que no ha dudado en ponerse en manos de su yerno para adornar su abdomen con un nuevo tatuaje, dada su estética de su novio, Ari ha tenido que hacer frente durante muchas semanas a multitud de críticas, por lo que, a modo de spot publicitario reivindicando la opción de cada uno a hacer con su cuerpo lo que le venga en gana, la hija de Fortu pide respeto y tolerancia de la siguiente manera… Eso sí, siendo parodiada pocos minutos después por su propio novio, a quien parece importarle poco y menos lo que la gente pueda opinar sobre él.

Pero Fortu no ha sido el único, ya que desde que Ari comenzara con este chico, el número de sus tatuajes ha ido en aumento de forma vertiginosa: letras y flores en sus manos, un búho en su pierna, una llave en su mano que se complementa con la cerradura que su novio tiene tatuada en la suya…

Como he declarado en más de una ocasión, no soy ningún fan de los tatuajes, y menos aun cuando estos son de gran tamaño y se encuentran en zonas a la vista de cualquiera aunque esté vestido con sus mejores galas. Pero lo que está claro es que si Ari ha encontrado la plena felicidad junto a este chico, lo único que puedo hacer es enviarle mi más sincera enhorabuena y mis mejores deseos.

Y es que la facha marca la percepción que los demás tienen de ti pero, ni por asomo, hace o dictamina el interior de la persona. A pesar del cruce de críticas que Ari y yo nos hemos dedicado desde su entrada en Gran Hermano, con el tiempo hemos llegado a dejar esos temas en el pasado, y con la piel impoluta o con tatuajes hasta las cejas, es una chica que actualmente se merece todos mis respetos.

Algo parecido me pasó con su padre Fortu, ¡incluso un día vino a Telecinco con la intención de darme para el pelo! Pero tras sentarnos a hablar durante una entrevista que le realicé para la revista Qué me Dices! para la que él accedió con gusto a pesar de nuestros cruces de palabras del pasado, conocí no sólo a un artista mítico en la historia de la música en nuestros país, sino que también a un hombre generoso y majo hasta decir basta.

Así pues, que el novio y posible futuro marido de Ari al que ya llama públicamente “esposo” esté tatuado hasta la coronilla yo creo que es lo de menos mientras que sepa cuidar, querer y respetar a la mujer que tiene a su lado.

Hay otros con profesiones mucho mejor vistas, que portan una imagen más cuidada y que luego son capaces de llegar a decirme que su chica, aquella a la que luego declaraba amor eterno cuando estaban presentes las cámaras de televisión, llegó a tocarle el culo mientras él se encontraba bajo el efecto de medicamentos y que si hubiera sido al contrario, él ya estaría en la cárcel… Y como no podía ser de otra manera, luego cargó contra el mensajero y, de forma patética y cobarde, negó rotundamente haber pronunciado esas palabras aun estando grabadas.

Entonces, ¿con qué nos quedamos? ¿con la falsa fachada carente de respeto? ¿o con el respeto carente de buena fachada?

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