Es un tema complejo y delicado. Lo sencillo es posicionarse únicamente del lado de Sofía y demonizar a Alejandro. Pero ni los buenos son tan buenos ni los malos son tan malos. Y, en esta trama, parecen estar empeñados en ir cambiándose los papeles cada 10 minutos.
Suescun lo tuvo al alcance de la mano. La penosa actuación de Alejandro que pudimos ver en los vídeos del martes posicionaba a Sofía como una víctima de las circunstancias. Albalá había metido la pata y hasta el fondo. El chico tierno y cariñoso había dejado de serlo para la opinión pública y, por ende, Sofía contaba con el apoyo del público tras haber tenido que aguantar el comportamiento machista de su ex.
Pero Sofía no se conformó con eso. No le bastó con la bronca que Jorge le echó a Albalá. No le pareció suficiente que Alejandro se disculpara con ella, con el presentador, con el programa y con el público varias veces. No le pareció suficiente con que su ex decidiera separarse y hacer su concurso sin volver a interferir en su camino. Que le afectara realmente lo sucedido y que no levantara cabeza. Para Sofía nada es bastante.
Si se hubiera mostrado justa pero tajante quizá habría ganado en un día todo lo que ha perdido durante GH Dúo. Pero se dejó llevar por el gustirrinín que le provocaba escuchar cómo el público abucheaba a Alejandro. Le gustó y quiso más. Sobre todo, más aplausos hacia ella mientras el público preparaba la hoguera para Alejandro.
Y si para ello había que estirar el cuento e ir inventándose cosas por el camino, ¿por qué no? En la guerra cualquier agujero es trinchera.
Porque, dejando de lado que el comportamiento de Alejandro fue intolerable, que el martes todo se pusiera en contra de Alejandro fue motivo de alegría para Sofía. Ya fuera por ese tema o por otro, Suescun buscaba hacer las paces con el público que tan poco apoyo le ha brindado en GH Dúo.
Ella que antes era conocida como la reina de los realities ha sido abucheada un día sí y el otro también, saliendo expulsada a la primera ocasión. Esto hace pupa, y más aún cuando eres testigo de que te cuestionan con la misma intensidad que aplauden a tu ex.
Eso lleva a Sofia por el camino de la amargura y no ha tenido ningún problema en expresar su malestar al respecto. Ese es el sentimiento que ha cegado a Sofía.
El martes se quedó pasmada con los vídeos que visionaron y no era para menos. Censuró la actitud de Alejandro pero no quiso hacer leña del árbol caído. Ganó muchos puntos con un comportamiento tan elegante y maduro. Pero los minutos de cordura le duraron realmente poco.
Es muy sucio jugar con temas tan delicados. Fue asqueroso que Mª Jesús Ruiz lo hiciera con Tejado y es igual de repugnante que Sofía lo intente con Albalá. Y eso es lo que hizo anoche.
Intentó jugar el papel de víctima y, para su sorpresa, el público no compró su actuación magistral obteniendo abucheos como moneda de cambio. Eso fue lo único que generó sus lágrimas. Eso y que aplaudieran a Alejandro de nuevo.
En un reality no hay cosa peor que los concursantes que, pasándose de listos, intentan tomarnos por imbéciles. Y Sofía se cree realmente inteligente cuando, en realidad, es incluso más torpe que Alejandro. Y ya es decir mucho.
Durante la fiesta del miércoles por la noche Sofía enseñó la patita. Pasó de víctima a verdugo en sólo un instante. Por más que Alejandro intentaba quitársela de encima, ella volvía y volvía.
Besos en el cuello en contra de la voluntad de Alejandro, roces, agarrarle el brazo y la cara cada dos por tres, seguirle allá a donde iba, atosigarle con preguntas absurdas… ¿Y si la historia hubiese sido al contrario?
Desconozco cómo funciona la mente de Sofía. No sé si intentaba que Alejandro cayera rendido ante sus encantos y rogara por ella para así poder volver a rechazarle y sentirse de nuevo poderosa. O si, en cambio buscaba desquiciarle y hacerle perder los estribos para terminar de cavarse su propia tumba.
Intuyo que la respuesta correcta está en que intentó ambas cosas de manera intercalada a ver cuál de las dos funcionaba mejor para logar su objetivo. Hundirle.
El mejor ejemplo de cómo hacer un reality de mierda después de haber conseguido ganar dos anteriormente.
Pero no pasa nada, Sofía se ve guapísima con el pelo ondulado. Curioso comentario que hacía esta mañana sobre las imágenes que ayer pudo ver de lo sucedido el martes. Momentos en los que lo pasó tan mal y que se encontraba tan afectada. Pero todo es cuestión de prioridades y siempre hay espacio para el postureo y cerciorarte de que estás saliendo favorecida en plano cuando estás justo en el centro de la polémica…
¿Tienes información sobre algún famoso? Ahora puedes ponerte en contacto conmigo en Whatsapp mediante mi número de teléfono 644 33 02 33 (Solo mensajes de texto). Si lo prefieres también puedes utilizar mi correo electrónico: info@kikohdez.com o visitar mi página web.