Siempre habrá pretendientes resentidos...
Me he quedado perpleja al ver el Blog del Malaguita, no quiero frentes abiertos ni nada, pero este tema me toca muy de cerca y no lo puedo dejar pasar. Al parecer el hermano se ha presentado como pretendiente de Sonia y ella lo ha rechazado tras la primera cita, así que ahora el Malaguita se dedica a arremeter contra ella.
Criticar a una tronista es muy fácil, nos exponemos a la opinión pública y es el tributo que hay que pagar por buscar el amor en un programa de televisión; de ahí a que Marcelo diga que Sonia "no vale un euro" porque ha rechazado a su hermano como pretendiente es no saber perder y dice mucho de un hombre hablar así de una mujer.
He visto la cita, ella ha mostrado interés y conversado con él. Marcelo, a Sonia no le ha gustado tu hermano y punto, eso no significa que esté enamorada de Fabián, ni que le guste más el trono ni que no valga un euro como tú dices.
Analizo concretamente una frase que me ha hecho mucha gracia: "Mi hermano Luis entraba con un hándicap bastante importante. Ser hermano de una persona popular es complicado" , pero bueno ni que la novia del hermano del malaguita vaya a convertirse en reina de Arabia! jajajaja! me gustaría saber qué diferencia hay entre ser hermano de Marcelo o de Pepito el de los palotes, porque aquí parece que algunos salen de Gran Hermano y ya adquieren algún título nobiliario.
Aquí va otra cita de nuestro Sócrates: "Pobre Sonia la oportunidad de oro que has perdido. Te aseguro que no encuentras a una persona de las cualidades de mi hermano en tu vida". ¡Ay Dios mío que me va a dar algo! Y qué sabrás tú el chico que puede encontrar...
Desde luego que chapó por Sonia por haberse dado cuenta de la sed de fama que tenéis -que probablemente sea el motivo por el que lo ha echado- porque tanta indignación por una chica que conoce de una cita y que ha sido amable no puede tener otra explicación.
En una cosa coincido con Marcelo, en que "no pegáis ni con cola", así que sigue conociendo chicos hasta que encuentres al tuyo y siempre habrá resentidos que vayas dejando por el camino.
Besos!