El 14 de julio
leí en el blog de Mercedes Milá este artículo titulado “El horror”.
Sakineh Mohammadi Ashtiani es una mujer iraní acusada de adulterio, pretenden condenarla a muerte mediante lapidación y aunque se ha suspendido temporalmente, el riesgo de ser ejecutada sigue ahí.
Carla Bruni ha mostrado su repulsa siendo calificada de “puta” que merece este mismo castigo, según un periódico iraní.
Desde este blog también os animo a que firméis en la página de Amnistía Internacional
Aunque nos llamen “putas”, podemos ejercer nuestra libertad de expresión, DEBEMOS mostrar nuestra repulsa como seres humanos que somos.
Nadie tiene derecho a dictar la muerte de otra persona. Es necesario que nos pongamos en la piel de esta mujer y aportemos un grano de arena a la causa. Vivimos en un país en el que las mujeres podemos expresarnos, pero por un segundo pensad en la angustia de una mujer repudiada por su propio entorno, que ya ha sido torturada a latigazos y no merece sufrir más.