'El Reencuentro' ha roto la barrera de los sentimientos de una manera tan brutal que hemos ido explotando uno a uno
En la última gala destacábamos la importancia que se da en la Casa a la comida, la repartición de cada trozo de pan supone algo esencial para el bienestar general, allí aprendemos a valorar cosas básicas a las que no damos importancia.
En nuestra vida cotidiana cualquier persona puede comprar pan, leche o cualquier producto básico algo que no está al alcance de personas de otros países.
En nuestro mundo occidental tenemos acceso a la educación, alimentación y sanidad, algo esencial para nosotros, pero que es un verdadero lujo en otros lugares.
Yo misma soy de madre andaluza y padre hindú, he tenido la suerte de nacer en España. Si hubiese sido al contrario mi realidad sería muy distinta. Allí el 80,4% de la población vive con menos de 2 dólares al día y el 47% de los niños menores de 5 años tienen un peso inferior al normal (según datos de Global humanitaria), muchos trabajan desde pequeños y no tienen la posibilidad de instruirse.
Y, como muchos ya sabéis, me ha llegado la oportunidad de poder mostraros cómo viven en la India y colaborar en lo que esté en mi mano.
Ya puedo confirmaros que justo la semana que acabe el programa parto para Calcuta y Nueva Delhi, que son los destinos asegurados hasta ahora. Prometo fotografiarlo todo para que podáis vivir la experiencia conmigo.
En lo que se refiere a Gran Hermano, si el formato normal ya tenía fama de magnificar las emociones, El Reencuentro ha roto la barrera de los sentimientos de una manera tan brutal que hemos ido explotando uno a uno. Si el juego individual es duro, esto de hermanarte con otra persona que puede ser más o menos afín a ti y con la que ya tienes unas vivencias y sentimientos (ya sea amor, rencor, odio, amistad…) de por medio, supone un vuelco constante en el corazón. Y más tratándose de personas viscerales en una gran mayoría.
Me ha dolido un montón lo que ha pasado con Bea la Legionaria, tiene buenos sentimientos, y ha explotado ante su punto débil sabido por todos, su hijo . Es cierto lo desmesurado de su actitud. Siempre que se produce una expulsión es por una causa justificada, ahí me incluyo en lo que me sucedió en GH11Melania, por su parte, podría haber hablado con ella para intentar calmar la situación, sin embargo rechazó el sentarse a dialogar.
Mil gracias como siempre por vuestro apoyo, ¡mañana veré a algunos de vosotros, que tenemos una comida pendiente! y lo de la quedada, para cuando queráis, que me hace mucha ilusión. ¡Muchos besos!