¡Ay, esas huellas que se clavan en el alma cuando desaparece una persona…! Me ha entristecido profundamente toda esta historia… Son tantas las veces que la ambición puede destruir algo tan valioso como es el amor… Si sabemos que entre miembros de la misma sangre ocurren cosas tremendas, especialmente en herencias, qué no podrá suceder cuando es alguien ajeno a nosotros, pero alguien a quien le hemos dado todo el amor y confianza…
Belén era casi adolescente cuando la conocí. Han pasado años, la he visto triunfar, salir de situaciones complicadas, buscando quizá un hombro en quien apoyarse para que la fama y el dinero no la tambaleasen demasiado.
Belén ha nacido bajo el signo de Escorpio y Toño es Tauro. Por cierto, quiero darle las gracias a mi querido Kiko Hernández, quien me ha facilitado su fecha de nacimiento (1 de mayo).
Escorpio y Tauro se encuentran situados frente a frente en la rueda zodiacal… y ahora también están frente a frente en la vida. Tauro tiene todo aquello que le falta a Escorpio: tranquilidad, perseverancia, serenidad… Y Escorpio tiene fuerza, arrojo, intuición… El tándem, pues, es perfecto para unirse y conseguir objetivos importantes.
Toño quizá inició una relación laboral clara y transparente. Belén subía y subía, como la espuma, ganando considerables sumas de dinero… Aparentemente todo era perfecto, pero parece que existe algo que no está claro después de ocho años. Y yo me pregunto, ¿no será que, de pronto, un día Toño se siente Pigmalión y cree que Belén es su obra? Y de esto, a desviarse de lo legalmente establecido, puede haber solo un paso… Vamos, que podría haber pensado que ella gana dinero gracias a su buena gestión, que bien pudiera ser, pero si hay un contrato por medio hay que cumplirlo. Y si no se está de acuerdo hablarlo con claridad para llegar a un acuerdo, que, por cierto, y dada la generosidad de Belén, no creo que Toño hubiera encontrado muchos problemas.
No entro a enjuiciar nada. Creo que en un principio la unión de ambos fue algo importante y provechoso. Se beneficiaron mutuamente, porque Belén no le hubiera abierto su corazón si hubiera intuido falsedad en él. Pero hubo un tiempo en el que ella entró en un túnel en el que la supervivencia era lo único importante… y muy agradecida, como son los Escorpio, es posible que Belén se quedara con las veces que él le ayudó y le tendió una mano, olvidando un poco las cuestiones materiales.
Si alguien le ha abierto los ojos a Belén, genial, pero el camino que ahora debe recorrer es duro, lento, costoso, y, sobre todo, doloroso porque todo el universo que se había formado con Toño y su familia se ha desmoronado, y ese vacío que queda es esa huella que sufrimos cuando alguien se va de nuestra vida…