Consejos para desintoxicarse esta Semana Santa

Con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, seguimos con la vista puesta en el sol, la playa y el buen tiempo que parece que ya ha decidido quedarse con nosotros. Sin embargo, hoy no solo quiero daros algunos consejos para adelgazar, sino hablaros también de la importancia de “desintoxicarnos”. Nuestro paladar se ha acostumbrado a sabores muy potentes, tanto por el excesivo uso de sal como de azúcar, saborizantes… Y muchísimos elementos que hacen que cuando comemos algo medianamente sano enseguida nos aburramos. Pero esto acaba pasándonos factura, así que creo que es importante que de vez en cuando nos reseteemos, volvamos a educar el paladar y desintoxiquemos nuestro organismo porque, desde luego, todo lo que funciona mal por dentro se refleja por fuera.

Por todo esto, he hablado con Juan Ramón Álvarez, responsable de eventos de Las Caldas Villatermal, un maravilloso centro Wellness ubicado en Asturias, muy cerquita de Oviedo, y que es el lugar perfecto para reconectar con uno mismo y reeducarnos en lo que al bienestar se refiere. En Las Caldas ofrecen una serie de tratamientos entre los que se incluye uno de pérdida de peso, con una dieta detox asombrosamente original. “Lo que intentamos hacer es crear una cocina saludable con productos de temporada, añadiendo el concepto detox a través de la sustitución de la sal por especias y el azúcar por endulzantes naturales, como el sirope de agave, así como eliminando las grasas casi por completo y buscando el punto de elaboración perfecto del producto, de tal manera que mantenga todas sus propiedades nutricionales”. Una dieta así no suele superar las 600 calorías, lo cual es muy correcto a la hora de estar en el centro, pero tal vez no tanto para alguien que tiene una rutina de trabajo. Sin embargo, Juan nos da un ejemplo de cómo sería una dieta detox y unos cuantos consejos para que podamos aplicarlos a nuestra propia rutina.

La dieta de un día completo estaría compuesta por cinco comidas, que serían las siguientes:

Desayuno. Bajo en grasa y con componentes orgánicos. Puede consistir en una papilla de avena y vainilla o una tosta de pan con mermelada casera. En Las Caldas hacen ellos mismos el pan, con harinas muy poco refinadas y bajo contenido en gluten, así como las mermeladas, endulzadas, por ejemplo, con sirope de agave.

Media mañana. Propone un licuado, que ayuda a recuperar energía y mantener la concentración. Además, mantienen la fibra de los ingredientes. Propone dos licuados: uno de manzana, apio y albahaca y otro de fresa, cardamomo y menta.

Almuerzo. Suelen empezar las comidas principales con un pequeño entrante, pero prescinden del postre ya que la ración adecuada de frutas y verduras queda cubierta. De entrante propone fruta aromatizada, de primero ensalada de rúcula con piñones y tomates semisecos, y de segundo plato un falso cous cous de mijo.

Merienda. En este momento del día lo ideal es una pieza de fruta o una tosta de pan bajo en gluten.

Cena. De entrante una gelatina de frutos rojos, de primero una crema de calabaza con aroma de canela y de segundo unos puerros glaseados en su propio jugo con picada de verduras de temporada.

Como veis, son platos saciantes, variados y cuyos efectos no solo se traducen en una pérdida de peso sino en una preservación de nuestra salud. Por otro lado, Juan indica que productos como la berza, las espinacas, las alcachofas, la col roja, los ajetes, el cilantro… tienen grandes propiedades detox. Pero, sobre todo, explica que lo más importante es saber que no tenemos que comer de manera aburrida si lo que queremos es comer bien. “Aquí hacemos una fabada detox, ya que las legumbres son un elemento muy importante en la dieta y acompañadas por los ingredientes correctos son un plato estupendo. En el caso de la fabada, le ponemos un chorizo de calabaza, que le da el toque del ahumado y del pimentón pero sin las grasas del chorizo”.