Ya está aquí el otoño y ha llegado con fuerza y con lluvias torrenciales. Frío y humedad, son dos de los factores que más afectan a nuestro cabello porque ya sabemos que esta estación es conocida como una de las peores épocas para el pelo ya que sufre una caída mayor de lo normal.
Esta caída se puede deber a muchos factores como cambios hormonales, el estrés de la vuelta al trabajo y a la actividad laboral, que tenemos menos horas de luz y comenzamos a comer peor a nivel nutricional. Además, después del verano el pelo viene dañado por la excesiva exposición solar, la sal marina, el cloro de las piscinas. Así que seguramente ya estemos notando una deshidratación del cabello, más fragilidad y menos elasticidad. Yo me lo noto como más fosco y enredado. Como más rebelde.
En realidad no es algo preocupante ya que es un proceso de renovación capilar natural que se repite todos los otoños en hombres y mujeres.
Pero hoy no quiero hablar de la caída del cabello, sino de su cuidado y protección gracias a los nuevos rituales que nos ofrecen firmas como Rene Furterer. En concreto quiero recomendaros 2 rituales maravillosos de la línea Karité, que nos van a ofrecer las dos cosas que más necesita nuestro cabello en esta época: Nutrición e hidratación. ¡Al menos mi pelo lo necesita!
Empecemos por la Nutrición, con este ritual para cabellos muy secos y estropeados, que tiene 3 etapas. Lo que vamos a conseguir es mucha cremosidad y suavidad para reparar en profundidad el pelo y nutrir intensamente el cuero cabelludo. Porque no debemos olvidarnos del cuero cabelludo, el verdadero artífice de que nuestro pelo pueda lucir bello y fuerte.
Se empieza por un Aceite nutritivo para antes del champú. Sí, sí, antes del champú, muy importante. Te lo puedes aplicar con pequeños toques o en un baño de aceite. El cabello se transforma y se vuelve más flexible y brillante y el cuero cabelludo va a recuperar su confort. Se llama Aceite de nutrición intensa KARITÉ NUTRI y tras su aplicación lo aclaramos. Lo ideal es dárselo 1 ó 2 veces por semana.
Después pasamos al Champú nutrición intensa que asocia la Manteca de Karité con un 12% de aceites nutritivos. Me encanta porque me deja el cabello súper suave y muy fácil de desenredar y peinar.
Y para terminar la Mascarilla Nutrición Intensa, concentrado en aceite y Manteca de Karité y enriquecido con agentes reparadores, que nos aporta un extra de nutrición. Con esto sí que ya me desenredo al instante y el cabello se vuelve súper sedoso. Yo me la dejo puesta unos 5 minutos.
Si seguís este ritual 1 ó 2 veces por semana ¡Adiós al pelo apelmazado!
Y para el cuidado diario utilizo la crema de día sin aclarado.
En mi apuesta por lo natural me gusta que los principios activos de esta Gama son 100% naturales: Extracto de Karité, Cimentrio (obtenido de la soja, rico en proteínas y lípidos) y Microproteínas de trigo (para reparar las aberturas del pelo frágil).
Y ahora vamos con la Hidratación, una de las necesidades más acuciantes del cabello en esta temporada. Con este ritual vamos a conseguir hidratar en profundidad reforzando el film hidrolipídico, evitar la deshidratación del pelo y protegerlo de las agresiones externas.
Los productos tienen un olor maravilloso que te envuelve a cítricos y flores blancas. Me relaja un montón.
Empezamos con el Champú hidratación y brillo Karité Hydra con aceite de Karité. Hace una espuma muy cremosa con una textura como nacarada súper agradable. Hidrata el cabello con total ligereza.
Hablando del Karité, ¿sabíais que es un árbol sagrado de África occidental y que es conocido desde la antigüedad por su incomparable riqueza en agentes nutritivos?
La manteca de Karité destaca por su gran capacidad de penetración y los Laboratorios René Furterer fueron pioneros durante más de 30 años en el uso de este activo. Además, en 2012, René Furterer creó una nueva industria de abastecimiento de manteca de Karité en Burkina Faso.
Volvemos al ritual y continuamos con la Mascarilla hidratación y brillo que nos ayuda a alisar la fibra capilar e hidratar de forma duradera nuestro cabello sin apelmazarlo.
Y es exprés, con 2 minutos es suficiente.
Este ritual también es recomendable realizarlo 1 ó 2 veces en semana.
Este es mi consejo para cuidar el cabello, pero mi recomendación es que no nos acordemos de cuidarlo solo cuando viene la caída o cuando lo notamos frágil, con las puntas abiertas y deshidratado, sino todo el año. ¡Tenemos que cuidarlo todo el año! Así evitaremos sustos con la llegada del otoño.