El chocolate no solo es un postre delicioso o el mejor aliado cuando nos sentimos tristes. Nos ofrece una gran cantidad de aportes para nuestra salud.
No es un secreto que el chocolate es uno de los ingredientes más utilizados en la industria de la belleza. Se ha demostrado que este alimento posee una gran cantidad de elementos que benefician nuestra salud tanto por dentro como por fuera. ¡Así que no le tengas miedo! Vamos a descubrir sus múltiples beneficios para potenciar la belleza.
El chocolate es un placer para los sentidos y no solo cuando lo comemos. Ya existen exfoliantes, cremas, mascarillas y hasta jabones y champús que proporcionan a tu cuerpo todos los beneficios del chocolate.
El chocolate con un alto porcentaje de cacao es el mejor para beneficiar a la piel, así que si deseas utilizar un producto con cacao, éste debe tener como mínimo un 65 a 70% de este ingrediente.
El chocolate es muy recomendado para realizar mascarillas faciales caseras para todo tipo de piel. Esto se debe a sus muchas propiedades, entre ellas la capacidad de hidratar de forma efectiva nuestra dermis, resultando genial tanto para el rostro como para el resto del cuerpo.
El chocolate negro es el más beneficioso debido a su alto contenido de cacao. Este ingrediente ayuda a combatir la inflamación de la piel, por eso es fantástico cuando la dermis presenta algún tipo de irritación o inflamación, por ejemplo en casos de acné.
Otro de los beneficios del chocolate para la piel es su capacidad de ayudarnos a luchar contra el envejecimiento prematuro, gracias a su gran aporte de antioxidantes. Por eso cuando aplicamos una mascarilla facial o corporal de chocolate observamos que al retirarla nuestra piel está mucho más suave y con una apariencia saludable y rejuvenecida.
El chocolate también beneficia la circulación del rostro y el cuerpo, dando la sensación de que nuestra piel es mucho más lisa y tersa. En el rostro, su aplicación ayuda a suavizar las arrugas de forma notable, y en el resto del cuerpo disimula la presencia de marcas.
En algunos estudios realizados se descubrió que el chocolate amargo tiene la capacidad de ralentizar el proceso de envejecimiento, pues detiene la acción de los radicales libres. Asimismo, tiene la capacidad de mejorar el tono y la suavidad de la piel.
Combinado con la cafeína es un excelente antiinflamatorio, lo que es ideal en aquellos casos de retención de líquidos, pues un masaje hecho con esta mezcla mejora la circulación de la sangre y de otros líquidos que se acumulan en el organismo.
Si todos estos beneficios aporta el chocolate a nuestro cuerpo… ¿Qué maravillas podrá hacer en nuestro cabello?
El chocolate también es un gran aliado para el pelo. Nuestros ancestros usaban el extracto de cacao para teñir sus cabellos y ayudarlos a contrarrestar los daños causados por el polvo y las condiciones climáticas tan drásticas en las que vivían.
Hoy en día existen en el mercado gran cantidad de champús que incluyen un alto contenido en chocolate. Esto permite que el cabello se beneficie con las propiedades que éste brinda:
- Aclara: El champú de chocolate ayuda a aclarar el cabello, pero manteniendo su color natural.
- Alisa: Con una aplicación constante, las propiedades y vitaminas actúan desde la raíz facilitando el alisado del cabello.
- Protege el cabello: Ayuda a proteger el cabello de los rayos UV y de la contaminación a la que está expuesto a diario.
El chocolate, además de ser uno de los dulces más preciados para los sentidos también lo es para nuestra piel y cabello.
¡Con razón dicen que aumenta la sensación de felicidad y bienestar!