Soy una enamorada de los labiales, lo reconozco, pero también que soy muy especial a la hora de escoger mis favoritos. No todos los colores me gustan, ni todos me sientan bien. Por eso busco y busco y rebusco hasta que consigo encontrar ese color que me vuelve loca.
Antes de nada deciros que para que un pintalabios sea bonito y te siente bien no tiene por qué ser caro ni de una marca “high level”. Tienes que buscar tu pintalabios de cabecera y probar muchos hasta que lo encuentres. Eso sí, cuando lo encuentres, hazte con 3 ó 4 (por si acaso) porque las marcas son especialistas en retirar el color de tu vida una vez que lo has encontrado… Y otra vez a comenzar la búsqueda…
Hablando de probadores, para mí es fundamental probarme los colores antes de nada ya que es la única manera de saber y ver cómo le sientan a mis labios. Porque ya sabéis que el tono de la piel de los labios de cada persona es diferente y un color que a una le siente de maravilla a otra le puede ir fatal.
Bueno, pues la mayoría de las marcas tienen como probadores barras de labios “Tester” que a mí no me hacen ninguna ilusión, es más, me da reparo probarlos en mis labios porque soy escrupulosa y no sé quién se lo ha puesto antes, además de los contagios que puede causar porque a través de la saliva se pueden contagiar infecciones como el herpes labial.
A ver, qué no quiero alertar a la población femenina pero si aconsejaros que si los “Tester” son barras de labios para uso común, os las apliquéis para probarlas siempre en la mano y lo retiréis luego con un tissue.
Voy a aprovechar para reivindicar desde aquí que las marcas usen como “Tester” por ejemplo pinceles de usar y tirar para que así no haya ningún contacto con la boca. O también que hagan pequeñas muestras individuales de un solo uso. Porque para mí es fundamental ver cómo queda el color puesto en mis labios y con los probadores de barras de labios es imposible ya que viendo el color en la mano no te haces a la idea.
Para elegir el color del labial es muy importante tener en cuenta el grosor de nuestros labios. Por ejemplo, el color rojo es muy complicado ya que tanto a los labios más gorditos como a los labios finos no les suele ir bien. El rojo es un color para labios intermedios.
¿Sabes que para cada tipo de piel y color de cabello existe un color de labios ideal? Por ejemplo:
Si eres rubia: Puedes apostar por los marrones, rojos y crudos.
Si eres pelirroja: Los tuyos son los tostados, rouges y corales.
Para las morenas: Los rosas claros te pueden sentar bien. También los anaranjados.
Para las pieles oscuras: Fucsias y marrones y beige. Los contrastes son explosivos.
¡Todo es probar!
Si estás bronceada, lo primero es hidratar en profundidad con una fórmula que rehidrate los labios. Es muy importante exfoliar e hidratar los labios de vez en cuando para que estén siempre jugosos y bonitos. No hay nada menos sexy que unos labios resecos.
Después, opta por colores pastel, siempre muy suaves. Durante el día son muy favorecedores dado que aportan un toque fresco.
Yo soy una enamorada del nude, que como bien sabéis es un tono superior al color carne. Es un color que me gusta mucho para las rubias, para las muy morenas no porque pueden parecer Morticia Adams.
Me enamoran los colores básicos para manos y labios. Yo apuesto siempre por el “color novia”. ¡Ponte cada día como una novia! Ese es mi lema.
Mi favorito es un color mate con un gloss nacarado en el centro. Jugar con dos colores, uno para toda la boca y otro en el centro para destacar y voluminizar.
Mi opinión es que los colores fresas y fucsias también son complicados. Pero puedes atreverte con un rojo pasión por la noche, dependiendo de la ocasión. Es un color potente que acapara todas las miradas. Procura dejarle todo el protagonismo maquillando tus ojos con lo justo y necesario: un toque de máscara de pestañas y listo. Ya sabéis que hay que resaltar una de las dos cosas o la boca o los ojos. Resaltar mucho los dos es recargar. Y en esto del maquillaje para mí menos es más.
Muy importante también, que el color de labios vaya con tus dientes. El color de labios que elijas tiene que hacer más bonita tu boca incluida la sonrisa.
Dos trucos a tener en cuenta:
Tus labios son poderosos, si eliges el color que más les va descubrirás cómo cambiar tu look y conseguir un “beauty look” perfecto.