Cuando la semana no ha ido bien, cuando surgen problemas inesperados, cuando hoy estás allí y mañana allá con la maleta a cuestas, cuando nos falta energía, cuando los días se hacen interminables, cuando sentimos que es el momento de desconectar… Nuestra piel es la primera que sufre y nos pide a gritos un respiro.
Todo afecta a nuestra piel y hay que saber escucharla para darle el empuje vital que necesita, para que vuelva a sentir la energía.
Chicos, hay que saborear la vida a tope y liberar a nuestra piel de los radicales nocivos que la estresan a lo largo del día. Si nosotros disfrutamos, nuestra piel disfruta.
Frescor, hidratación, luminosidad, vitalidad, juventud… eso es lo que necesita.
Menos mal que existe Sesderma en mi vida y sus nuevos Mist que reúnen todas las propiedades que mi piel necesita gracias a sus principios activos. Ya no salen de mi bolso y los tengo siempre a mano porque son el aliado perfecto y un booster de belleza para lucir radiante durante todo el día.
Cada Mist tiene una misión diferente, acorde a las necesidades de tu piel en cada momento, pero a mí el que más me gusta es C-Vit Liposomal mist.
Acude como un soplo de brisa a las llamadas de emergencia: ¿Tu piel está apagada? Dale un toque de frescura. ¡Una explosión de luz en tu piel!
El Mist de C-VIT aporta vitamina C a la piel, una dosis de frescura con un aroma afrutado de naranja que potencia la luminosidad. Las múltiples propiedades de la vitamina C y su poder antioxidante, ayudan a mantener una piel sana y radiante en cualquier lugar, en cualquier momento.
Para quienes todavía no conocéis los Mist de Sesderma os diré que es un producto mágico. Es una fórmula con un alto contenido en fosfolípidos. Contienen una elevada concentración de principios activos, retinol, Vitamina C, factores de crecimiento, ácido hialurónico, ácido tranexámico, colágeno…
El Mist no es solo un producto para aplicar antes de la crema. Vaporízalo sobre el rostro después de tu rutina habitual y en cualquier momento del día para potenciar tu belleza y fijar el maquillaje.
Como comentaba el día de la presentación de los nuevos Mist el Dr. Gabriel Serrano, dermatólogo y Fundador de Sesderma, “las aguas termales refrescan pero no hidratan, no tienen acción terapéutica, dañan la barrera lipídica de la piel y no se absorben ni penetran en la misma.”
Los activos de estos Mist, encapsulados en burbujas lipídicas que se pulverizan directamente sobre el rostro, alcanzan fácilmente la dermis y aseguran una penetración más directa y eficaz.
Actúan en la superficie del cutis restaurando la función barrera de la piel y manteniéndola intacta frente a las agresiones externas.
El Mist es lo primero que mi piel recibe cada mañana y cada noche nada más limpiarla, antes del sérum y de la crema hidratante. Pero además, dependiendo del momento del día en que me encuentre, en cuanto noto que mi piel necesita un respiro lo saco del bolso y me pulverizo en un momento. Además me fija mucho el maquillaje y me aguanta un montón.
Es un placentero baño de antioxidantes que me regala protección en cualquier momento del día, potenciando la juventud en mi piel y el cuidado antiaging.
Nadie mejor que tú sabe lo que tu piel necesita, por eso os recomiendo elegir vuestro Mist de Sesderma y llevarlo siempre con vosotras como aliado esencial en vuestra rutina de belleza.
A cada tipo de piel, una bruma diferente.