La celulitis, el último escollo de la operación bikini

La celulitis puede llegar a convertirse en un auténtico problema. Además, los factores que la provocan son muchos y, a veces, cuesta ponerle freno. Imaginemos que tenemos una alimentación donde las frutas y verduras son las protagonistas: pues, por muy sano que pueda parecer, también puede fomentar la aparición de la piel de naranja si nuestro cuerpo tiende a almacenar líquidos o si no quemamos el azúcar que consumimos. Nuestro organismo es una verdadera máquina de convertir azúcares y carbohidratos en grasa, así que hay que tener cuidado. Otro factor a tener en cuenta es que si nos hemos pasado la vida subiendo y bajando de peso, o si hemos tenido un cambio muy brusco en poco tiempo, aumentan muchísimo las posibilidades de que aparezca la tan temida celulitis. También depende mucho de que se note más o menos el tipo de piel que tengamos, así que sí, es posible estar en tu peso y tener las piernas llenas de celulitis.

Ahora que llega el verano todo lo que durante los meses de frío ha estado tapado sale a la luz, y empezamos a examinar hasta el último detalle de nuestro cuerpo para comprobar que esté preparado para la temporada de playa y pantalones cortos. Y, claro, aparecen las prisas porque, aunque nos hayamos portado bien con la dieta, es posible que la piel de naranja no haya terminado de desaparecer. Por eso, quiero daros algunos consejos que realmente funcionan para acelerar lo máximo posible el proceso de acabar con la celulitis de una vez por todas.

El primero de todos es moverse. Caminar a todas partes. Hace buen tiempo, así que ir caminando al trabajo o dejar el coche un poco más lejos para disfrutar de un paseo antes de entrar es una buena idea para ganar pasos y restar calorías. Otra opción es olvidarse del ascensor de una vez por todas y empezar a hacernos amigos de las escaleras.

Otra cosa que nos ayuda mucho es un buen masaje, a ser posible con un rodillo o algo medianamente fuerte como para romper la célula adiposa. Si lo combinamos con una buena crema anticelulítica, mejor que mejor.

El agua también juega un papel fundamental a la hora de acabar con la celulitis, ya que facilita el drenaje. Es importante beber dos litros de agua al día e intentar que el agua de la ducha esté lo más fría posible, ya que así se activa la circulación.

Por último quiero hablaros de un tratamiento intensivo que he conocido gracias a Cuca Miquel, de Todo en Belleza: el VellaShape III. Es un equipo muy potente que ayuda a combatir la celulitis y minimizar la flacidez que puede habernos quedado después de perder peso, además de reducir el volumen corporal. Es un tratamiento muy seguro y nada doloroso, aunque el calor que se desprende llega hasta los 44ºC, lo cual favorece que se rompan las células adiposas. El equipo combina una sinergia de infrarrojos y radiofrecuencia bipolar, que son los encargados de calentar las capas profundas de la piel y expulsar el contenido de la célula lipositaria que, al estar vacía, pierde mucho volumen. Por otro lado, combina esta sinergia con la vacouterapia, que favorece el drenaje linfático. El tratamiento se puede dar en tres sesiones, una cada quince días, o una única sesión intensiva. Además de todo esto, es un proceso que no requiere anestesia y no es nada invasivo.

Después de habernos portado muy bien con la operación bikini o con nuestra dieta durante todo el año, ha llegado el momento de dar los últimos retoques para lucir buen cuerpo en la playa, ¡y podemos conseguirlo!