Caléndula, todo en uno
El otro día una señora me habló de la caléndula y me quedé maravillada con todo lo que me contó sobre ella. Así que he estado informándome un poquito para contaros todos sobre esta planta con súper poderes tan utilizada en medicina tradicional y en estética. Si no la conocéis aun, os va a sorprender tanto como a mí, y si ya sabíais de ella, quizá descubráis algo nuevo.
Es originaria del sur de Europa, de la región mediterránea, aunque actualmente se cultiva en muchas partes del mundo. Lo que necesita es un clima templado. Sus flores, tipo margaritas grandes, son de tonos amarillos y anaranjados muy llamativos y florece durante todo el año. Lo que más se utiliza de la planta son sus flores pero se aprovecha todo (hojas, tallos y raíces).
Se puede consumir en diferentes formatos. Entre otros, podemos encontrar productos con caléndula en crema y en aceite (ambos para afecciones cutáneas), infusiones, en forma cataplasma (esto se hace directamente con la planta) y decocción (para conjuntivitis, párpados hinchados e incluso orzuelos). Según el fin para el cual la vayamos a utilizar, convendrá más un formato u otro. Si se utiliza la planta directamente, según para qué, su uso puede ser en fresco o en seco. Las propiedades de la planta en seco se van perdiendo con el paso del tiempo, por tanto, un año desde su secado sería su fecha de consumo preferente, así para que nos entendamos.
Es una planta con propiedades antiinflamatorias, fungicidas, cicatrizantes, antibacterianas, etc. Ya la usemos externa o internamente, aporta numerosos beneficios a nuestra salud. Tiene tantos que no se ni por dónde empezar. Os voy a hacer un resumen de algunas de sus aplicaciones.
PIEL:
- Previene la deshidratación de la misma y combate el envejecimiento prematuro, ya que tiene grandes propiedades antioxidantes, por lo que también ayuda a reducir las manchas y las arrugas. Y favorece la producción de colágeno.
- Para tratar estrías.
- Es un buen remedio contra los problemas de acné y espinillas ya que contiene ácido salicílico y por su efecto bactericida (combate las bacterias que dañan la piel).
- En forma de ungüento, podemos tratar quemaduras leves. Su aplicación en pequeñas heridas ayuda en el proceso de cicatrización.
- Las durezas, herpes y dermatitis atópica pueden ser tratadas con aceite de caléndula. Para las durezas, por ejemplo, también se puede aplicar la caléndula en forma de cataplasma dos o tres veces al día. Muchas cremas para los pies, que es donde normalmente nos pueden salir durezas, contienen ácido salicílico, y como ya hemos visto es uno de los componentes de la caléndula.
- Recomendada también para la dermatitis del pañal. Ayuda a aliviar las erupciones que los pañales puedan ocasionar.
PELO: Los champús con caléndula, usados de forma regular, combaten la caspa. Mantiene el cuero cabelludo hidratado y por sus propiedades regenerativas hace que los folículos tengan las condiciones idóneas para que el pelo crezca más fuerte.
SALUD BUCAL: en el mercado se comercializan pastas de dientes y enjuagues bucales con caléndula. Como ya hemos dicho antes, es antibacteriana, y es por eso que estos productos son muy efectivos para proteger la salud bucal y ayuda con problemas bucales tales como la gingivitis, las caries, cavidades…
Para el resto de aplicaciones que os voy a contar, se aconseja que primero consultéis con un médico. Así mismo, la ingesta de té de caléndula está contraindicada para mujeres embarazadas. Y si vais a empezar a usar algún producto con caléndula para tratar alguna cosa en especial, de lo mencionado anteriormente o lo que os cuento a continuación, informaros bien de cuál es la mejor forma de aplicación para esa cosa concreta.
- Tiene propiedades antiespasmódicas, lo que es perfecto para los dolores menstruales. He leído incluso que ayuda a regular el ciclo. Y hablando de estas cosas, hay estudios en los que se ha visto que el aceite esencial de caléndula tiene propiedades fungicidas que ayudan contra infecciones vaginales como la candidiasis.
- Problemas DIGESTIVOS: por su poder antiinflamatorio, puede ayudar a normalizar el sistema digestivo y por su acción cicatrizante es buena para tratar úlceras gástricas. También en casos de gastritis, gastroenteritis y vómitos.
- Sistema respiratorio: alivia la irritación de garganta mejorando así los problemas de tos. Y ayuda en otros problemas respiratorios como el asma, la amigdalitis o la laringitis.
Y podría seguir diciendo cosas para las que la caléndula es beneficiosa, pero ¡es que son demasiadas!
¿Vosotros ya conocíais todas estas propiedades de la caléndula? ¿Usáis productos con caléndula? Porque yo ahora la voy a incluir en mi lista de imprescindibles.