El episodio visto ayer con Reyes Estévez de protagonista es probablemente lo más curioso e inexplicable de cuanto he visto nunca en Supervivientes. Un tío que se atribuye la pesca de otros con tanto rostro como este se merece que le dedique unos cuantos párrafos. Hasta ayer se trataba de uno de los que me sobraban en este concurso porque parecía estar desaparecido, pero ahora me come la curiosidad por ver si repite una salida como la vista ayer en la tira diaria. ¡La repanocha en bicicleta!
Pero antes de ir al gran tema del día me gustaría poder adelantar algo de lo que va a ocurrir esta noche. Digo bien me gustaría porque no tengo ni la más remota idea de lo que trama el equipo de este programa, por lo cual habré de sustituir la información con una buena dosis de deseos personales apoyados en ciertas dotes precognitivas que siempre he tenido. Por ejemplo, hoy me gustaría que no saliera expulsado Toni Genil. Sería una faena que se jugase permanecer en el concurso con un genio como Reyes, capaz de apropiarse de lo pescado por Emma y encima decirle a esta: "Deja claro que lo he pescado yo, eh". Es que no puedo evitar volver al tema. Sigo con lo mío.
No sé si sería injusto expulsar a Toni esta noche pero seguro que es una torpeza inmensa. No me gusta hablar de justicia cuando me refiero a algo completamente lúdico como es un reality show, aunque haya unas buenas cantidades de dinero en juego que ni alcanzo a ver. Pero si hubiera de explicarle a alguien lo que algunos pueden entender por injusticia en un concurso como este no dudaría en contarle que se trata del extraño fenómeno por el cual puede continuar en la isla un bulto sospechoso de nombre Jessica, y Bueno de apellido, mientras la audiencia manda para casa a uno de los concursantes que más juego está dando. Con muchísima diferencia, además.
Porque... vamos a ver que yo me entere. ¿A qué demonios ha ido Jessica? Aparte de tontear un poco con Montalvo primero y luego con Kiko, ni pincha ni corta. No participa en nada y apenas se la escucha en los resúmenes si no es para aclarar que "no tiene ganas de na'", como decía Miguel Caiceo hace unos pocos de años. Y no contenta con todo esto, ni siquiera participa en las pruebas de recompensa.
Hasta el momento esas pruebas están siendo planteadas como una batalla entre anónimos y famosos. Como siempre han sido más estos últimos les hacen decidir quienes no participarán para que las fuerzas queden igualadas y compitan en ambos bandos el mismo número de concursantes. Si tenemos en cuenta que Reyes está en tierra de nadie, aunque viva en Cabeza de León y conviva (hasta el momento también como una presencia sospechosa) con los anónimos, ahora mismo estos son seis frente a ocho famosos. Por tanto, dos no podían participar en el último juego de recompensa.
Cualquiera un poco sensato pensaría que habían excluido a Kiko 'lorcitas color canela', cuya participación en las pruebas ha sido siempre bastante desastrosa. Más justificado incluso hubiera estado que no participase Tamara, puesto que un rato antes decía no tener fuerzas ni para incorporarse y poder dar un trago a un coco. Además, el día anterior había tenido el desmayo que todos hemos visto.
Pues bien, ni Kiko ni Tamara. Las concursantes excluidas fueron Rosa y Jessica. La primera ha hecho un buen papel en algunas pruebas, habiendo llegado a disputarse el liderazgo la pasada semana. Mejor que Kiko era muy posible que lo hiciera, aún así se puede explicar su no participación en razón de su edad. Pero no es la primera vez que Jessica no participa en una prueba, y en este caso se me antoja imposible encontrar una excusa razonable para ello.
Supongo que la cosa es tan simple como esta: no participa porque no le sale de las narices. No me sorprende porque en la vida siempre hay quien se cree predestinado para servir a los demás y quienes piensan que los demás están para servirles a ellos. En este grupo se encuentra Jessica. Lo que me parece extraño es el silencio aprobatorio de todos los demás, excepción hecha de Sonia. Nadie critica a Jessica, a la que no están negando la cuota parte de alimentos, idéntica a la de quienes aportan su esfuerzo y trabajo al grupo.
Por esto insisto en una cosa: a pesar de que cada día parezca más flipada y sigue pareciéndome lógico que la llamen loca, entiendo en el fondo a Sonia. Comprendo que no quiera participar de la mascarada, por muy duro que parezca aguantar de esa manera en el concurso. Es normal que rechace congraciarse con un grupo que critica a quien no debe y permanece callado ante una concursante que no ha tenido un solo día la iniciativa de vigilar el fuego durante la noche, como le acusaba directamente Montalvo hace unos días. Bien es verdad que lo hacía hablando con un tercero (Toni en este caso) y no dirigiéndose a ella.
Me revienta que pueda salir esta noche Toni y permanezca Jessica en la isla sin salir de su pasmo permanente (tendente a la parálisis). Pido por eso que el destino quiera un desenlace distinto. No en vano Tamara parece estar deseando marcharse, aunque no lo diga claramente (entre otras cosas porque, por contrato, no puede hacerlo). No dudaré de su desmayo, pero creo que al mismo le acompaña un cierto deseo de ver acabada esta aventura para ella, poniendo como excusa su debilidad y falta de energía. Como se descuide le ponen una dieta terapéutica de esas y le dejan sin excusas.
Sobre la forma como se producirá la unificación, solamente sabemos que los anónimos levantarán el campamento (es lo que se lleva estos días) e irán a Cayo Paloma, donde si añadimos a los concursantes todo el equipo técnico y de redacción que anda con frecuencia por allí, igual en algún momento dejan de caber. Lo normal es que no descubran en un primer momento el secreto de Reyes, a quien ayer imaginaban los famosos en su casa tranquilamente, sin saber que está todavía a escasos metros de ellos.
Apuesto a que dejarán durante algún tiempo (aunque sean horas) a Reyes y el expulsado de esta noche en Cabeza de León, pidiendo a los anónimos que mantengan en secreto lo del atleta. Podrían incluso estar allí solos una semana y no sería la primera vez que vemos algo así. No puedo evitar recordar a Matías y Escassi solos, alimentándose exclusivamente de almendras durante toda una semana en esa misma playa.
En todo caso, sospecho que solo uno de los famosos expulsados hasta ahora se logrará salvar. Falta saber si tendrán que pasar una prueba, se abrirá el televoto o decidirá Montalvo como poseedor de la caja que le otorgará un poder especial. Incluso puede que ocurra todo lo contrario, como suelo decir.
Y voy ya con el momentazo de Reyes 'el pescador', mote que no se lo va a quitar nadie a partir de ahora. Relato la historia para todos aquellos que no hayan podido ver las imágenes. Emma y Carolina están pescando subidas a las rocas, lugar donde consiguen piezas de un tamaño considerable, mucho más presentables que los 'pezqueñines' de Rosa y Tatiana. A las dos se les quedan enganchados los anzuelos entre las rocas y Emma le pide ayuda a Reyes desde la distancia.
En el lapso de tiempo que Reyes tarda en llegar, sospecho que bastante prolongado, Carolina creo que recupera su anzuelo, aunque no me queda del todo claro viendo el vídeo. A continuación, aparece por fin Reyes en auxilio de Emma, cuyo sedal continuaba enganchado sin poder sacarlo del agua. Resulta que no le esperaba rescatar el anzuelo solamente sino que este venía con un pescadito bastante hermoso, seguramente la razón por la que no podía subir el hilo al haber quedado trabado entre las rocas.
Reyes lo recupera y descubre el premio. Saca el pez tirando del sedal y lo mira repetidamente, de un lado y otro. Es una buena pieza, ya digo. Le devuelve el conjunto a Emma, quien se marcha a la playa para dejar a buen recaudo el pez capturado. Cuando la concursante se está marchando Reyes dice la frase clave: "Dí que lo he pescado yo". ¡Manda huevos!... de esturión, si eso.
Ahí no acaba la cosa. Reyes hace un 'confe' después en el cual declara que no había probado nunca antes a pescar con sedal y el haber logrado pescar esa pieza le sirve para animarse a intentarlo en ocasiones futuras. ¿Perdón? ¿La primera vez que pescaba así? ¿Satisfecho por haber pescado? Ejem... pero si el pez era de Emma y él se limitó a sumergirse para lograr desengancharlo de las rocas. ¿Estamos locos o qué? Que forma más penosa de tomarnos el pelo. Me caía bien el atleta, pero ha demostrado ser bastante merluzo, nunca mejor dicho.
La forma que tienen algunos famosos, especialmente Tamara y Rosa, de fiscalizar los movimientos de Toni me parece totalmente impresentable. Están pendientes de si le da de su coco a Sonia, si hablan o dejan de hablar. Parece que les obsesiona lo que hagan los demás. Por eso felicito a Toni por no dejarse influir y seguir relacionándose con ella como si nada hubiera pasado, mostrándole el mismo cariño de siempre. Eso sí, también le interesa llevarse bien porque ya pactó cederle un poco de su arroz a cambio de dos pescaditos al día. Este sí que sabe de supervivencia, y para mí tengo que venía ya aprendido.
Hoy a Rocko se le han revelado los lápices mientras dibujaba a Toni. Me ha hecho mucha gracia.