Un merecido reconocimiento a los desactivadores de explosivos
Los grupos de desactivadores de explosivos de las Fuerzas Armadas llevan un mal año. Cuatro fallecidos en estos meses, tres de ellos hace sólo unos días en Viator, Almería, y otro más en enero en Afganistán. Su labor callada y tranquila, abre paso al resto de las unidades a veces con un gran sacrificio personal.
El pasado jueves la Asociación de Periodistas de Defensa (APDEF), a la que pertenecemos los autores de este blog, celebramos nuestra gala anual con la presencia del ministro de Defensa, Pedro Morenés, y buena parte de la cúpula militar. En ella concedemos diversos premios como reconocimiento y este año el Premio Especial de la APDEF fue para la Unidad de Ingenieros ASPFOR XXXII a la que pertenecía el sargento David Fernández Ureña, fallecido en enero en Afganistán cuando desactivaba un artefacto explosivo improvisado (IED). Un reconocimiento que se ha querido hacer extensivo a todos los grupos de desactivación por el trabajo que han hecho en las distintas misiones. A ellos les hemos dedicado el vídeo que pueden ver en este artículo, en el que tratamos de resumir lo que hacen, como se preparan y como arriesgan para que el trabajo de sus compañeros pueda llevarse a cabo.
Pero hubo más premios. El premio Trayectoria a Alberto Asarta, general que acaba de pasar a la reserva, por su larga trayectoria en puestos de máxima responsabilidad, como jefe de la base de Nayaf en Irak o de la misión de la ONU en el Líbano, y por el buen trato que siempre ha dado a los periodistas. El premio Bernardo Álvarez del Manzano se concedió a Joaquín Madina, ex jefe de prensa del Ministerio de Defensa, elegido por haber abierto las misiones internacionales a la presencia de periodistas tras muchos años de cerrazón por parte del Ministerio.