Rocío Jurado adquirió su casa en Madrid en el año 1988 y, desde entonces, Montealto fue escenario de sus años más felices así como de momentos muy importantes que vivimos todos a través e la prensa. Sus herederos no pudieron quedarse con ella y, tras ser adquirida por alguien, cayó en manos del banco y ahora ha vuelto a cambiar de propietario.
Allí, Rocío Jurado vivió momentos como la presentación de sus hijos ante los medios o la rueda de prensa que Rocío dio para explicar que sufría una enfermedad.
La cantante dejó muy claro en su testamento que ninguno de sus herederos podría adquirirla con lo que, seis meses después de su muerte, José Ortega Cano se mudaba y la vivienda se ponía a la venta.
Se vendió, pero el propietario cayó en bancarrota y la mansión quedó en manos de un banco. Estaba a la venta por 3.400.000 euros y finalmente tiene nuevo dueño tras varios años abandonada.
En ‘Así es la vida’ hemos podido trabajar con los obreros que nos cuentan que, por el momento, están llevando a cabo labores de demolición.