María Teresa Campos está ingresada en la Fundación Jiménez Díaz desde el pasado 3 de septiembre aquejada de una insuficiencia respiratoria y su situación es difícil según se apunta en el segundo parte médico remitido a los medios de comunicación. La presentadora vive apartada de la vida pública desde hace algún tiempo, cuando su salud empezó a verse afectada.
En enero de este mismo año, la salud de María Teresa Campos sufrió un bache tras sufrir una caída de la cama. Parecía algo sin importancia, sin embargo, la comunicadora no terminó de recuperarse y Carmen Borrego nos contaba meses después que su madre sufría un deterioro cognitivo.
Al principio, ninguna de sus hijas hablaban de la situación de su madre pero, poco a poco, se supieron algunos datos. "Si ella no sufriera y solo sufriéramos nosotras, yo lo firmaba", decía Terelu y Carmen nos contaba: "En su mundo, ella quiere seguir trabajando".
Poco a poco, Teresa Campos estuvo más alejada de los focos, pero sus hijas dejaron claro que no prohibieron la entrada en su casa a nadie sino que los médicos recomendaban restringir las visitas porque le alteraban.
A petición de las hijas de la presentadora, el equipo médico del hospital emitía un comunicado en el que señalaban que, con el paso de las horas, la situación clínica de María Teresa "ha empeorado" con lo que la situación es "muy grave".