Una día más, Quicky, una de las concursantes más veteranas con 27 programas en 'Alta Tensión', se ha enfrentado al 'minuto diabólico' del programa.
Antes de comenzar a jugar y con un bote que ya asciende a 560.500 euros, Quicky le ha prometido al presentador del programa invitarle a comerse una hamburguesa si consigue el premio.
Aunque finalmente se ha quedado sin el premio, la concursante regresará en el próximo programa para seguir intentándolo.