Los buenos tiempos del hijo de Carmen Borrego con las Campos: cuando la guerra no se veía venir

Como no podía ser de otra manera, Terelu Campos quiso estar al lado de su hermana, Carmen Borrego, en su regreso a España para agarrarle la mano mientras esta hacía frente a la demoledora entrevista que ha concedido su hijo, José María Almoguera, en una conocida revista.

Aprovechando su regreso a Telecinco, la hija mayor de María Teresa Campos se mostró muy sincera y criticó con dureza las declaraciones de su sobrino, asegurando que había dicho “mentiras y cosas injustas”.

No cabe duda de que la madre de Alejandra Rubio está muy decepcionada con el que un día fue su ojito derecho y el de todo el clan. Damos un salto al pasado para recordar los buenos tiempos de José María Almoguera con las Campos y cuando no se esperaba, ni por asomo, que algún día ocurriría algo así.

En el año 2021, un debate surgió en el plato de ‘Viva la vida’, el programa que Emma García presentaba los fines de semana en Telecinco y donde trabajaban Carmen Borrego, Alejandra Rubio y Terelu Campos.

Los colaboradores aseguraban que María Teresa Campos tenía una relación muy especial con la ahora ¿novia? de Carlo Costanzia y parecía que era su nieta favorita. Sin embargo, Terelu Campos explicó que eso no era así.

Declaró que era verdad que entre ellas existía mucha conexión, pero que quien realmente era el ojito derecho de su madre era José María Almoguera: “Su niño es su niño. Es el hombre de su vida y me parce maravilloso”.

Ella, que también tenía devoción por su sobrino, aclaró que no sentía celos de que fuera el nieto favorito y explicó que, para ella, el hijo de Carmen Borrego también era una persona muy importante: “Para mí, él también es especial”, declaró con una sonrisa que dejaba entrever que era su sobrino predilecto.

A diferencia de lo que lleva ocurriendo varias semanas, por aquel entonces era poco habitual que se hablara en televisión de José María Almoguera, ya que era un chico muy discreto que no se dedicaba a dar exclusivas y cada vez que se oía su nombre era por algo bueno.

Siempre que se escuchaba a alguien hablar del joven era para alabarlo como sobrino o primo, ya que en el clan de las Campos había cierta predilección por él. Algo que parece haber cambiado, ya que el sentimiento general en la familia parece de desconcierto y decepción.