El biopic relata la vida de esta cautivadora mujer, hija, sobrina, esposa y madre de toreros. Será un recorrido desde su infancia, en la década de los 60, pasando por los acontecimientos más destacados de su vida, sus matrimonios con el diestro Paquirri, el cantante Julián Contreras y el bailarín Ernesto Neyra y el nacimiento de sus tres hijos, hasta su repentina muerte en julio de 2004.

Dos jóvenes promesas de la interpretación nacional, Carla Díaz y Ana Caldas, encarnan a la protagonista en su niñez y juventud en esta ficción que cuenta también en su elenco con Belén Argüello, Petra Martínez, Miquel Fernández, Mauricio Bautista, Ángel Caballero, Miguel Diosdado, Santiago Meléndez, Cristina de Inza, Yohana Cobo, Noelia Muñoz y José Ángel Trigo, entre otros actores.

Rodada en escenarios naturales y urbanos de Madrid, Sevilla, Huelva y Marrakech, 'Carmina' recorre aproximadamente 40 años de su vida, recogiendo tanto su evolución personal a lo largo del tiempo, como sus cambios de imagen y los vaivenes de la moda, desde los años 60 hasta 2004.

Una infancia feliz en la que compartió juegos y confidencias junto a su hermana Belén, bajo la atenta mirada de la estricta y cariñosa Tata, constituye el punto de arranque de esta producción televisiva. Proveniente de una de las sagas taurinas más importantes y educada para convertirse en esposa de torero, Carmina abandona pronto el hogar paterno para contraer matrimonio con Paquirri, el más famoso y atractivo diestro del momento.

Consciente de que sus obligaciones como esposa del matador le impiden satisfacer sus propias necesidades e incapaz de adaptarse a una vida en segundo plano, Carmina, madre de dos hijos, decide dar un giro radical a su vida: poner fin a su matrimonio para encontrarse a sí misma y disfrutar plenamente de la vida.

Emprende entonces un camino sin retorno marcado por amistades que sobreviven en el tiempo, amores que quedan en el camino, peligrosas compañeros de viaje y el apoyo incondicional de su hermana Belén. En su huída hacia adelante, se enfrenta al mayor de sus temores, la soledad, de la que no pudo escapar a pesar de otros dos matrimonios fallidos, con el cantante Julián Contreras, padre de su tercer hijo, y con el bailarín Ernesto Neyra. Y mientras convertía las exclusivas en su forma de vida, su continua exposición en las páginas del couché diluyó los límites entre su vida pública y su ámbito privado.