Antonio no recordaba que cumplía 25 de casado con Berta. Ella ha hecho planes para ambos: ir a misa, pasear de la mano y celebrar una cena romántica en un restaurante céntrico. Recio se ha negado a todo pero, al final, ha cedido a la cena con tal de que le diera tiempo de asistir a su amada junta de la comunidad.